El Sindicato de Trabajadores del Sector Privado (Sitrasep) denunció que este viernes 12 de abril, la empresa Servicios de Limpieza a Su Medida (SELIME S.A) que provee servicios de limpieza a la Universidad de Costa Rica, despidió a la dirigente sindical Olga Brenes, quien laboraba como miscelánea desde julio del año 2016.
Brenes es una de las más de 300 trabajadoras que realizan labores de limpieza en los campus universitarios, mediante un contrato que la casa de enseñanza mantiene con la empresa que las contrata.
En 2018 y motivada por las paupérrimas condiciones laborales que padecen las trabajadoras y que se ha denunciado previamente en este medio (ver reportaje: “Selime: La invisible precariedad laboral que mantiene limpia la Universidad”), Brenes y varias de sus compañeras fundaron una seccional del mencionado sindicato.
Cabe destacar además que desde la fundación de la agrupación hasta la actualidad, Brenes ha estado en la directiva del sindicato y hoy ocupa la Secretaría de la Mujer.
Por eso, dice Sitrasep en un comunicado aunque el despido de Brenes haya sido con responsabilidad patronal, viola su fuero sindical, un derecho “tutelado por la normativa nacional e internacional que protege los derechos sindicales de las personas trabajadoras”.
“Según la normativa nacional, las empresas únicamente pueden realizar despidos de personas que ejercen puestos de dirección sindical después de un proceso especial en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, en el que la empresa debe demostrar de manera objetiva la imposibilidad de seguir manteniendo el puesto de trabajo de la persona dirigente sindical. En este caso, la empresa SELIME tiene que sostener más de 300 puestos de trabajo en la UCR y varios centenares más que tienen contratos con diversas instituciones como el PANI, AYA y la CCSS, por lo que no tiene motivos para prescindir de esta persona en específico”, indicaron.
El sindicato también detalló que desde hace un par de semanas la mujer estaba promoviendo un proceso legal por Conflicto Colectivo de Carácter Económico y Social que se presentaría en busca de mejoras en los salarios, salud ocupacional, garantías laborales y sindicales.
Adicionalmente, luego de cumplir una incapacidad, Brenes recibió en marzo pasado recibió unas “recomendaciones médicas aplicables a su trabajo por parte del INS, para los próximos 6 meses, con el fin de cuidar una lesión en su brazo producto del mismo trabajo de limpieza, pero al parecer la empresa no está dispuesta a acompañar la rehabilitación, y prefiere desecharla como trabajadora”, indicó el sindicato.
Brenes dijo sentirse “realmente maltratada, porque no solo está en juego mi puesto de trabajo, sino también los derechos que tenemos como trabajadoras de ejercer la representación sindical. Tengo un historial laboral impecable desde hace casi 8 años. La única razón es que estamos promoviendo un conflicto colectivo de carácter económico y social con otras 80 personas del trabajo, y la empresa no quiere que eso avance”.
La presidenta de la seccional , Esperanza Gómez dijo que el despido de Brenes era “una clara violación a los derechos sindicales” y aseguró que con eso lo que busca la empresa es “debilitar al sindicato”.
Jouseth Chaves, secretario general de Sitrasep respaldó las palabras de Gómez y pidió la intervención inmediata del rector universitario Gustavo Gutiérrez. “La UCR tiene la obligación de vigilar que las empresas que contrata cumplan los derechos laborales a cabalidad”, dijo.
