Se estaría ante un nivel de concentración en la posesión de frecuencias que supera los parámetros de la propia Sutel. Mientras tanto, han desaparecido espacios informativos y de opinión.
La Red de Medios e Iniciativas de Comunicación Alternativa (RedMICA) alzó la voz de alarma ante tres casos concretos que considera ejemplos de concentración y desaprovechamiento de la frecuencia modulada (FM).
Se trata en primer lugar del enrevesado camino que han seguido las frecuencias 90.7 y 91.5. Al cierre de edición en 90.7 se transmite la Q’Teja y en 91.5 -que previamente alojó a esta emisora- solo se escucha un anuncio sobre el traslado de la emisora.
El segundo caso tiene que ver con el litigio que envuelve a dos empresas que pelean el derecho de trasmitir a través de la frecuencia 105.9, que hoy en día aloja a Radio Urbana.
La tercer denuncia se refiere a la aprobación de la compra por parte de Central de Radios de la empresa Compañía Nacional de Radiofusión Limitada, la cual es concesionaria de la frecuencia 97.9.
Desde la RedMICA, el productor Sebastián Fournier expresó que esa organización se percató de estos casos pues da seguimiento a todo lo relevante en el tema y “se nos encienden las alarmas” al ver que, a través de su empresa Central de Radios, Repretel está en proceso de adquirir una frecuencia más.
De acuerdo con datos de la Superintendencia de Telecomunicaciones (Sutel), contenidos en la resolución RCS-299-2016, fechada el pasado 12 de diciembre, en el país se han otorgado 55 concesiones para el aprovechamiento de frecuencias en la FM. De ellas -antes de concretarse la compra de la concesionaria de 97.9- Central de Radios controla siete -un 13%- y Cadena Radial Costarricense (CRC) otras siete. Es decir, entre dos empresas controlan poco más de la cuarta parte de la oferta nacional en FM. La concesionaria de 97.9 hasta ahora ha sido propiedad de la CRC.
La propia Sutel, en el oficio 4349-SUTEL-DGC-2013, estableció como criterio de concentración el hecho de que “un grupo económico cuente con más de cuatro emisoras”.
El espectro radioeléctrico es público y el uso en una frecuencia específica por parte de actores públicos o privados se posibilita por la vía de la concesión, que solo puede ser traspasada o cedida luego de una autorización explícita del Estado.
Consultado sobre el tema, el viceministro de Telecomunicaciones Edwin Estrada enfatizó que el establecimiento y evaluación de los parámetros para determinar la concentración es potestad legal de la Sutel.
¿ALQUILER DE FRECUENCIAS?
A partir del 2009 el Grupo Radiofónico TBC y Radio Cadena Fundación pasan a ser CRC, que agrupa a 89.1, 91.5 , 94.7, 95.9, 97.9, 99.9 y 103.1. Concretamente, las frecuencias 89.1 y 91.5 son concesionadas al día de hoy a la razón social Ciudadelas de Libertad, que en la información de la Sutel aparece bajo la sombrilla de CRC.
En setiembre del 2012, CRC cierra la emisora Rock & Pop y utiliza 91.5 para retransmitir Radio Libertad (570 amplitud modulada, también concesionada a Ciudadelas de Libertad). En abril del 2013, bajo la bandera del Grupo Nación en la frecuencia 91.5 se estrena Q’Teja.
La frecuencia 90.7 funcionó desde 2009 hasta 2015 fue como ADN Radio, luego pasó a ser Viva Radio. La concesionaria es Grupo Latino de Radiofusión Costa Rica (GLR), conformada por Grupo Prisa y Grupo Nación. Viva Radio anunció por Facebook su cierre a partir del 23 de diciembre pasado, en un comunicado firmado por Grupo Prisa. Al mismo tiempo, se anunció el traslado de la Q’Teja -que venía funcionando en 91.5- a 90.7.
Desde ese momento, ambas frecuencias repitieron la misma señal -de Q’Teja- en todo el territorio nacional, hasta el pasado 9 de febrero, cuando 91.5 dejó de retransmitir la programación de la emisora y nada más ofrece un anuncio que informa sobre el traslado de la emisora a la otra frecuencia.
