La inclusión de la Universidad Técnica Nacional (UTN) cambiará la distribución porcentual del Fondo Especial para la Educación Pública (FEES) 2023, pero en términos nominales el presupuesto no cambia porque la institución ingresa con sus propios recursos.
La UTN es la última universidad en incorporarse al FEES, la que recibe menor presupuesto y la que presidirá el Consejo Nacional de Rectores (Conare) el próximo año. Sin embargo, desde el 2020 aporta —al igual que el resto de universidades— el 6,19% de su presupuesto a los Fondos del Sistema de Conare, por lo que esta partida tampoco variará en términos porcentuales.
Sin embargo, la distribución de los Fondos del Sistema sí podría ser objeto de discusión y negociación en el marco de la redistribución del FEES a lo interno de las universidades, ya que por concepción es un mecanismo que cumple con este propósito y que podría ser variado como parte de la metodología que se desarrollará en el seno de Conare.
“Es una redistribución con fines específicos que se hace desde hace mucho, porque, por ejemplo, la UCR es la que aporta más y es de las que recibe menos. Conare tiene dos caminos para hacer la redistribución: el más rápido es a través de los fondos del sistema ya sea aumentando o cambiando su asignación y el segundo camino es el discutir la distribución del FEES Institucional basado en indicadores”, explicó el ingeniero Marco Monge, asesor de la Vicerrectoría de Administración de la Universidad de Costa Rica (UCR).
En esta redistribución, los más beneficiados son la Universidad Estatal a Distancia (UNED) y el Tecnológico de Costa Rica (TEC), que aportaron 6,9% y 10,4% respectivamente y tras la redistribución de estos fondos recibieron el 39,5% y el 16,5%.
Estos fondos se crearon en el 2004, con el propósito de darle recursos a la UNED, como una estrategia de redistribución ante una negociación que en términos reales crecía de forma importante y, por esta razón, es la institución más beneficiada, explicó Rodrigo Arias, presidente de Conare y proponente de esta alternativa.
A pesar de que de entrada no parecen haber variaciones presupuestarias, para el rector de la UTN, Emmanuel González, la incorporación de la institución al FEES es vital porque blinda constitucionalmente el presupuesto de la institución.
González también ve positivo el impulso de Conare en retomar la discusión de redistribuir fondos a lo interno del sistema de educación superior, pero espera que no caiga en canibalismo y fracciones entre las universidades: “No es golpear la mesa ni desvestir un santo para vestir otro, si las universidades se dividen hasta ahí llegamos, podemos desarrollar metodologías que involucren compartir laboratorios, equipo… no necesariamente que nos den más dinero”.
“Nosotros somos una universidad muy eficiente, lo que hacemos con nuestro presupuesto dando ₡5.300 millones en becas y mantener todas las sedes en Atenas, Guanacaste, San Carlos… es una universidad muy barata para lo que aporta al país y, por eso, para nosotros es más que justo una redistribución de esos fondos (del sistema)”, comentó González.
Arias dijo que Conare no tiene un plazo definido para la discusión de la redistribución, pero que inicialmente se conformará una comisión de trabajo para que, a partir de octubre, desarrolle una metodología de cálculo: “No hay un plazo. Sin embargo, mi expectativa es que en unos diez meses se haya avanzado hacia un producto claro que nos ayude a avanzar en esta materia”.
