Las poderosas y cuestionadas empresas constructoras H Solís y MECO recibieron este lunes la notificación de cancelación de los contratos públicos respectivos para ampliar la radial Lindora, en Santa Ana, y reparar el puente viejo Saprissa, en Tibás sobre ruta 32.
La notificación de cancelación de los contratos la envió la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS), en seguimiento al acuerdo del Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) de frenar obras adjudicadas a las dos principales compañías investigadas en el caso ‘Cochinilla’ por presunta corrupción hecho público hace cinco semanas.
Unops, unidad ejecutora de esos proyectos, informó sobre la cancelación de los trabajos este mismo lunes por la mañana, cuando los propietarios de las constructoras H Solís, Mélida Solís, y de MECO, Carlos Cerdas, fueron detenidos de nuevo para cumplir cárcel preventiva, en lugar de la libertad que habían logrado mediante el pago de fianzas por $3 millones ella y $5 millones él.
H Solís era el adjudicatario para la esperada obra de ampliación de la radial Lindora, presupuestada con un costo de $14 millones, junto Al consorcio Consorcio Ginprosa-DICCOC-LGC.
MECO, por su parte, integraba el consorcio Villa Ruta 32 con la firma española Puentes y Calzadas y juntas iban a trabajar el puente sobre el río Virilla con un costo aproximado de $21 millones.
“La cancelación de la licitación para ampliar la radial a Lindora no implica costos adicionales para el Estado costarricense y se instrumenta conforme a las normas de UNOPS contenidas en el cartel licitatorio y en su manual de adquisiciones”, dijo en comunicado de prensa Alejandro Rossi, Representante de UNOPS en Costa Rica.
