Universitarias Instituto de Investigaciones de Ciencias Económicas de la UCR

Proyecciones de crecimiento económico no superan el 3%

Expertos destacan leve crecimiento de demanda interna y un menor optimismo por parte de los empresarios.

El crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) del país para el primer semestre del año se estima entre un 2,5% y un 3%, y para todo el año rondará los 2,75% y 3,25%, de acuerdo con el Análisis de Desempeño de la Economía y Pronóstico para el primer trimestre 2019 que realizó el Instituto de Investigaciones en Ciencias Económicas (IICE-UCR).

Esta perspectiva es producto del lento crecimiento del consumo privado, la caída en la formación bruta de capital, una proyección de incremento en las tasas de interés y un mercado de fondos prestables con lento crecimiento.

De acuerdo con Rudolf Lücke, investigador del IICE-UCR, durante el año pasado el PIB registró un descenso en su ritmo de crecimiento interanual, pues comenzó con un 3% y al tercer trimestre se ubicó en 2,4%, cifra más baja desde el 2013.

“Lo que observamos es un crecimiento por debajo del 3% de aquí a marzo, lo que es bastante bajo en comparación con años anteriores, y definitivamente está relacionado con el lento aporte del Gobierno en gastos y con que los hogares consumen a un ritmo más precavido”, indicó Lücke.

A finales del año pasado los consumidores redujeron sus salidas de paseo, comidas fuera del hogar, compra de calzado y vestido. Eso generó efectos como una menor actividad económica, aumento del desempleo y una inflación baja.

Según el experto, las expectativas de los compradores en estos primeros meses están enfocadas en pagar matrículas de colegios, universidades y alquileres, por lo que la tendencia a gastar en salidas o compra de vestidos y zapatos se queda relegada a un segundo plano.

Por otra parte, se espera que durante este primer trimestre la tasa de desempleo esté cercana al 10%, la inflación por debajo del 2%, debido a que el consumo del Gobierno y del sector privado no crece, o lo hace lentamente, y la tasa de interés a corto plazo está baja, mientras que aumenta la de largo plazo.

Estos datos implican que la capacidad para generar empleo en el país se reduce mucho, lo que afecta en gran medida a las personas desempleadas y a quienes recién se gradúan. Habría una mayor afectación para los sectores de servicios y comercio, pues podría darse una menor demanda, pero a la vez, el precio del dólar podría mantenerse estable y, por ende, los productos importados se quedan en los mismos niveles.

Productores cautos

A través de una encuesta telefónica realizada a una muestra de empresarios el IICE-UCR logró determinar que las expectativas de este sector para el primer trimestre del año son menos optimistas, con una reducción de dos puntos porcentuales, en relación con el trimestre anterior, lo cual se explica, por un deterioro de los índices agropecuarios, de comercio, servicios y manufactura.

“En términos de empleo, durante este primer trimestre predomina la estabilidad en el nivel de contratación, un 57% de los empresarios esperan mantener sus planillas estables, pero en comparación con el promedio de los últimos ocho años, todos los sectores mostraron un nivel menor de expectativa neta de empleo, al menos de diez puntos porcentuales, siendo el sector comercio el más afectado”, detalló Gabriela González, investigadora del IICE-UCR.

Sobre nuevas contrataciones, un 10% de los encuestados señaló que en los meses de octubre a diciembre adquirieron personal fijo y por esta razón no esperan realizar nuevas contrataciones los primeros tres meses del año. De hecho, las posibilidades de contratación de nuevos empleados para los meses de enero a marzo son moderadas y se ubican entre 5 y 20% en los distintos sectores.

Según el informe, en términos generales, aproximadamente un 72% de los entrevistados no anticipa cambios en las contrataciones, un 12% espera incrementos y un 16% prevé reducciones.

Los menos optimistas para este período son los del sector agropecuario, quienes consideran que se ha reducido su producción, particularmente para aquellos dedicados al cultivo de banano, café y arroz.

Por su parte, los empresarios de manufactura señalan como problema los altos costos de producción, cargas sociales y la demanda interna, y los que se ubican en el servicios o comercio consideran que los factores estacionales afectan la demanda y generan incertidumbre.

No obstante, el sector construcción si presenta un mayor optimismo para estos tres primeros meses del año, siendo el que mostró el mayor porcentaje de intención de contratación con 20 puntos porcentuales.

Estos empresarios esperan aumentar su planilla por la demanda de proyectos que se están concretando para estos meses del año y por el desempeño que ha tenido la actividad en los últimos meses del año anterior, sobre todo de proyectos de edificios de oficinas y naves industriales.

“Si se trata de nuevas inversiones por parte de los empresarios tampoco hay una alta expectativa, tomando en cuenta que la producción y utilidades han sido menores. Hay una alta incertidumbre y el sector empresarial está esperando que se reactive un poco más la economía”, indicó González.

El sector empresarial indicó que prevén aumentos en sus ventas que van desde el 24% en el área de manufactura a 46% en servicios, pero estas cifras demuestran un descenso del 2% en el pesimismo en todos los nichos, con respecto al trimestre anterior.

La mayoría espera que sus utilidades se mantengan; por ejemplo, entre un 37% y un 60% de los empresarios tiene esta proyección, dependiendo del sector, y entre un 25% y un 39% presentó expectativas más favorables.

En definitiva, señaló Gabriela González, los empresarios están a la espera de un plan para reactivar la economía; pese a las proyecciones del Banco Central de un mayor dinamismo económico, piden más acciones concretas que generen confianza.

Se trata del índice global de expectativas con nivel más bajo desde el año 2011.


Sectores beneficiados

El análisis del Instituto de Investigaciones en Ciencias Económicas (IICE-UCR) reveló que, durante el 2018, en comparación con el año anterior, los sectores que sí lograron un crecimiento de su índice interanual fueron alojamientos y construcción.

La construcción tuvo un incremento registrado a octubre de 2018 del 10%, pues el año anterior obtuvo un -12%, mientras que las actividades de enseñanza y salud humana tuvieron una caída del 2,5%.

El sector externo, por su parte, hizo un mayor aporte a la actividad económica en los últimos meses, pues la baja en la demanda interna es en cierta medida compensada por mejores resultados en las balanzas comerciales y de servicios. Pero el crecimiento de las exportaciones se ha reducido.


Disparadores de la inflación

Los productos y servicios que más dispararon la inflación durante el año pasado fueron:

  1. Automóvil
  2. Gasolina
  3. Boleto aéreo
  4. Servicio doméstico
  5. Autobús urbano
  6. Paquetes turísticos
  7. Atún en conserva
  8. Alquiler de vivienda
  9. Educación Universitaria
  10. Educación Primaria

Fuente: IICE-UCR.


 

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