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Pacientes trasplantados de riñón en el Hospital Calderón Guardia tienen una sobrevida menor en comparación con los del San Juan de Dios

Pese a las estadísticas positivas en cuanto a sobrevida, el Ministerio de Salud cerró, en setiembre del 2023, el programa de trasplante renal con donante cadavérico del Hospital San Juan de Dios.

Los pacientes trasplantados de riñón en el Hospital Calderón Guardia presentan una sobrevida menor en comparación con quienes fueron intervenidos quirúrgicamente en el San Juan de Dios y sin embargo, fue el programa de este último hospital el que fue cerrado por el Ministerio de Salud.

 Las estadísticas de ambos hospitales se extraen del oficio FNCR-0025-2024, del 12 de marzo, enviado por la Fundación de Nefrología Costa Rica a la ministra de Salud, Mary Munive, a quien solicitaron el levantamiento de la orden MS-DGS-2918-2023 que inhabilitó el programa de trasplante renal con donante cadavérico del Hospital San Juan de Dios.

De acuerdo con las estadísticas, de los 146 pacientes trasplantados en el Hospital Calderón Guardia en el período 2015-2023, sobreviven 106 personas; esto corresponde a una sobrevida de un 72,6%. Esta tasa correspondió a un 84,56% para el primer año post-trasplante.

En el caso del Hospital San Juan de Dios, por su parte, en esos ocho años, se trasplantaron 124 pacientes, de los cuales sobreviven 95, significando esto una sobrevida del 77%. Esta tasa, por su parte, fue de un 92.8% un año después de realizado el trasplante.

Sin embargo, aunque estas estadísticas favorecen al Hospital San Juan de Dios y no al Calderón Guardia, el Ministerio de Salud emitió una orden de cierre del programa de trasplante renal con donante cadavérico el año anterior.

“Contaron los trasplantes nada más sin saber si el trasplante fue efectivo o no. Sin tener en sus registros la documentación necesaria para medir la producción en trasplantes según las normas internacionales, es decir los parámetros para cuantificar la productividad que son mortalidad y tasa de donación, sin conocer la historia de los trasplantes renales en el país y el cual llevó a tener hasta 150 trasplantes renales en un año”, señaló en el oficio la presidenta de la Fundación, Sandra Chanto, quien también destacó que este programa no debió haber cerrado nunca.

Las estadísticas de sobrevida y mortalidad, por su parte, sí fueron tomadas en cuenta al momento en que el Ministerio tomó la decisión de cerrar el programa de trasplante hepático del Hospital México el año anterior.

En esa oportunidad, el Ministerio de Salud indicó que el cierre se daba tras los resultados de un informe de la Secretaría Ejecutiva Técnica, que recopilaba datos del 1 de enero del 2017 al 31 de diciembre del 2022. El mismo reveló “una significativa diferencia entre la supervivencia de los pacientes trasplantados en el Hospital Calderón Guardia y el Hospital México, siendo los resultados de este último muy inferiores a los estándares internacionales”.

Orden de cierre

A mediados de setiembre del 2023, el Ministerio de Salud realizó una conferencia de prensa con el fin de informar sobre el cierre del programa de trasplante renal con donante cadavérico del Hospital San Juan de Dios. Los pacientes de ese nosocomio serían trasladados para su intervención al Hospital Calderón Guardia en caso de ser llamados para recibir el trasplante.

Esta decisión, según la ministra de Salud, se tomó por la baja cantidad de procedimientos realizados entre el 2017 y agosto del 2023 en este centro médico.

Según datos de la cartera, en ese período se realizaron 87 trasplantes renales en el Hospital Calderón Guardia, 57 en el México, 35 en el Max Peralta y 22 en el San Juan de Dios.

No obstante, la medida no contempló la tasa de sobrevida o mortalidad de ese centro médico. Así lo señaló en ese momento la ministra de Salud y el entonces coordinador del Programa de Donación y Trasplante de la CCSS, José Pablo Garbanzo.

“En este momento, no se cuenta con dicha información”, indicó Munive, al ser consultada por estos datos desagregados por hospital, así como por donante cadavérico y vivo.

El pasado 6 de febrero UNIVERSIDAD volvió a consultar a la jerarca sobre las estadísticas de mortalidad y sobrevida de los pacientes trasplantados. En ese momento, Munive contestó que ya existía un informe con estos datos, pero que este se “estaba revisando y validando”.

Agregó también que existen varias causas por las cuales se puede suspender un programa de trasplantes, haciendo referencia a la mala gestión administrativa.

“Si usted espera más tiempo de la cuenta porque administrativamente no genera las gestiones adecuadas para poder mover su lista de espera, es un manejo adecuado. Obviamente hay otro tipo de estándares y valoraciones que se tienen que profundizar y que yo lo he pedido a los compañeros ´háganlos´”, añadió

Este Semanario consultó recientemente al Ministerio de Salud sobre el informe de mortalidad y sobrevida; sin embargo, al cierre de edición, la consulta aún estaba en trámite.

Crítica

 El traslado de estas intervenciones quirúrgicas del Hospital San Juan de Dios al Calderón Guardia ha sido criticado por la Fundación de Nefrología Costa Rica.

“El Hospital Calderón Guardia ha demostrado que no tiene capacidad técnica instalada para realizar trasplantes de pacientes provenientes del Hospital San Juan de Dios y así quedó demostrado en el operativo del 4 de enero del presente año”, se lee en el oficio  FNCR-0025-2024 enviado a Munive.

En el documento, la Fundación agregó que “se perdieron dos injertos que pudieron ser colocados en pacientes del San Juan de Dios y no se colocaron por falta de equipo quirúrgico en el Calderón y ningún otro centro de trasplante los recibió para nuestros pacientes. Siendo que esta orden sanitaria conlleva a la inequidad de nuestros pacientes, ya que desde el 13 de setiembre a la fecha solo se han trasplantado 3 pacientes del hospital San Juan de Dios”.

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