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Nueva República bloquea proyecto para prohibir “terapias” de conversión con mociones y argumentos sin relación

Con el evidente fin de atrasar el debate, los conservadores diputados mocionaron por los horarios de la comisión, compararon la homosexualidad con drogadicción, sugirieron una equivalencia entre ser una persona trans y y prostituirse, y hasta leyeron normas sobre violencia animal.

Las y los diputados del partido Nueva República han aletargado mediante constantes mociones y argumentaciones inconexas al tema, el avance del proyecto 20.970 que pretende prohibir las llamadas “terapias” que pretendan revertir o modificar la orientación sexual o la identidad de género de las personas LGBTIAQ+.

El proyecto está siendo discutido por la Comisión de Derechos Humanos de la Asamblea Legislativa y tiene el apoyo de todas las fracciones, exceptuando la de los cristianos.

Este grupo, con la clara idea de atrasar la discusión y aprobación de la iniciativa, han presentado decenas de mociones y en cada sesión, se presentan en bloque (aunque sólo Rosalía Brown integra la comisión) para argumentar sus propuestas, utilizando historias testimoniales anónimas, ejemplos extranjeros y hasta leyendo normativa que no tiene relación alguna con el tema, para consumir el tiempo de la comisión.

De esta manera, en las cuatro sesiones que la comisión lleva debatiendo el tema solamente se han discutido 8 mociones de las 104 presentadas, 98 de las cuales son justamente de Nueva República.

En la sesión de este jueves, la barra de público de la comisión estuvo ocupada por activistas de las comunidades LGBTQAI+, sus familias y agrupaciones que apoyan la iniciativa y que también mantuvieron un plantón a las afueras del edificio legislativo. Tanto la presidenta de la comisión, Monserrat Ruiz, como el frenteamplista Antonio Ortega, saludaron y agradecieron la presencia de los activistas, reasegurando que el proyecto será aprobado a pesar de los atrasos.

El día de hoy se presentaron tres diputados  que no integran la comisión y que pidieron la palabra durante el debate, se trata de David Segura, José Pablo Sibaja y Olga Morera, todos de la fracción cristiana. La sesión comenzó (y terminó, pues se reiteró la moción) con una moción de orden de Rosalía Brown para quejarse por el horario de las sesiones extraordinarias y pedir cambios, que le fueron denegados por los demás legisladores, que votaron en contra.

La primera intervención fue de Segura, quién mencionó un caso en el extranjero alegando que los procesos químicos o quirúrgicos de transición son “un gran negocio” y afirmando que en una universidad en Estados Unidos hay un “gran escándalo” pues se han cuestionado los tratamientos de reafirmación de género que se aplican a personas menores de edad.

Estos señalamientos han sido aclarados por la clínica cuestionada y la Asociación Médica de Estados Unidos apoya la aplicación de procedimientos, siempre que se cumplan los estándares recomendados que incluyen entre otras cosas, consentimiento parental.

Además Segura, repitió argumentos de la estadounidense Marsha Blackburn (reconocida por su defensa a ultranza de teorías de conspiración, por ejemplo, sobre un inexistente fraude electoral en 2020) contra el tratamiento temprano de las personas trans.

A continuación José Pablo Sibaja esgrimió argumentaciones abiertamente transfóbicas, negando la existencia misma de la identidad de género y alegando temas religiosos, así como la “libertad” de una persona a escoger someterse a una “terapia” de “conversión” (aunque el proyecto de ley establece claramente que lo que se prohíbe es la coerción para someterse a las mismas).

El diputado reclamó que a los legisladores se les ha tildado de “intolerantes u homofóbicos” mientras realizaba argumentaciones discriminatorias y alegaba que la prohibición de obligar a alguien a cambiar su naturaleza defiende a “un solo grupo de la población costarricense, dejando de lado a toda la comunidad creyente que cuenta también con derechos fundamentales”, defendiendo así el “derecho” a someter a otras personas a sus creencias.

Finalmente, el legislador comparó a las personas homosexuales que “quieren” cambiar con una persona a la que se refirió como “uno de los hermanos de la calle”, usuario de drogas y quien, alega, se recuperó gracias a una comunidad religiosa.

Olga Morera por su parte defendió el derecho de toda persona a su sexualidad y reclalcó que “no se debe forzar o coaccionar a nadie a esconder su identidad o expresión de género u orientación sexual”, pero indicó que así como se respeta la decisión de una persona que quiera someterse a tratamientos de reafirmación de género, sean quirúrgicos o químicos, debe respetarse y “garantizar apoyo” para quienes quieran “cambiar”.

Acabado el tiempo para referirse a favor de la moción, Rosalía Brown tomó tiempo para referirse supuestamente en contra de la moción, de la cual es proponente y la cual finalmente votó a favor. Su argumentación sin embargo fue a favor de la moción presentada e incluyó referencias inconexas a una intervención previa de la legisladora Gloria Navas y hasta a normativa sobre crueldad contra los animales.

En varias ocasiones la presidenta de la comisión llamó al orden a la diputada, pidiéndole usar el tiempo para atacar la moción (pues ya se había agotado el tiempo para hablar a favor) y usar argumentaciones relacionadas con el fondo del debate.

El último en hablar fue el negriamarillo Ortega, quien hizo rápidamente un llamado a la Comisión para seguir “rechazando estas mociones, como lo hemos hecho hasta el momento”.

“Quiero aprovechar también este breve instante para saludar a las personas que se movilizaron el día de hoy, que nos acompañan en las barras, decirles que el proyecto no está bajo riesgo, que lo que hay es un exceso de mociones, lo que es propio del trámite parlamentario y que la mayoría de partidos políticos vamos a aprobar el proyecto, es cuestión de paciencia”, dijo.

Ortega agregó que quería discuparse con los diferentes grupos que han sido marginados a lo largo de la historia, pues han tenido que sufrir la discriminación  y han tenido “mucha fuerza, mucha valentía, han resistido las torturas, han resistido la discriminación y vamos a resistir también este mal paso que estamos llevando en esta Comisión”, concluyó.

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