Álvaro Arias, ciudadano y esposo de una de las víctimas del caso Aldesa, encaró el pasado sábado 17 de junio al expresidente de Aldesa, Javier Chaves Bolaños -a quien las víctimas responsabilizan de la presunta estafa y de sus pérdidas económicas.
En el restaurante Pescatore, en Escazú, Arias se encontraba con su hija y su esposa celebrando el día del padre, cuando en la mesa de al lado se sentó Chaves, a quien Arias señala como “quien estafó a tantos costarricenses, entre ellos mi esposa y mi hijo”.
Evidentemente molesto por la situación, Arias solicitó a la administración del establecimiento que movieran a Chaves y su familia de mesa para no tenerlos en frente, y se le dijo que lo harían, pero luego esto no sucedió, según denunció el ciudadano.
Un video de lo sucedido circuló en redes sociales. En él, Arias señala que Chaves no solamente estafó a su familia sino a muchas personas extranjeras y a muchos adultos mayores. “Yo me sentí, siendo un adulto mayor, en responsabilidad de defenderlos”, dijo.
Por eso, luego de que el restaurante no respondiera a su solicitud llamó a la policía, pagó la cuenta y se retiró. “En este país a veces ocurren cosas que no entendemos, los principios y los valores los estamos dejando perdidos y eso no puede seguir ocurriendo”.
Arias indicó que de no haber hecho nada se hubiera sentido muy mal. “Gracias a Dios hice algo y pienso en todos ustedes los que fueron estafados y los defendí”, dijo.
“Ojalá todos hagamos esto, para que este señor coja la casa por cárcel, que es lo que debe hacer mientras se decide en los tribunales meterlo a la cárcel, que es donde debe estar”, concluyó.
