En Costa Rica, el cáncer es la segunda causa de muerte, pues diariamente cobra la vida de 12 personas. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), casi una de cada seis muertes en el mundo se debe a esta enfermedad y se prevé que el número de detección de nuevos casos aumente en un 70% en los próximos 20 años.
El nuevo laboratorio que se construye actualmente en la Universidad de Costa Rica (UCR) pretende orientarse al estudio y diagnóstico temprano de cáncer, así como al entrenamiento en técnicas quirúrgicas de cirugía mínimamente invasiva.
La cirugía mínimamente invasiva es una técnica muy limpia que se trabaja fuera del paciente, dado que se mira todo a través de una pantalla. Consiste en hacer incisiones muy pequeñas donde se introducen los instrumentos que el cirujano necesita para realizar el procedimiento. Como las incisiones no son de gran tamaño, el proceso postoperatorio es más corto y menos doloroso, lo que resulta beneficioso para el paciente.
En este nuevo espacio, la población podrá realizarse estudios para un diagnóstico temprano en diferentes tipos de cáncer, como el de mama y el de próstata, que tienen la incidencia más alta en mortalidad en mujeres y hombres, respectivamente, el gástrico, el de colon y el de tiroides.
Asimismo, este innovador laboratorio permitirá la formación de especialistas médicos y la investigación sobre procesos quirúrgicos relacionados con esta enfermedad, con el fin de mejorar los tratamientos que actualmente se realizan en el país.
El edificio constará de cuatro pisos, en un área de construcción de 2850 metros cuadrados, y tendrá espacios asépticos con climas controlados y laboratorios novedosos que facilitarán el análisis de biopsias. Además, contará con de un auditorio que servirá para transmitir cirugías y procedimientos relevantes que se realicen en el país o en el extranjero, así como diferentes conferencias que permitan el intercambio internacional de conocimientos.
La construcción de este laboratorio inició en octubre del 2017 en la Ciudad de Investigación de la Sede Rodrigo Facio y se espera que esté lista a finales de setiembre de este año. La inversión de su construcción es cercana a los $4.750.000 y fue financiado por el Banco Mundial.
Aprendizaje e investigación
El Laboratorio de Diagnóstico de Cáncer y Cirugía Mínimamente Invasiva viene a reforzar y expandir el importante trabajo que realiza el Laboratorio de Entrenamiento e Investigación en Cirugía Mínimamente Invasiva (Leicimi) desde hace cinco años en la UCR.
El Leicimi estudia y trabaja justamente en el área de la cirugía mínimamente invasiva, que permite a los estudiantes de Medicina formarse en esta técnica quirúrgica moderna.
Actualmente, en el país se utiliza este tipo de técnica para hacer cirugías de la vesícula y de la vía biliar, de apéndice, de tumores en el intestino y en el estómago y quitarle el bazo a un paciente. En el área de urología, se implementa para quitar un riñón, piedras, los ovarios, las trompas de falopio, el útero y para hacer cirugías de tumores en general.
En este nuevo laboratorio, los estudiantes de la UCR que estén cursando una especialidad quirúrgica podrán aprender procedimientos laparoscópicos y entrenarse en ambientes ficticios de simulación que les permitirá consolidar las técnicas antes de aplicarlas en los pacientes reales.
“El aporte fundamental va a ser en el campo de la enseñanza, de la docencia, en relación con los médicos, tanto los que se están formando como especialistas en el campo quirúrgico, como los que ya son especialistas y requieren adquirir nuevas enseñanzas y técnicas quirúrgicas”, explicó Marco Antonio Zúñiga, coordinador del Leicimi.
“Lo que nosotros hacemos realmente es darle la oportunidad a los cirujanos para que adquieran estas destrezas y habilidades y puedan aplicarlas en los pacientes. Ese es el beneficio: mejorar la calidad de los cirujanos que tenemos en el país y poderlo trasladar al beneficio de la salud del paciente. Esa es la intención de todo esto”, expresó.
Actualmente, el Leicimi implementa esta técnica en cirugía general, ginecología, cirugía pediátrica y urología. Sin embargo, cuando se cuente con este nuevo edificio, se pretende incursionar en otras áreas, como ortopedia, neurocirugía y otras especialidades quirúrgicas que usan la técnica mínimamente invasiva.
En este nuevo laboratorio, se contaría también con la participación interdisciplinaria de otras especialidades, como Enfermería, y de personas que les interese entrenarse como instrumentistas en cirugía mínimamente invasiva. De igual forma, se atenderá a las personas que sean referidas de diferentes médicos o centros donde exista la sospecha de que puedan tener algún tipo de tumor.
De acuerdo con el Dr. Zúñiga, la construcción de este nuevo laboratorio representa una oportunidad en cuanto a lo que es ampliar el conocimiento; poder estudiar nuestras propias patologías; darles oportunidad a los médicos, a través de estudios clínicos, de desarrollar su conocimiento científico y poder tener un espacio para que el profesional pueda ampliar todos los criterios relacionados con la cirugía mínimamente invasiva y el cáncer.
