El pasado 16 de febrero, el Consejo Universitario de la Universidad de Costa Rica (UCR) nombró a la comunicadora Sylvia Carbonell como la nueva directora de las Radioemisoras de esta casa de estudios para los próximos cuatro años.
Carbonell labora en la UCR desde 1996, se ha desempeñado como profesora de diversos cursos relacionados con la radiodifusión, tanto en grado como en posgrado; además, desde el 2013 hasta la fecha, es periodista y conductora del programa Noticias Universidad.
Actualmente, es la directora del Posgrado en Comunicación y docente de la Escuela de Ciencias de la Comunicación Colectiva.
A continuación, un extracto de la conversación que UNIVERSIDAD sostuvo con la nueva directora, en donde expone aspectos importantes de los medios de comunicación públicos y sus futuros planes en la radio.
¿Cuáles son las posibilidades y facilidades comunicativas que tiene la radio?
–La radio es un medio de comunicación que compite con otros medios y, actualmente, con las redes sociales. Evidentemente esta competencia se basa en tener unas características propias.
La radio llega con más facilidad, por la sencillez de su tecnología, a muchos más lugares, pues no todo el mundo tiene una computadora para estar informándose u opinando a través de las redes sociales. La televisión es un medio de comunicación que no se consume en la mayoría de las veces en forma individual sino de forma colectiva y la prensa está entrando en un momento en el que necesita del refuerzo de Internet para ser rentable.
La radio sigue teniendo una capacidad de penetración importante y nos permite, de alguna manera, explotar todas las posibilidades que tiene el lenguaje radiofónico.
Esto es importante pues no solo nos dedicamos a la información, sino que a través de la radio podemos entretener, crear piezas artísticas de ficción… es decir, nuestras posibilidades son muy grandes al tener una única materia significante que es el audio.
En los últimos años ha existido un crecimiento de las redes sociales, ¿se ha quedado la radio en desventaja?
–Relativamente, relativamente. La radio también ha tenido que hacer un salto importante y, de alguna manera, vincularse con las redes sociales; pero recuerden que ahora no ocupamos un aparato receptor tradicional para escuchar la radio, sino que la podemos escuchar a través de los dispositivos móviles, tabletas o computadoras.
De alguna manera, la radio ha adoptado las modificaciones suficientes para estar en los medios de comunicación. Pero, sobretodo, hay un tema muy importante: la radio tiene muchas funciones, como las de informar, entretener y también publicitar aquellas voces que normalmente no tienen voz. La radio puede recoger estas voces y ser más distributiva.
¿Está la radio destinada a morir?
–Todo esto de las muertes previamente anunciadas es muy relativo. Lo mismo se ha dicho de la prensa escrita o de los libros. La radio es el medio que con mayor facilidad nos acompaña en los desplazamientos, pues están en los vehículos.
Es posible que la radio tenga dificultades, como tienen los demás medios de comunicación frente a la competencia con las redes sociales, pero ni es inmediato, ni debemos resignarnos a eso. Todo lo contrario, debemos buscar las maneras de vincularnos a una audiencia lo más amplia posible.
¿Cuál es el rol de los medios públicos en estos tiempos?
–Esa es la gran discusión. Los medios públicos no tienen el mismo perfil que los privados, los cuales subsisten con base en la publicidad y, por ende, muchas veces son anuentes a determinadas presiones por parte de los comerciantes.
La radio pública tiene otras características, la principal es el servicio, pues no estamos para ganar dinero, sino para servir a nuestra audiencia. Es un servicio donde podemos dar opiniones pero, sobretodo, incorporar voces plurales y diversas. Ese es el trabajo de las emisoras de radio, de la televisión e incluso de la prensa escrita pública.
¿Entonces tienen más ventajas los medios públicos?
–No sé si tienen más ventajas. Los medios comerciales dicen que nosotros tenemos muchísimas más ventajas porque no dependemos de la publicidad, sino de los presupuestos; pero eso no es una ventaja. A veces es un inconveniente porque debemos cumplir con una serie de normas y controles.
Nuestra responsabilidad es más grande que las que tienen las emisoras privadas porque nuestro perfil es el servicio y convertirnos en medios de comunicación que posibiliten que las voces sean plurales.
Se habla mucho de las deficiencias en materia legal con que cuentan los medios ¿Falta una nueva ley nacional?
–Sí claro, evidentemente nos hace falta una nueva ley de radio y televisión y que se reconozca en el país la comunicación como un derecho. Eso es algo por lo que debemos estar luchando. ¿Cuál es la misión de la radio? Nosotros debemos procurar el debate, el conocimiento y la información sobre esa ley.
Nosotros no podemos seguir viviendo con una ley del año 54, es absurdo y me parece que no debemos convencer a nadie de que hemos avanzado suficiente como para tener una nueva ley que responda a las necesidades y expectativas del momento. Esto se tiene que colocar en la agenda nacional.
¿Cuáles son los planes que tiene para la radio?
–Estoy muy honrada y complacida, pues desde pequeña la radio ha sido mi medio de comunicación a través del cual me he desarrollado. Mi plan es muy sencillo y básico.
Yo sé escuchar, pero también quiero que me escuchen y que, además, mis decisiones sean lo más consensuadas posibles. Esto es un plan sencillo porque la radio no acaba de nacer, la radio tiene toda mi historia y un equipo que ha trabajado constantemente en favor de estas radioemisoras.
Yo tengo que dirigir y consensuar con esta premisa: primero la que nos da la reglamentación de los medios de comunicación de la UCR, que es el marco jurídico que nos ampara; después, lo que tenemos que procurar es llegar a la excelencia a través de un buen servicio a nuestra audiencia. Para eso hay que replantearnos que estamos haciendo para mejorarlo; no es crear algo nuevo, sino mejorarlo en favor de que las voces sean lo más plurales y diversas posibles, que vayamos incorporándonos a la tecnología para llegar con más facilidad a una audiencia lo más amplia posible.
No es un plan súper ambicioso ni revolucionario, es sencillo. Quiero continuar la tarea de mis antecesores revisando y mejorando todo aquello pero, sobretodo, siendo parte de un equipo que ya funciona en las radioemisoras, y potenciar mi equipo de trabajo para que mejore nuestra labor cotidiana. La radio necesita armonizar un equipo para que el producto al aire sea mucho mejor.
Además, en este momento también debemos optar por la regionalización de las radioemisoras, pues hay una cabina en Puntarenas que nunca ha sido utilizada. Queremos hacer un proyecto que involucre estudiantes y que se haga una red de corresponsales.
