El sacerdote Jorge Arturo Morales Salazar, acusado de abusos sexuales contra un menor de edad, quedó detenido este jueves en la frontera con Panamá, cuando intentó salir de Costa Rica por el puesto de Paso Canoas.
El Ministerio Público confirmó que traerán a San José al sospechoso de delito sexuales para evaluar posibles medidas cautelares.
Se desconoce aún si el cura salía del país con permiso o conocimiento de sus superiores en la Iglesia Católica.
Morales fue denunciado por el joven Fabián Arguedas, quien días atrás contó a UNIVERSIDAD que fue abusado por el sacerdote asignado a la parroquia Nuestra Señora del Carmen, en San José. Arguedas lo acusa de agresiones sexuales a sus 17 años y hasta los 19, cuando decidió interponer la denuncia canónica, hace unos ocho años.
Según Arguedas, las agresiones se llevaron a cabo entre 2009 y 2011 en la casa cural de la parroquia del Perpetuo Socorro, en Sabana, y luego siguieron en la Clínica Católica, cuando Morales era capellán de ese centro médico, publicó este semanario el 12 de marzo.
Arguedas narra que intentó denunciar al sacerdote ante la cúpula de la Iglesia Católica en Costa Rica y sintió que no le dieron credibilidad a su relato. Sin embargo, la denuncia fue procesada en las vías institucionales y ahora se sabe que su caso fue desestimado en la organización religiosa mediante una resolución que objetaron las autoridades locales. Ahora el caso está en la justicia penal, como reportó el Ministerio Público. “Es investigado como sospechoso de cometer un presunto delito sexual”, respondió la Fiscalía Adjunta de Asuntos de Género.
Morales Salazar es el tercer sacerdote católico con acusación penal en estos momentos por abusos sexuales a menores, pues se suma el párroco de Santo Domingo, Manuel Guevara, y el exvocero eclasiástico Mauricio Víquez (ya expulsado de la Iglesia), quien sí pudo salir del país y ahora enfrenta una orden de captura internacional.
