La onda tropical número 37, ubicadas en estos momentos frente a la costa venezolana, avanza con rumbo oeste y muy probablemente implicará para Costa Rica un fin de semana con lluvias intensas.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, así como el Instituto Meteorológico Nacional (IMN) apuntan que en las próximas 48 horas hay una probabilidad de entre el 60% y 70% de que se convierta en un ciclón tropical al ingresar al mar Caribe.
Rodrigo Castillo, subdirector del Centro de Investigaciones Geofísicas (Cigefi) de la UCR, corrió modelos predictivos de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA), del Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas a Plazo Medio y del Centro Meteorológico Alemán.
En los tres casos, llegó a la conclusión de que para este jueves en la tarde noche ya será un sistema ciclónico, y el viernes sería una depresión tropical. “A partir de sábado, serán fuertes las lluvias, sobre todo el domingo y lunes y en toda la costa Pacifica, con menos lluvia en la zona costera Caribe”, especificó.
El científico llamó la atención a las discrepancias que se dan entre los diferentes modelos predictivos. El sistema empleado por la NOAA pronostica una trayectoria del fenómeno más clara hacia el norte, pasando por la costa sur de Jamaica, entre lunes y martes ya como huracán atravesaría Cuba y entre miércoles y jueves atravesaría la Florida, en Estados Unidos.
El modelo Europeo más bien proyecta una trayectoria siempre con tendencia hacia el norte pero muy marcada hacia el oeste, con lo cual el domingo se posicionaría, al igual que en el modelo anterior, frente al cabo Gracias a Dios, fronterizo entre Honduras y Nicaragua, pero su trayectoria lo llevaría a atravesar la península de Yucatán, ya como huracán, el día martes.
Cualquier que sea el caso, lo cierto es que muy probablemente el domingo el fenómeno pasará frente al cabo Gracias a Dios, un “punto estratégico” según explicó Castillo, pues ya se han publicado estudios que apuntan que cuando eso sucede, se genera más lluvia en Costa Rica, en particular en la costa pacífica, pues el fenómeno, por así decir, hala la humedad del océano Pacífico. Por esa misma acción es que llueve menos en la costa caribeña.
“No se necesita que llegue al territorio de Costa Rica para que haga desastres”, observó con seriedad.
El especialista también llamó la atención sobre las actuales condiciones del fenómeno de La Niña, que produce aguas más calientes en el Atlántico y un debilitamiento de los vientos alicios que normalmente funcionan como una barrera a la humedad proveniente del océano Pacífico.
