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La palabra como catarsis 

En su gira promocional de su más reciente libro Somos lo que hablamos, el psiquiatra español Luis Rojas Marcos aconsejaba en las entrevistas que era prudente y necesario hablar solo

Los rituales de Kukha

Mery Carvajal

Editorial UCR

En su gira promocional de su más reciente libro Somos lo que hablamos, el psiquiatra español Luis Rojas Marcos aconsejaba en las entrevistas que era prudente y necesario hablar solo, ya fuera mediante ese diálogo interior interminable, o mediante una conversación consigo mismo.

Las palabras de Rojas pareciera que fueron tomadas con anticipación por Kukha, el personaje ideado por Mery Carvajal en Los rituales de Kukha, en el que esta niña exterioriza, y si se quiere exorciza, una serie de realidades que lleva dentro.

“Zafarrancho escolar”, “A patita pelada”, “Ritual con el abuelo”, “Las margaritas”, “La magi”, “Remembranzas”, “Visita al abuelo”, “Idas a la biblioteca” y “Pruebas finales” son algunos de los relatos incluidos en el texto.

La palabra, una vez más, sirve como agente para esa catarsis de aliviar las emociones, de abrir puertas para que salga el dolor y para que cada cual se encuentre en este a veces lento y agónico caminar.

En ese clima de incomprensión es que Kukha se encuentra atrapada, pero un día descubre que tiene en sí una herramienta maravillosa e irrepetible: el lenguaje.

La autora, sin conocer el texto de Rojas Marcos, establece una conexión con la idea a contracorriente de que hablar a solas es bueno, y que esa conducta no tiene ninguna relación con la locura como se ha dicho desde hace ya muchos años.

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