En resumen, durante seis meses entre el 2012 y el 2013 CRC no dispuso para la frecuencia de 91.5 más que retransmitir otra de sus emisoras, luego la frecuencia se utilizó para alojar un proyecto de otra empresa totalmente diferente, el Grupo Nación que bajo la bandera de GLR lanzó Q’Teja.
La RedMICA -de la cual los medios de comunicación de la UCR forman parte- criticó el hecho de que la frecuencia 91.5 sea aprovechada por una empresa ajena a la concesionaria, lo cual “constituye un claro traspaso o alquiler de frecuencias, que contraviene las disposiciones de la Ley General de Telecomunicaciones y el uso de un bien demanial (de dominio público), como lo es el espectro radioeléctrico”.
Sobre este caso, Edwin Estrada apuntó que ese Viceministerio como órgano especializado de la rectoría de telecomunicaciones, “no es competente para determinar o definir el formato del contenido que se transmite en una radiodifusora”.
En cuanto a la denuncia de la RedMICA sobre el aparente traspaso o alquiler de frecuencias relacionado con la explotación de la frecuencia 91.5 FM, apuntó que no consta en ese Viceministerio “comunicación alguna ni denuncia al respecto”, y que si se llegan a aportar “elementos que sustenten su señalamiento” se procederá legalmente según el debido proceso.
“CONCENTRACIÓN PURA Y DURA”
El segundo caso denunciado por la RedMICA es el de la frecuencia 105.9, que de acuerdo a la Sutel es concesionada a Marcosa M y V S.A., así como 91.1 y 91.9.
Esta empresa acudió en el 2014 a Sutel con una denuncia contra Fair Fax Data S.A. por el uso de frecuencia 105.9. Según consta en acta del 24 de setiembre de ese año de la sesión ordinaria del consejo de Sutel, Marcosa M y V firmó un contrato con Fair Fax Data para que esta aportara el contenido de la emisora.
No está claro en qué momento se dio la desavenencia entre ambas empresas, el hecho es que Fair Fax Data opera en la frecuencia la Radio Urbana, a pesar de que en junio del 2015 la Sutel ordenó como medida cautelar el cierre de esa emisora. “Más de un año después, el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones (Micitt) ha hecho caso omiso a esta orden”, denunció la RedMICA.
Al respecto, el viceministro Estrada informó que en los registros de esa institución no consta que se haya notificado la resolución respectiva de Sutel. Sin embargo, informó que “ante la información sobre una denuncia presentada ante la Sutel y remitida ante la Rectoría de Telecomunicaciones” se nombró un órgano director que hará una investigación que determinará la eventual apertura de un procedimiento administrativo.
La denuncia de la RedMICA también incluye el caso de la frecuencia 97.9 y recuerda que en octubre del 2014, la radio juvenil de música en inglés 979 se trasladó a 95.9 FM, ambas frecuencias en control de CRC y repitieron la misma programación, hasta que en diciembre de ese año se emitió una lista de música por la 97.9, lo cual “demuestra un claro uso ineficiente del espectro y limita la posibilidad a otros actores de acceder al uso del un bien demanial”.
Curiosamente, hoy en día en 97.9 se puede escuchar las sesiones de la Asamblea Legislativa.
Sin embargo, lo más llamativo es el hecho de que en julio del 2015 Central de Radios -que pertenece a Repretel- solicitó a la Sutel autorización para adquirir Compañía Nacional de Radiofusión Limitada, razón social concesionaria de esa frecuencia y propiedad de CRC.
Mediante citada la resolución RCS-299-2016, Sutel autorizó “sin ningún tipo de condición” la concentración de las empresas y les instruyó a informarle cuando se haga efectiva la operación de concentración.
UNIVERSIDAD buscó el criterio sobre estos tres casos tanto de la Sutel como de la Cámara Nacional de Radio (Canara) sin que hayan generado respuesta al cierre de edición.
Para Sebastián Fournier, de la RedMICA, opinó que todos estos movimientos “apuntan a la concentración pura y dura”, y lamentó que “la tendencia ha sido a que las radios de buen contenido noticioso han sido sistemáticamente cerradas”, citó como ejemplo de ello los casos de Radio Reloj, ADN Radio, o Radio América que ya no tiene su propio noticiero, sino que se transmite el de ExtraTV 42.
