Universitarias

Elección de representantes ante el Consejo Universitario aún sin fecha definida

Los miembros del Consejo Universitario esperan la definición de fechas por parte del Tribunal y manifiestan la importancia del proceso para que la universidad pueda operar.

Este 2020, la elección de autoridades en la Universidad de Costa Rica (UCR) no se limita a la Rectoría; en el segundo semestre del año deberán elegirse las representaciones académicas de las áreas de Ciencias Sociales, Ciencias Básicas, Agroalimentarias y del Sector Administrativo ante el Consejo Universitario (CU)

El período de nombramiento de los cuatros miembros de esas áreas vence el próximo 31 de diciembre y de momento el Tribunal Electoral Universitario (TEU) no ha definido las fechas del proceso electoral, ante el panorama inédito en la institución por la emergencia sanitaria nacional.

(Ilustración: Luis Arias)

La normativa universitaria no contempla la extensión del nombramiento de las representaciones ante este órgano universitario. Pero señala en los artículos 31 y 32 la posibilidad de realizar la elección por medios electrónicos, en cuanto garantice el voto secreto y la seguridad del proceso.

UNIVERSIDAD consultó a la presidenta del Tribunal Electoral Universitario, Virginia Borloz, conocer sobre el proceso de elección de miembros del CU; sin embargo, Lupita Abarca, administrativa suplente de este órgano, informó al cierre de edición que aún no están definidos los procesos, ni las fechas y que quizá la próxima semana esté más claro el panorama.

El CU es un órgano colegiado de 13 miembros seguido en jerarquía a la Asamblea Universitaria, cuyas representaciones ocupan el cargo por cuatro años -con excepción de la representación estudiantil- y sin posibilidad de reelección inmediata.

Sus labores son esenciales para el buen funcionamiento de la Universidad, entre ellas se encuentra la aprobación del presupuesto anual de la institución.

“¿Qué implicaría no hacer la elección este año? Perdemos el quórum estructural dentro del Consejo. A partir del 1 de enero habría una parálisis; se tendría que cerrar la Universidad, porque no se podrían aprobar presupuestos, ni juramentar a nadie, no se podrían hacer respuestas a proyectos de ley y todo lo que eso implica”, expresó Madeline Howard, directora del Tribunal.

De acuerdo con el Reglamento de Elecciones Universitarias, «las inscripciones deberán hacerse en el período comprendido entre la convocatoria a elecciones y veinticinco días hábiles anteriores a la fecha de la elección» y la convocatoria por parte del TEU con al menos cuarenta días hábiles de antelación.

La elección de las representaciones académicas la realiza la Asamblea Plebiscitaria conformada por docentes en Régimen Académico, jefaturas de oficinas administrativas, ex rectores, profesores eméritos, representantes de colegios profesionales, representantes estudiantiles, miembros del CU, rector y vicerrectores.

En el caso de la representación del sector administrativo podrán votar las personas funcionarias del área.

En caso de empate en el primer lugar o de que ningún candidato alcance el 40% de los votos válidamente emitidos en ambos procesos electorales, se repetirá la elección entre los dos candidatos que hayan obtenido el mayor número de votos.

La segunda ronda deberá ser convocada dentro de los ocho días hábiles siguientes y regirá el padrón electoral utilizado en la primera, según establece el Reglamento de Elecciones Universitarias.

Esperan fecha

Las actuales representaciones de ciencias sociales, básicas, agroalimentarias y del sector administrativo esperan la definición de fechas por parte del Tribunal, y confían en que sus relevos estén debidamente acreditados al 1 de enero.

“Yo estoy positiva, creo que la elección que se va a hacer de la Rectoría va a ser un buen ejercicio para que el Tribunal pueda resolver este año las otras elecciones”, comentó Teresita Cordero, representante del Área de Ciencias Sociales.

En opinión de Cordero, lo importante es no perder el quórum estructural, siendo este el número de miembros requeridos para que el órgano colegiado pueda sesionar válidamente.

Otros miembros coinciden en la necesidad de una pronta elección para no afectar la operación del Consejo a falta de quórum estructural, aunque algunos de ellos han manifestado su preocupación.

“Oficialmente, el término de nuestro período concluye el 31 de diciembre y según el Estatuto orgánico no hay manera de hacer una extensión, entonces estoy preocupado. Me parece que si bien la comunidad académica está preparada, hay una falta de acción del TEU, más allá de la emergencia”, expuso Carlos Méndez, representante de Agroalimentarias.

La directora del órgano colegiado, Madeline Howard, agregó que “le toca al TEU resolver y si al primero de enero no hay representantes simplemente la Universidad se cierra, no hay becas, no hay salarios, no hay nada”.

Por otro lado, ante la posibilidad expuesta en el Reglamento de Elecciones Universitarias sobre votación por medios electrónicos, los cuatro representantes actuales y la directora del órgano colegiado coinciden en que, de realizarse en esa modalidad, debe asegurarse la confidencialidad del voto.

“El Tribunal tiene un desafío muy fuerte, porque el voto electrónico nos presenta la siguiente paradoja: para que el voto sea seguro es muy posible que requiera ser trazable, pero si tiene trazabilidad entonces implica que la privacidad de quien votó podría exponerse, pero estamos conscientes de que el Tribunal tomará la mejor decisión”, dijo el representante del sector administrativo, Warner Cascante.

En opinión de Rodrigo Carboni, representante de Ciencias Básicas, la situación extraordinaria y el poco margen de tiempo podría limitar la implementación de un sistema electrónico seguro para esta elección.

Sin embargo, los miembros coinciden en que el TEU es el órgano competente en materia electoral y se encuentran a la expectativa de una programación pronta de fechas.

“No deberíamos estar alarmados y más bien esperar a que el Tribunal resuelva el tema. Es muy importante que tengamos las representaciones porque permite que el Consejo Universitario continúe funcionando”, agregó Cordero.

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