Los diputados miembros de la comisión de Infraestructura acordaron este lunes llamar a comparecer a la presidenta de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS), Marta Esquivel, y a otras autoridades relacionadas con las inversiones de la entidad, ante la “preocupación” por la paralización de nuevos proyectos decidida por la junta directiva la semana pasada a con un pretexto de limitaciones presupuestarias.
Por unanimidad, los seis integrantes de la comisión aprobaron sendas mociones de Diego Vargas, del Partido Liberal Progresista (PLP), y de la bancada del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), ambas similares en la intención de cuestionar a Esquivel sobre las implicaciones de la decisión de suspender nuevos proyectos de infraestructura como hospitales o clínicas, como en Limón o Golfito.
“Es la preocupación que todo el mundo tiene. Ver qué comunicaciones e información manejan entre unidades administrativas, gerencias y tal vez abrirle los ojos a doña Marta, que parece no tener la perspectiva”, dijo Vargas al justificar su moción.
La moción inicial planteó llamar a Esquivel y al gerente de Infraestructura y tecnologías de la CCSS, Jorge Granados Soto; el director de la unidad técnica contraparte del Fideicomiso Inmobiliario CCSS-BCR, Danilo Monge Guillén; el gerente de la unidad administradora de proyectos del Fideicomiso Inmobiliario CCSS-BCR, Julio Cedeño Maglione; y el subgerente general del Banco de Costa Rica, Álvaro Camacho.
Junta Directiva de la CCSS suspendió proyectos del portafolio de inversiones
Alejandro Pacheco, diputado del PUSC, hizo manifiesta la inquietud por el impacto que podría traer la suspensión de 53 obras. “Hay preocupación de toda la fracción por paralización de obras”, dijo.
Antonio Ortega, de Frente Amplio, apoyó ambas mociones y dijo que la defensa de la CCSS amerita la unión de los distintos partidos políticos. “Las noticias son un baldazo de agua fría para las comunidades. Nos preocupa el estado de alarma en que el presidente Rodrigo Chaves ha anunciado la quiebra de la institución desde el primer día”, dijo Ortega antes de recordar las maniobras del Gobierno para intentar controlar la junta directiva de la institución.
El Frente Amplio ha posicionado la idea de que la CCSS no está en quiebra, pero que el Gobierno pretende quebrarla, como dijo en plenario este lunes el jefe de fracción, Jonathan Acuña, que también recordó que el ministro de Hacienda, Nogui Acosta, dijo que no pretende cumplir con la obligación del Gobierno Central de trasladar a la CCSS más de 26.000 millones de colones.
El primer presidente ejecutivo de la CCSS nombrado por Chaves, Álvaro Ramos, destituido cuatro meses después, ha reiterado que, pese a los problemas financieros sabidos, la institución está en capacidad suficiente de mantener proyectos que ahora quedaron en el congelador.
