La petición de un sector de ciudadanos para conocer por adelantado a los miembros de un eventual equipo de gobierno tiene al menos un consuelo, el que exige la ley: los candidatos presidenciales ya presentaron a quienes los acompañarían en las vicepresidencias si ganaran las elecciones del 4 febrero.
El énfasis en ciertos temas, la representación por origen o la necesidad de equilibrar tendencias internas en los partidos fueron los criterios empleados por los principales partidos políticos, cuya mayoría presentó ya los nombres de los candidatos a vicepresidencias, pues la fecha límite para inscribirlos es este viernes.
Las vicepresidencias, además de ser objetos de mensaje de cara al electorado, suelen ocupar cargos relevantes en los gobiernos, a veces desde la Casa Presidencial como “número dos “ del gobernante y a veces como encargados de sectores concretos, como lo económico, lo fiscal y a veces en puestos de ministros. Puede ocurrir también que no tengan ninguna función, como ocurrió con Luis Fishman en el gobierno de Abel Pacheco.
Este domingo los partidos Liberación Nacional (PLN) y Acción Ciudadana (PAC) anunciaron los nombres de manera pública. El candidato presidencial oficialista apuesta por una de la casa para ocupar la primera vicepresidencia, la diputada Epsy Campbell (expresidenta del PAC, excandidata a vicepresidencia con Ottón Solís (2006) y ex precandidata presidencial), acompañada del sindicalista del sector educación Marvin Rodríguez.
Para el mediodía también el liberacionista Antonio Álvarez Desanti había presentado a los suyos: el economista Édgar Ayales (exministro de Hacienda de Laura Chinchilla e impulsor de su plan fiscal fustrado por la Sala Constitucional) y la periodista de 40 años que preside la Fundación Ana Ross contra el Cáncer, Victoria Gamboa Ross. Tiene conocimientos de administración pública también, destacó el aspirante presidencial.
Epsy Campbell, candidata a vicepresidencia por el PAC.
El candidato del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), Rodolfo Piza, también quiso lanzar un mensaje enfocado en la economía con la candidata a vicepresidencia Edna Camacho, presidenta de la Academia de Centroamérica y viceministro de Hacienda en el gobierno de Miguel Ángel Rodríguez. La segunda vicepresidencia quedaría en manos del ingeniero Max Umaña, uno de los proponentes de la idea de construir un metro en San José, una de las promesas de campaña de Piza.
Otras agrupaciones habían presentado ya sus fórmulas presidenciales completas. Este sábado lo hizo el veterano candidato del Movimiento Libertario. Eligió para la primera vicepresidencia a economista Franz Tattanbach Capra, especialista en cambio climático, y para la segunda, a la periodista proveniente del PLN Viviam Quesada.
En el Partido Integración Nacional (PIN), ahora en manos del abogado Juan Diego Castro, las candidaturas a vicepresidencias estaban definidas ya, con el claro mensaje en contra de la clase política. Para el primer puesto nominaron a una empresaria y contadora llamada María Cecilia Moreira y para el segundo, a un médico que trabaja como forense en el Organismo de Investigación Judicia (OIJ), de nombre Maikel Vargas Sanabria.
También están listas las postulaciones a las vicepresidencias de la fórmula que encabeza el diputado Edgar Araya en Frente Amplio (FA). Son la educadora Laura Hall, activista de la población afrocostarricense, y el economista y académico Luis Paulino Vargas, al que también presentan como defensor de minorías sexuales.
Algunos ya adelantaron camino e incluso inscribieron ya la fórmula presidencial ante el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE). Es el caso del aspirante del Partido Republicano Socialcristiano (PRS), Rodolfo Hernández, que registró al abogado Roberto Suñol (también disidente del PUSC) en la primera vicepresidencia y a la empresaria Rose Mary Carro en la segunda.
Con designaciones como estas, los partidos intentan consolidar el apoyo interno y atraer electores de cara a unas elecciones inciertas y con un alto grado de antipatía ante los ciudadanos.
