País Salud

Ministro de Salud: “Con etiquetado neutro le quitamos a las tabacaleras la oportunidad de hacer promoción con sus cajetillas”

Un proyecto de ley obliga a la industria tabacalera a implementar el empaquetado neutro o genérico de todos los productos de tabaco y la uniformidad de los envases de cada tipo de producto.

El ministro de Salud, Daniel Salas, expresó este miércoles su apoyo al proyecto de ley que propone reformar los artículos 4, 9 y 36 de la Ley General de Control de Tabaco y sus Efectos Nocivos en la Salud (9028), que obliga a la industria tabacalera a implementar el empaquetado neutro o genérico de todos los productos de tabaco y la uniformidad de los envases de cada tipo de producto.

“Con esta medida le estamos quitando esa oportunidad de seguir haciendo promoción y patrocinio a las compañías tabacaleras a través de su cajetilla”, dijo Salas ante Comisión de Sociales de la Asamblea Legislativa.

El empaquetado neutro, genérico, o sencillo “es una forma de embalaje que estandariza las características en cuanto a color, tipos de letras, formas, distintivos, logotipos y cualquier otro elemento de la imagen de la marca en el empaquetado, envoltorio, así como en el etiquetado de los productos de tabaco” y elimina toda la información publicitaria y promocional.

En la nueva redacción que propone el proyecto se incluyen además todos los productos de tabaco y sus derivados, incluyendo los productos de tabaco calentado, los sistemas electrónicos de administración de nicotina, sistemas similares sin nicotina y los sistemas de dispositivos utilizados para su consumo.

Se estima que la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) destina anualmente ¢300.000 millones para atender a personas con enfermedades relacionadas con el consumo de tabaco, dijo el presidente ejecutivo de la Caja, Román Macaya ante la misma comisión legislativa.

Autoridades instan a controlar el etiquetado

Macaya señaló que el consumo de tabaco tiene un gran impacto en la Caja por la demanda que genera en la atención de las enfermedades causadas por el consumo de estos productos. “No solo la atención médica sino las incapacidades que se generan y las pensiones por invalidez y muerte”.

Indicó que la junta directiva de la institución tomó un acuerdo único con respecto al proyecto de ley, una vez conocidos los antecedentes y las recomendaciones de las instancias técnicas. El acuerdo fue de no oponerse al proyecto de ley porque no transgrede las competencias propias ni presenta roces con la autonomía de la caja y porque es positivo ya que aumentar el control de las estrategias de etiquetado podría incidir en que menos personas empiecen el consumo de tabaco o reduzcan su consumo.

Por su parte, la neumóloga Wing Ching Chan, coordinadora del Programa Institucional de Cesación de Tabaco de la CCSS, destacó que desde 2005 escucha a pacientes del programa que le dicen: “Doctora, si hubiera sabido lo difícil que es dejar de fumar, no hubiera empezado”.

“Los que tenemos un poco mas de canas recordamos como salíamos de los restaurantes y locales con el olor de humo de tabaco. Gracias a la ley ya hemos visto una disminución en el cáncer del pulmón; el impacto se ve. Tenemos que apoyar las medidas que han probado que ya funcionan en distintos países”, dijo Ching.

Desde 2012, la Ley 9028 regula distintos aspectos del control del tabaco como los ambientes libres de humo de tabaco.

Ching advirtió de las consecuencias de continuar con una publicidad positiva hacia el consumo de este producto. “Las personas empiezan a consumirlo sin total raciocinio de todas las consecuencias que les va a provocar este consumo; cuando la gente empieza a fumar no piensa en todo esto”, enfatizó.

Tanto Macaya, como Ching y Salas instaron a los diputados a agilizar el trámite del proyecto y a aprobarlo.

El ministro de Salud indicó que ocho millones de personas en el mundo mueren anualmente por consumir tabaco, seis millones de ellas en edad prematura. Mientras que en Costa Rica, un 9% del total de muertes al año (alrededor de 22.000) están asociadas al consumo de tabaco.

“Esta medida es complementaria con todo lo demás que hemos ido implementando, como los impuestos y la eliminación de la publicidad”, señaló Salas y agregó que según una encuesta reciente, el 55% de los costarricenses pensaron en dejar de fumar por las advertencias que ahora incluyen las cajetillas.

 

Suscríbase al boletín

Ir al contenido