Los diputados rechazaron esta noche la moción de censura que se intentó imponer contra el ministro de Educación, Édgar Mora, una iniciativa impulsada por Restauración Nacional —con el apoyo de otros diputados— después de un polémico tuit del jerarca sobre el suicidio a inicios de junio pasado.
En aquel entonces, Mora escribió en su cuenta de Twitter que el “suicidio es una forma de decir la verdad, posiblemente la más vehemente de todas” como respuesta a un youtuber costarricense. Ese texto fue interpretado por algunos legisladores como una forma irresponsable de tratar aquel tema.
Esta tarde, la votación en el Congreso fue privada y dividida. Finalmente se utilizaron boletas y la distribución de votos fue de 21 a favor, 30 en contra y uno nulo. La suma requerida para la aprobación eran 38 votos, muy lejos quedaron los obtenidos.
La moción había sido firmada por 22 diputados, incluidos los 14 de RN, Dragos Dolanescu y Otto Roberto Vargas del Republicano Social Cristiano, Walter Muñoz y Silvia Patricia Villegas del Partido Integración Nacional, el independiente Erick Rodríguez, y los socialcristianos Óscar Cascante y Shirley Díaz. No obstante, Rodríguez dijo haber votado en contra, Abarca y Villegas no asistieron y otros también podrían haber cambiado sus opiniones.
Lo único cierto es que finalmente privó el criterio de diputadas como Zoila Rosa Volio del PIN, quien fue enfática en calificar el posible voto de censura como un acto desproporcionado, tomando en cuenta que ese es un procedimiento se creó para situaciones “muy serias que amenazaran nuestro sistema jurídico”.
También se manifestó en esa línea, el frenteamplista José María Villalta, quien agregó que en la Asamblea “no se podría estar votando mociones de censura cada vez que un ministro meta las patas” pues, aunque “es cierto que su expresión se pudo interpretar, por una persona desinformada, como que trataba con laxitud el tema del suicidio (…) de ahí a decir que se estaba incitando el suicidio hay mucho trecho”.
No obstante, los diputados restauradores sostuvieron su férrea oposición y —casi en su totalidad— se manifestaron contra el ministro al que calificaron de “irresponsable” y “no apto” para desempeñar sus funciones. Eso sí, el diputado Cruickshank matizó esas afirmaciones y señaló que su voto pretendía ser un jalón de orejas que potenciara su trabajo.
Finalmente, fueron minoría los diputados de esta corriente y apenas alcanzaron siete votos además de los auriazules. Algunas bancadas, como la del Partido Unidad Social Cristiana, votaron aparentemente divididas. Destacó en la discusión que ni los diputados del Partido Liberación Nacional ni los oficialisas del Partido Acción Ciudadana hicieron uso de la palabra.
Según el verdiblanco Roberto Thompson, todos sus compañeros negaron la causa.
He votado en contra de la moción de censura al Señor Ministro de Educación, Edgar Mora, en compañía de mis compañeros de la fracción del @plncr . Resultado final de la votación: 21 votos a favor, 30 votos en contra, 1 votó nulo. Rechazada la moción de censura. A pasar la página!
— Roberto H. Thompson Chacón (@rothocha) July 6, 2018
No estuvieron presentes Carlos Ricardo Benavides ni Ana Lucía Delgado del PLN; los socialcristianos María Vita Monge y Pablo Heriberto Abarca; ni Silvia Patricia Villegas del PIN.
Como especial curiosidad, la votación quedó marcada porque debió anularse en primera instancia tras la utilización de bolitas blancas y negras para votar, un hecho que fue señalado por los diputados Eduardo Newton Cruickshank (PRN) y David Gourzong (PLN) como discriminatorio y forzó la repetición. Esta visión fue aplaudida y calificada como “histórica” por el resto de legisladores.
Antecedentes
Sobre este procedimiento, el ministro Mora ya había manifestado que le daba “la validez que tiene en la Constitución”, sin “asignarle una adicional ni desvalorizarla” en materia de proporciones. “Eso está sucediendo en un ámbito Legislativo. No es el que me corresponde a mí orientar ni intervenir, cada cosa está en su lugar”, había dicho.
También había señalado que tenía “la paciencia necesaria” para esperar el resultado, un proceso que se demoró por tres semanas hasta que esta noche se retomó vía acuerdo legislativo.
En relación con el tuit, el jerarca había pedido disculpas por “dejar espacio a la confusión con el tuit publicado”; sin embargo, los congresistas —especialmente los de RN— fueron implacables.
Contra Mora dicen tener una serie de desacuerdos, aunque destaca principalmente la promoción que hace el ministro de una educación laica. Esta posición choca de frente con la nómina legislativa más conservadora de los últimos años.
Pasada la situación con el tuit, los legisladores incluso habían pedido al presidente Alvarado suspender la distribución de un protocolo contra el suicidio, cuya entrega adelantó el MEP ante la polémica del ministro. Aquella moción fue intensamente criticada por la opinión pública y desechada por el presidente Alvarado.
Rechazada la iniciativa contra Mora, queda en el registro como la última moción de censura aprobada contra un ministro de la República la que ocurrió en 1995, cuando el entonces jerarca de Seguridad, Juan Diego Castro, bordeó la Asamblea Legislativa con oficiales de la Fuerza Pública para presionar a los congresistas.
