Como cada año, desde 2001, se realiza en Costa Rica el Festival Internacional de Poesía que organiza la fundación Casa de Poesía. Este año se trata de la versión XXI, ya que no se ha suspendido ninguna vez desde su inicio.
Los últimos dos años, a causa de las restricciones aplicadas por la pandemia del Covid-19, se efectuaron sesiones virtuales, que, pese al gran reto que implicó, es modalidad, se logró sostener la actividad y el interés de miles de participantes. En 2020 y 2021, con un esfuerzo enorme, se logró convocar a más de un centenar de artistas.
Pero este año vuelve la presencialidad con una convocatoria que se extiende por teatros, parques, escuelas e incluso centro de reclusión y de salud.
Se trata de un concepto de la poesía que pasa de lo íntimo a lo público. Una verdadera fiesta de la palabra abierta a la participación del público y de cualquiera con interés y sensibilidad.
¿Cuánto puede la imagen verbal provocar ensoñación y reflexión?
A lo largo de más de dos décadas, la fundación Casa de Poesía ha logrado involucrar personas de todas partes de Costa Rica con artistas de territorios que abarcan toda la geografía del planeta.
Además de recitales, en las comunidades, está el esfuerzo por dar lecturas, talleres y espectáculos gratuitos en todo el país, con sedes en todas las provincias. Todas las actividades son públicas y totalmente gratuitas.
La premio Magón Julieta Dobles Izaguirre, presidenta de la Fundación Casas de Poesía, junto a los poetas Rodolfo Dada y Norberto Salinas se han rodeado a lo largo de estas dos décadas de equipos entusiastas y han logrado la complicidad de instituciones estatales, culturales y sectores privados interesados en la difusión cultural, para crear un festival de renombre internacional, pero estrechamente vinculado a las comunidades costarricenses.
Como festival ofrece la publicación de un libro de cada uno de los participantes, con lo cual, queda un registro muy valioso de la cita, se han editado más de 270 libros. La Universidad de Costa Rica se suma a esta importante actividad con el apoyo de la sección de impresión del Siedin, para la publicación de los libros.
Durante los diez días que dura, el festival se extiende por teatros, universidades, escuelas, centros culturales, bibliotecas públicas, cárceles, hospitales, tanto en recitales como talleres y otras formas de participación.
La inauguración formal este año será a la 1 p.m. en el teatro Melico Salazar en San José. Hay invitados de India, China, Kurdistán, México, España, Argentina, Honduras, Egipto, Cuba y El Salvador, que compartirán con Julia Hernández y Miguel Fajardo, creadores costarricenses de Limón y Guanacaste, respectivamente.
El lunes 31, a las 10 de la mañana en el Parque Morazán, iniciará una “Fiesta de la poesía joven 2022” dedicada a los niños y adolescentes. A las 9 de la mañana en el Conservatorio Castella habrá una lectura con el poeta cubano Norberto Codina. También a esa hora, en la Escuela de Estudios Generales de la Universidad de Costa Rica, se realizará otra lectura con algunos de los invitados. La colección poética correspondiente a esta versión del festival se presentará en la Universidad de Costa Rica el martes 1 a las 9 a.m.
La poesía como forma de expresión liberadora y humanizante ha sido una prioridad de los organizadores del festival que han puesto especial atención en llegar a personas privadas de libertad en el centro penal conocido como La Reforma y la cárcel de mujeres conocida como El Buen Pastor, coordinados por el escritor Norberto Salinas.
El miércoles 2 y jueves 3 son los días de más intensa labor, pues habrá lecturas con público, trabajo con estudiantes y talleres en más de 20 sedes a lo largo del día. El viernes 4 se efectuará un acto de cierre oficial, como ha sido tradición en el Instituto Cultural de México.
Al final de las jornadas comunitarias, los invitados se reúnen con el auspicio de Laguna Lodge Tortuguero, para efectuar un taller seminario entre los poetas internacionales invitados y un selecto grupo de poetas costarricenses.
Estas jornadas de cierre se han constituido en un posibilidad de intercambio íntimo y cercano entre los poetas albergados en una región paradisíaca de Costa Rica convocados por la poesía.
A continuación presentamos textos de algunos de los poetas invitados, como una forma de acercar al público a la calidad y diversidad de los autores con lo que podrán compartir la semana próxima.
Kris Vallejo (Honduras, 1974), poeta y artista plástica.
AQUÍ DONDE VIVO
Puntos negros en el cielo
Cielo ahogado, viejo, incendiado
Una vasta incertidumbre
que salpica de cuando en cuando gotas de fe
Solo la fe lo convierte en cielo
aun cuando se arremolina el nubarrón
que amenaza con destruir
todo lo que será:
promesa de mañanas templadas
al filo de oraciones a un Dios de madera y cal
Paraíso e infierno a la vez este cielo
Pero aquí vivo, me levanto abriendo ventanas al paisaje lejano
la respiración pedregosa del comienzo del día
Aquí me alimento, bajo este cielo
de rocío ácido y palabras nuevas
mercados estruendosos y adoquines resentidos
Aquí parí al tigre que ahora duerme bajo mi cama.
Xi Chuan, nombre literario de Liu Jun (刘军). Nacido en 1963 en la ciudad de Xuzhou, provincia de Jiangsu, es considerado uno de los poetas, ensayistas y traductores más influyentes de la escena intelectual china contemporánea. Trabaja actualmente como profesor de literatura china clásica en la Academia Central de Bellas Artes de Pekín. En sus trabajos, experimenta con formas híbridas de prosa y verso que articulan lo que él denomina una pseudofilosofía (未哲学 wei zhexue), una búsqueda por los lados más oscuros y ocultos de la historia, la razón y la conciencia humana.
