Tras inspeccionar las cárceles del país en los últimos años, el Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura (MNPT) concluyó que la mayoría de centros penitenciarios rebasaron los “límites lógicos de convivencia y de condiciones mínimas” para los privados de libertad, según informó el órgano este lunes.
Para Róger Víquez, director del MNPT, “el Estado ha sido omiso en aplicar políticas públicas en prevención del delito, y también lo ha sido en aplicar políticas de ejecución de sentencia en las cuales se respeten los derechos fundamentales de las personas privadas de libertad”.
El endurecimiento de las leyes y la ausencia de políticas adecuadas no solo han provocado sobrepoblación carcelaria, sino también el aumento de la inseguridad, indica el comunicado.
De acuerdo con el informe, el Estado está incurriendo en un “exceso de sanción” por las condiciones inhumanas que se viven en las cárceles, lo que lleva a violaciones de los derechos humanos de los reos.
Además, detalla que el sistema penal y político actual dio al traste con el que fue alguna vez el mejor régimen carcelario de Latinoamérica.
Compromiso internacional
Costa Rica, al gestionar la creación del Protocolo Facultativo a la Convención de las Naciones Unidas contra la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, se comprometió a cumplir con estándares internacionales para evitar cualquier tipo de tortura en el país, incluidas las cárceles.
Aprobado por las Naciones Unidas (ONU) en diciembre del 2002, el protocolo impulsó la creación del MNPT, ente adscrito a la Defensoría de los Habitantes, por medio de un decreto presidencial firmado el 13 de diciembre del 2006.
Asimismo, el informe destaca que la Convención Americana sobre Derechos Humanos, firmada en San José en 1969, ratifica que las personas privadas de libertad sean tratadas “con el respeto debido a la dignidad inherente al ser humano”.
