El presidente de la República, Rodrigo Chaves, declaró hoy que quienes han cuestionado la decisión de su administración de excluir del despliegue de infraestructura para servicios de la tecnología móvil de quinta generación (5G) a empresas que provengan de países que no han ratificado el Convenio de Budapest sobre ciberdelincuencia, buscan “proteger a cierta empresa, a cierto grupo, a cierto grupo de intereses”.
Chaves hizo estas afirmaciones esta mañana durante la presentación de la Estrategia Nacional de Ciberseguridad 2023-2027, por parte del Ministerio de Ciencia, Innovación, Tecnología y Telecomunicaciones (Micitt), en el auditorio del Colegio Humboldt, en San José.
El decreto 44-196-MSP-MICITT, publicado en La Gaceta el 31 de agosto, establece la prohibición de contratar servicios de 5G con empresas que provengan de países que no hayan ratificado el Convenio de Budapest. Eso deja por fuera las compañías de China, Corea del Sur, Singapur, Suecia y Brasil, que son parte de los más de 100 países que no han firmado el acuerdo.
Autoridades del Grupo ICE han señalado que están analizando el tema tecnológico y técnico de que la empresa Huawei no pueda participar en la licitación para desarrollar la tecnología 5G en el país, ya que actualmente el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) tiene una inversión muy importante en la red 4G con Huawei, y ambas redes se relacionan.
Pero según Chaves, las críticas a la decisión de su administración provienen de personas que defienden “intereses particulares”. En su discurso también dijo que a la Universidad Nacional (UNA) le habían pagado por un estudio que cuestionaba su política sobre 5G, lanzó advertencias a una diputada y resaltó quienes eran las “naciones amigas” de Costa Rica. Asimismo, señaló que el no exigir la ratificación del Convenio de Budapest ponía en riesgo la Inversión Extranjera Directa (IED).
“Esos intereses”
“Por décadas habíamos sido negligentes, habíamos sido irresponsables con temas de ciberseguridad, habíamos sido incapaces de empezar el proceso de la 5G y ya vemos progreso sustancial en muy corto plazo. Lástima que haya gente en Costa Rica que no tenga en sus corazones el interés general del país y que critique de manera tan burda los esfuerzos que estamos haciendo”, expresó Chaves.
“Imagínense un país como este, sin ejército, que nos pueden poner de rodillas por hacer lo que nuestro destino nos manda, que es buscar la prosperidad general, en lugar de proteger a cierta empresa, a cierto grupo, a cierto grupo de intereses, donde hay muchos costarricenses que prefieren proteger a esos intereses particulares que al país”. Y continuó: “Aquí hay lobistas y gente que tiene intereses particulares que no quiere perder miles de miles de millones en contratos”.
“¿Por qué nos engañamos tanto ticos? Por más que nos tratan de engañar unos pocos, no vamos a aflojar ante esa falsa dicotomía que nos quieren meter; incluso los grupos organizados de la industria, a mí me dan vergüenza ajena”, fustigó el mandatario.
“Caos absoluto”
“Ah no, pero es que hay que ser inclusivos. ¿Inclusivos con quién? ¿Con los que nos atacaron, como en el caso de Conti? O con los que pueden decirle a una empresa ‘usted estaba inscrita en mi país, yo tengo influencia ante usted, páseme todos los datos de las empresas que están inscritas en Costa Rica como Inversión Extranjera Directa, páseme los datos para hacer espionaje industrial’?”, según el presidente.
“¿Qué van a hacer los que hoy defienden intereses estrechos desde la Asamblea, ciertas cámaras, si algún día la Inversión Extranjera Directa, que le da trabajo a miles y miles, desde las zonas francas, si dicen ‘ah no tengo confianza porque no confío en los proveedores y operadores’ o ‘no tengo confianza en la seguridad de los datos de mis clientes’ y se van del país?”, argumentó.
“No es exageración que un ataque cibernético en una red 5G en Costa Rica nos puede llevar a saqueos en supermercados, a violencia civil, a caos absoluto”, prosiguió.
Las “naciones amigas”
Cuando se refirió a los ciberataques contra el país en 2022, dijo: “Gracias a Dios tuvimos el apoyo de naciones amigas; ahí es donde se ve quién está con uno y quién no. Ahí es donde se ve de dónde viene la alianza productiva y de defensa mutua y de dónde viene el ataque y el factor común es, para los que siguen insistiendo contra los intereses de Costa Rica, y el factor común es los países que sí protegen la ciberseguridad, que sí declaran en sus leyes un crimen, que sí persiguen a los que se involucran en eso”.
“Sí, ese decreto valora como de alto riesgo a operadores y proveedores cuya sede está en países que no se hayan adherido formalmente o hayan expresado como teniendo interés formal en ser parte del Convenio de Budapest”, puntualizó y agregó: “Estamos hablando de países con los que compartimos valores como la Unión Europea, los Estados Unidos, Israel”.
El presidente Chaves también descalificó el estudio “Evaluación de impacto económico de la exclusión de proveedores de la red 5G”, del Centro Internacional de Política Económica para el Desarrollo Sostenible (CINPE) de la UNA, que concluyó que el decreto 44196-MSP-MICITT podría retrasar la implementación de la tecnología 5G por cuatro años y aumentar los requerimientos de inversión y las tarifas en un 40%.
“Hasta a las universidades les han pagado los interesados, a la UNA, por hacer un estudio que resultó a la medida, el que paga el baile, manda la música, y ahí está la evidencia”, dijo Chaves.
Por otra parte, las autoridades del Micitt destacaron como parte de la estrategia en ciberseguridad, la presentación de un proyecto de ley para crear la Agencia de Ciberseguridad. En la Asamblea ya se tramita el proyecto de Ley de Ciberseguridad de Costa Rica.
Al respecto Chaves subrayó: “Ya me llegó la noticia, ojalá que sea un rumor falso, de que hay una diputada que dice que le va a meter mociones y mociones y mociones para frenar la ley de ciberseguridad, ojalá que no sean mociones destructivas para atrasar la ley, sino que sean mociones para mejorarla”.
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