AVES NOCTURNAS
Cuando los últimos retazos de la noche se consumen
de qué color son las aves
que barren la noche sobre la ciudad
sus cantos resuenan en un coro
se acercan a los sueños
son una carrera de felicidad
de qué color son los pájaros
que vuelan con sus secretos
y los descuidan
el estridente verano concluye
el estridente otoño inicia
incomparables al sonido de las aves nocturnas
no puedo ver sus
cuerpos, quizás sean sólo
el rumor de la felicidad.
Hussein Habasch (1970). Poeta kurdo de Siria. Actualmente vive en Alemania. Escribe en árabe y kurdo. Muchos de sus textos han sido traducidos a otras lenguas como el inglés, alemán, francés, turco, ruso, rumano y español.
Desilusión
No tengo patria para dibujar sobre sus paredes
con una tiza de la infancia: ¡Que Viva!
No tengo patria que haya que aguantar cada mañana
tomando mi taza de café,
mientras me pule el sol.
No tengo patria, que me otorgue su pulmón
y yo le otorgue el mío
ser su ruido y mía sea la voz
seré el travieso, el malévolo, el rebelde y el arduo
y seré el sabio, el intuitivo, el piadoso y el gran corazón.
No tengo patria para escribir
sobre el cobre de una de sus casas:
bienvenidos amigos,
esta es la casa de Hussein Habasch.
No tengo patria donde me emborrache en sus tabernas
hasta el último aliento de la noche,
vagabundeando en sus caminos,
y donde mi corazón sea su terreno,
me abrigue y la abrigue
la escuche y me escuche
como buenos amigos.
Pero no tengo patria…
Sabrina Usach (Argentina, 1985) Poeta. Profesora de Lengua y Literatura. Especialista en enseñanza de Escritura y Literatura.
Concepto de sopa
la sopa que la lengua tibiamente se traga
es la casona renegrida de años
son los restos de apio papa cebolla
y zanahoria disecados en las orillas
de azulejos zócalos tenedores
o de esos platos de porcelana
con dibujos perfectos
son los centavos juntados con suerte
es el fiado el después se lo pago
es la olla gigante revuelta con ansias
con amor con ganas es esperar
el llamado a la mesa y dejar la payana
es lavarse las manos
el cuidado con el cólera
es mirar a la hermana
y seguir jugando
es agradecer
saborear la verdura
sacar la hilacha de apio
porque no me gusta
es meter la cuchara
en el medio de la vida y saber
que este vapor dulzón
que me calienta la ñata
se va se diluye
en formas raras
y no vuelve.
H S Shiva Prakash (India, 1954) poeta, dramaturgo, traductor, columnista y crítico literario kannada. Su obra es conocida por su compromiso espiritual, social y político.
Despedida
La gran ciudad -la guarida de los insomnes-
estaba en la cama
Con la diosa del sueño oscuro
Medio cubierta por el sari
de las farolas encendidas
Me despedí de mi amada prisión
Para entrar
En la impenetrable jungla de
rugientes torrentes de lluvia
Donde me encontré
Con las flores relampagueantes
Y los frutos del trueno
Norberto Codina (Caracas, Venezuela, 1951). Poeta y editor. Desde hace treinta y tres años dirige La Gaceta de Cuba.
Una cáscara de cebolla puede ser…
Una cáscara de cebolla puede ser
el atlas donde mi madre quiere descubrir mi paradero,
el destino que la hace llorar de un modo manso
por mi prolongada ausencia
mientras funda con sus provisiones
la sabiduría diaria de la cocina.
Esos recipientes, carnes y legumbres tienen de antaño
su código para los amores desdichados,
los hijos perdidos, los amigos muertos.
El cuenco de la cáscara,
la cifra y el fantasma
son detalles de la penumbra,
atributos de cada una de sus franjas de silencio.
El barro único se renueva
al explorar los impulsos hondos
que se adivinan en aquellos primeros hornos,
en aquellos primeros venablos,
en los pétalos de piedra convertidos
en herramientas de venganza.
Es la ruta del miedo
que descubrimos por los sentidos
al revelar el olor de la adrenalina del enamorado,
el tacto del ciego que teme a la soledad,
el paladar del enfermo que confunde los sabores.
La sequedad del alma que murmura
sus vicios y fracasos,
las pérdidas ásperas y los objetos queridos.
Queridos y tan raros como el marfil
de esa cáscara de cebolla,
delicada película con sus capas
que la mano de mi madre va separando
como la piedra filosofal en el espacio doméstico.
Chary Gumeta (Chiapas-México, 1962). Poeta. Con estudios de letras latinoamericanas y licenciada y magíster en educación, promoción cultural de arte y literatura.
Mi sombra
Mi sombra es una mujer que brilla en plenilunio
enciende su corazón y no se entera,
quiere vivir una vida que no le corresponde.
Se desliza por esas calles que no son de nadie
engendra destinos inesperados
los oculta en la obscuridad de su figura;
la veo caminar por encima de las ramas secas
y esconderse entre la gente,
algo me dice que debo buscarla
traerla de vuelta
y costurarla a la planta de mis pies junto a los sueños.
Mi sombra
esa clarividente que me mira desde lejos
y me juzga por dejarla sola.