Los Libros

La memoria activa del Teatro Nacional

Más allá de ser la joya arquitectónica de la capital, el Teatro Nacional, a lo largo de más de 125 años, ha sido el albergue de una importante actividad cultural costarricense. Retomar, analizar y recuperar esa memoria activa es lo que propone este conjunto de investigaciones realizadas en homenaje a su centenaria trayectoria.

Aunque con un atraso involuntario, la editorial de la Universidad de Costa Rica presenta los primeros cuatro tomos de esta bella colección de seis dedicada al Teatro Nacional en su 120 aniversario, compilada y curada por la doctora Patricia Fumero.

El primer tomo, a cargo de Gladys Alzate, hace un recorrido por 120 años de las principales actividades teatrales, de compañías nacionales e internacionales, que se presentaron en sus dos escenarios: la sala de teatro principal y el teatro Vargas Calvo.

Se vincula la programación teatral institucional con los acontecimientos históricos, políticos y sociales más relevantes de cada decenio, en correspondencia directa con los modelos de desarrollo vigentes: el periodo liberal (1897-1939), el periodo reformista (1940-1949), el periodo socialdemócrata (1950-1979) y el periodo neoliberal (1980-2017).

El segundo tomo corresponde a la investigación de Zamira Barquero sobre la música y el canto lírico en el Teatro Nacional de 1987 a 2007, destacando la labor de quienes impulsaron la música y protagonizaron la actividad vocal costarricense, “porque sus nombres debe formar parte de la memoria cultural del país”.

En el tercer tomo, dedicado a la danza de 1897 a 2017, la crítica e investigadora de esta disciplina Marta Ávila hace un recuento que abarca desde las primeras figuras de ballet clásico, hasta espectáculos de danza moderna y otras expresiones coreográficas que se presentaron en el Teatro Nacional. Con una mención especial al Festival de Coreógrafos Graciela Moreno, creado en 1981, “cuyo perfil ha evolucionado —según las necesidades del medio e iniciativas de los directores del Teatro— hasta realizar en 2020 la edición XXXVII”.

El cuarto tomo, titulado In Crescendo, a cargo de María Clara Vargas Cullell, documenta la historia de la música instrumental en el Teatro Nacional desde su inauguración hasta 2007. El estudio permite comprender cómo este importante espacio “pasó de ser el escenario de esporádicas actividades instrumentales, a finales del siglo XIX y las primeras del siglo XX, a un escenario de gran efervescencia musical y la morada principal de las música instrumental académica del país, en la primera década del siglo XXI”.

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