El presidente de la Corte Suprema de Justicia, Fernando Cruz, criticó los cuestionamientos de algunos sectores hacia el proceso de reelección de personas magistradas, durante un foro virtual sobre la selección y nombramiento de magistraturas.
Actualmente, la reelección de magistrados funciona de manera automático, a menos de que una mayoría calificada (38 votos) de legisladores decidan lo contrario.
“Estas dudas y propuestas de cambio son una demostración de que la independencia de la judicatura incómoda provoca alergia frente al poder. Mejor tener jueces más breves en su plazo de elección y que estén sometidos al control político más sensible, sin mayorías calificadas para no ser reelectos”, dijo Cruz.
El magistrado también cuestionó que la elección de las magistraturas sean decisión del Poder Legislativo, argumentando que es “una manifestación de voluntad política sin fundamentación, tal y como lo advierte el tercer Estado de la Justicia”.
“El sistema de nombramiento de magistrados por parte del parlamento sigue siendo un dominio reservado con un procedimiento opaco. En virtud de la debilidad estructural de la justicia frente a los otros detentadores del poder tiene mucha transcendencia, así las reglas que definen la designación para el cargo judicial”, argumentó.
Cruz agregó que este proceso puede generar conflictos ya que “el detentador de un cargo permanece obligado a la persona responsable de su nombramiento, especialmente cuando está influido por consideraciones políticas”, por lo que recalcó la necesidad de mantener la independencia de la magistratura y mejorar los procesos de selección.
“Es un tema que, reconozco, tiene amplias dificultades políticas, algunas muy importantes e inevitables y otras que podrían ser reformadas o reducidas a una expresión mucho más razonable. Si las garantías de independencia, autonomía e imparcialidad del juez no se determinan claramente, poniendo límites claros a los otros poderes, la independencia judicial se convierte en un discurso sin mucho contenido”, sentenció.
El Poder Judicial sigue buscando una serie de reformas a su estructura, luego de afrontar una grave crisis desde el 2017, que incluyó la destitución del entonces magistrado de la Sala III, Celso Gamboa, acusado por supuesto tráfico de influencias.