El presidente de la República, Carlos Alvarado, descartó la posibilidad de cerrar el Consejo Nacional de Producción (CNP), pese a los cuestionamientos que existen desde hace meses de administradores de escuelas y, más reciente, de parte del diputado socialcristiano Pablo Heriberto Abarca.
“Descartaría decir simplemente ‘cierren y se acabó’. Hay un importante sector productivo que tiene vínculo institucional. Tienen que sostenerse con su propia actividad”, contestó Alvarado ante una pregunta de la prensa este miércoles por la noche.
Alvarado señaló que la institución tiene que mejorar y que así lo pidió al presidente ejecutivo, Rogis Bermúdez.
“Yo creo que en el CNP hay muchas cosas que mejorar, analizar y que cambiar. También hay un elemento particularmente importante, es que el CNP es importante para la economía rural y hoy en lo temas de reactivación (económica)”, respondió.
El CNP cuenta con el Programa de Abastecimiento Institucional (PAI), el cuál provee alimentos a escuelas, cárceles y hospitales del Estado. Para Alvarado, “eso es una base sólida y fuerte para el sector agropecuario y productor, para pequeños y medianos agricultores”.
El mandatario destacó también que parte de los problemas económicos de la institución se debe al atraso en los pagos de parte de algunas instituciones.
“Parte del tema económico del CNP tiene que ver con el pago de instituciones y atrasos en eso.(…) Yo en el discurso del 2 de mayo, por ejemplo, mencioné que aquellas instituciones que tengan deudas con el CNP, tienen que cancelarlo rápido. Me dijo don Rogis (presidente ejecutivo del CNP) que días después habían recaudado ₡2300 millones que tenían en morosidad. Eso tiene que ver con gestión y eso ha ido avanzando”, alegó el presidente de la República.
Críticas
El martes de esta semana, el diputado del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC) Pablo Heriberto Abarca presentó un proyecto de ley para cerrar el CNP.
Abarca pretende que el CNP deje de duplicar funciones que ya cumplen (o deberían cumplir) entidades como el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) y el Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC).
El proyecto también busca frenar el deterioro del CNP que genera pérdidas anuales por varios cientos de millones, una “crisis económico-financiera” de la entidad que ya fue señalada por la propia Contraloría General de la República (CGR) en distintas ocasiones, incluida una en 2013, cuando recomendó analizar la posibilidad de cerrarla.
“Yo desde el inicio de este período tenía en la mira al CNP, que es una institución que ha perdido su norte y su razón de ser desde hace muchos años, que tuvo su apogeo en los 90 pero que después no pudo reventar, a pesar de que hubo esfuerzos importantes por avanzar”, aseguró.
A las críticas de esta institución se suman las Juntas Administrativas y de Educación de escuelas y colegios públicos, que acumulan en la Dirección de los Programas de Equidad del Ministerio de Educación Pública (MEP) más de 200 denuncias contra el CNP.
Las denuncias de los centros educativos coincidieron en varios motivos, desde sobreprecio de los productos, hasta la poca capacidad de distribución del Consejo.
Por este motivo, el diputado del Partido Liberación Nacional (PLN), Wagner Jiménez, presentó una iniciativa para que los centros educativos nacionales puedan comprar sus insumos dentro o fuera de la institución, según prefieran.
La idea de Jiménez es reformar el artículo 9 de la Ley Orgánica del CNP N° 2035, el cual obliga a las entidades públicas a comprarle los suministros genéricos con los cuales trabaja, es decir, centros educativos, cárceles y hospitales deben pagar los precios cobrados por la institución.
Actualmente el CNP provee alimentos a 1.879 centros educativos del país.
