El Ministerio de Hacienda condonó ¢194.000 millones en multas e intereses a las personas físicas y jurídicas que se acogieron a las amnistías tributarias incluidas en reforma fiscal, un monto que corresponde al 94% del monto que logró recaudar con ese mecanismo (¢207.000 millones).
Estos datos los reveló esta tarde el diputado José María Villalta, del Frente Amplio (FA); quien apenas hasta hoy recibió el detalle de la información que había solicitado ya varios meses atrás, en relación con los beneficios fiscales que se habían otorgado.
Las amnistías tributarias proponían un perdón total de los intereses a todos los deudores que cancelaran sus obligaciones con el Estado en los tres meses posteriores a la aprobación del proyecto tributario (entre diciembre de 2018 y marzo de este año); así como un rebajo de entre el 60% y el 80% de las multas dependiendo de en qué mes realizaran el pago.
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Los datos recogidos por Hacienda detallan además que el 90% de los montos perdonados se concentraron en las 26 empresas que más le pagaron al fisco en esos meses, empezando por los bancos estatales (Banco Nacional, Banco Popular y Banco de Costa Rica); pero también con la presencia de varias empresas privadas que incluso terminaron pagando menos de lo que se les liberó.
Las principales habrían sido dos de las sociedades de Standard Fruit Company que juntas pagaron más de ¢24.000 millones al Estado, pero dejaron de cancelar más de ¢41.000 millones; así como Durman Esquivel, empresa que canceló ¢8.600 millones, pero dejó de pagar más de ¢10.000 millones con la aplicación de la amnistía.
Más abajo aparecen dos empresas cuyo nombre no fue presentado por Hacienda, un hecho que criticó duramente el diputado a través de su equipo de prensa, pues la información se ha presentado “incompleta”.
Eso sí, Villalta subrayó que los datos ya recibidos sí “demuestran que el costo que el país asumió para conseguir esos recursos rápidos fue gigantesco”, pues se prefirió “perdonar montos multimillonarios” que realizar sus gestiones cobratorias de forma oportuna.
“No me van a decir que esos que fueron a pagar cientos y miles de millones lo hicieron por pura bondad. No, pagaron porque sabían que aunque pelearan tenían perdidos los casos y al final tendrían que pagar con intereses y multas”subrayó.
En esa línea, el diputado agregó a través de un comunicado de prensa que “con una Administración Tributaria más efectiva, esos montos pudieron cobrarse sin necesidad de perdón alguno y sin impunidad para nadie”, pues a fin de cuentas el mensaje es desalentador para las personas que sí cumplen de forma correcta con sus obligaciones.
“Básicamente le están diciendo a la ciudadanía que si soy un gran deudor solo tengo que esperar a que se agrave la situación fiscal para que me perdonen multas e intereses. Mientras tanto, las personas asalariadas no tienen derecho a quejarse, porque a ellas se les rebaja el impuesto automáticamente”, subrayó.
Otras empresas
En la lista también aparecen personas jurídicas como Veinsa, la cual pagó ¢1.600 millones, pero dejó de pagar ¢1.200 millones. Además, aparece Florida Capitales, la cual canceló ¢1.000 millones, pero dejó de hacer lo propio con ¢1.100 millones. El Banco BCT, por su parte, canceló ¢1.300 millones y dejó de pagar ¢1.100 millones también.
De nuevo a Florida, con otra de sus sociedades, pagó ¢700 millones y dejó de cancelar otros ¢1.100 millones; mientras que Café El Rey pagó ¢750 millones y se ahorró poco más de ¢1.000 millones.
Por su parte la empresa Desarrollos Hoteleros de Guanacaste pagó ¢1.500 millones y dejó de cancelar poco más de ¢1.000 millones; al tiempo que Banco Promérica pagó más de ¢600 millones y se dejó otros ¢800 en sus bolsillo.
En la lista además aparecen con montos menores Btcino Costa Rica S.S., Dicori S.A, Inversiones MVQVESKOMO, Agencia Feduro S.A., la Fábrica de Harinas de Centroamérica, Agrícola Mahalo, Alimentos Sigma y la Bananera del Caribe: todos con montos condonados superiores a los ¢500 millones.
Entre ellos y otros cuatro agentes que aparecen en blanco se habría repartido el 90% de las condonaciones; a las que se suma otro 10% residual en operaciones de menor tamaño, algunas de ellas aplicadas automáticamente por los dipositivos de Hacienda.
Restará que Hacienda revele los nombres de las sociedades no identificadas, una solicitud que Villalta ya dijo haber realizado, bajo el entendido de que si el ministerio no lo hace presentará una gestión por “desobediencia” ante la Sala Constitucional.
Las empresas estatales que realizaron operaciones de mayor volumen fueron el Banco Nacional, el Banco de Costa Rica y el Banco Popular. En el caso del BN, canceló ¢70.000 millones y se ahorró ¢46.000; en el caso del BP, canceló ¢57.000 millones y se dejó ¢45.000 millones; y en el caso del BCR, canceló ¢14.000 millones y dejó de hacer lo mismo con otros ¢14.000 millones.
Los datos revelados esta tarde son los que esperaban varios de los sectores que se oponían a la reforma, quienes siempre sostuvieron que los montos perdonados podían ser casi tan (o más) altos que los recolectados con la aplicación del beneficio. No obstante, Hacienda siempre defendió la aplicación del mecanismo como una forma de acceder a recursos frescos en un momento de asfixia para las finanzas nacionales (como ocurría a finales del año pasado), pues se necesitaban los recursos pronto y muchos de esos cobros se encontraban en disputas legales que podían retrasar las entradas de dinero por años.
Lea la lista completa aquí: Beneficiados por las Amnistías (lista con montos condonados)
