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Agricultores en Europa protestan ante políticas de gobierno erráticas

A menos de cinco meses de las elecciones al Parlamento Europeo, la protesta de los agricultores irrumpió en el debate político, evidenciando los desaciertos de los gobiernos europeos de años recientes tanto en su política interna como del bloque.

Bruselas, Bélgica

Los ministros de Agricultura de la Unión Europea iniciaron este martes una reunión en Bruselas, en busca de una fórmula para aplacar la ira de los agricultores, con una vasta lista de reclamos que van desde las importaciones provenientes de Ucrania hasta la regulación ambiental.

Los productores de la UE han decidido llevar su descontento a las calles, y han cerrado carreteras en protesta, protagonizaron desfiles de tractores y se manifestaron en Francia, Alemania, Polonia, Rumania y Países Bajos.

La regulación ambiental, el aumento en los combustibles, y la considerada competencia desleal de las importaciones provenientes de Ucrania encabezan las protestas de los productores agrícolas.

“A partir de hoy (…) y mientras sea necesario, se llevarán a cabo un cierto número de acciones”, advirtió el lunes en la radio France Inter, Arnaud Rousseau, líder del sindicato agrícola FNSEA, horas antes de reunirse con el primer ministro francés, Gabriel Attal.

La protesta de los agricultores franceses empezó el pasado otoño boreal de forma pacífica, con el volteo de los paneles de señalización a la entrada de los pueblos para alertar de su situación y del sentimiento de abandono.

En Países Bajos, Rumanía, Polonia y Alemania, este sector multiplicó sus acciones contra el Pacto Verde europeo y el aumento de tasas.

El sábado 20men Berlín se unieron a los agricultores los activistas medioambientales de ‘Fridays for Future’, que podrían considerarse opositores de los agricultores, pero que aquí juntos forman la alianza “¡Estamos hartos!”. Los agricultores dicen que apoyan plenamente la agricultura ecológica y libre, pero para ello necesitan las reformas correspondientes, al menos la definición de precios justos. Según agricultores y pastores, el Gobierno duda en implementarlas, informó EuroNews.

Para el ministro belga de Agricultura, David Clarinval, “la cólera de los agricultores obedece a varios factores, y no necesariamente tiene las mismas razones de un país a otro”, pero igualmente “deben ser tenidos en cuenta”.

De su lado, el ministro irlandés, Charlie McConalogue, señaló que es posible que los productores agrícolas “se sientan bajo una presión constante, debido a los numerosos cambios políticos ocurridos en los últimos años”.

Uno de los temas apremiantes de la reunión de este martes es el llamado a un “diálogo estratégico” con los agricultores lanzado el año pasado por la Comisión Europea, el brazo ejecutivo de la UE.

Esa iniciativa arrancará formalmente el jueves de esta semana. El poderoso grupo agrícola Copa-Cogeca dijo que se trata de una “iniciativa bienvenida, aunque ha tardado en materializarse”.

El diálogo que comienza el jueves abordará las preocupaciones generalizadas de que la transición verde cause más estragos para los agricultores.

“El diálogo estratégico abordará (…) cuestiones sobre cómo podemos garantizar un nivel de vida justo para los agricultores y las comunidades rurales, apoyando la agricultura dentro de los límites del planeta’, dijo un vocero de la Comisión Europea, Olof Gill.

También participarán grupos agrícolas, miembros del sector agroalimentario, organizaciones no gubernamentales y expertos.

Para el ministro español de Agricultura, Luis Planas, la situación puede ser vista como explosiva ante la proximidad de las elecciones europeas previstas para junio.

“La extrema derecha busca utilizar a los agricultores y ganaderos como instrumento político. Me parece lamentable. Necesitan que se les defienda, que se les escuche (…) pero no que se les manipule políticamente”.

En Francia, tanto la oposición de derecha como de izquierda han pedido al gobierno que renuncie a aumentar el precio del combustible para los tractores.

Preocupaciones generalizadas

Más allá de especificidades nacionales, los agricultores tienen en común la preocupación con los crecientes desafíos que enfrenta la agricultura, incluido el clima extremo, la gripe aviar y los crecientes costos del combustible.

También comparten la preocupación con la llegada de productos agrícolas ucranianos a la UE desde el levantamiento de los derechos de aduana en 2022.

La UE decidirá en junio si renueva esa política de derechos de aduana para los productos agrícolas ucranianos. Los grupos agrícolas europeos exigen límites a las importaciones de productos ucranianos como cereales y azúcar.

Otro motivo de discordia es lo que los agricultores ven como una regulación excesiva.

“La maquinaria reguladora europea sigue funcionando a toda velocidad, ignorando el contexto geopolítico, climático y económico que está socavando las explotaciones y los ingresos de los agricultores”, señaló Copa-Cogeca en un comunicado.

El descontento de los agricultores ha sido también una preocupación creciente en el Parlamento Europeo.

El mayor grupo parlamentario, el del Partido Popular Europeo (PPE, derecha), ha tratado a menudo de suavizar los textos agrícolas, argumentando que representan los deseos de los agricultores.

La eurodiputada francesa del PPE Anne Sander apuntó que en ese bloque “compartimos la ambición ecológica, pero debemos adaptarla a la situación económica. Los precios agrícolas están cayendo, los gastos se disparan y añadir esfuerzos regulatorios adicionales es demasiado”.

Sander también acusó a la Comisión de ignorar las advertencias del sector durante años.

Para el eurodiputado portugués Pedro Marques, vicepresidente del bloque de los socialdemócratas, los agricultores son un “electorado muy importante”.

Los ambiciosos objetivos climáticos que la UE espera alcanzar en 2040 dependen en gran medida de una descarbonización de la agroindustria.

La agricultura representa aproximadamente el 11% de las emisiones de gases de efecto invernadero en Europa.

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