País Andrea Centeno, Presidenta ejecutiva de Japdeva

“Estamos pensando en tercerizar servicios”

La administración de Japdeva deberá tomar decisiones importantes sobre sus empleados en los próximos días. Según la presidenta ejecutiva, una opción que está sobre el tapete es la tercerización de los servicios.

El proyecto de ley de modernización de la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente del Atlántico (Japdeva) se encuentra al final de camino en la Asamblea Legislativa.

A pocos días de que el proyecto termine de tomar forma en las manos de los diputados, la presidenta ejecutiva de Japdeva, Andrea Centeno, señala que la administración evalúa tercerizar servicios con el objetivo de volver a emplear a funcionarios que no puedan mantenerse en la institución.

Centeno espera que los legisladores aprueben el proyecto, pues de no hacerse, la institución “entraría a una situación de insolvencia económica”.

Además, aseguró que ninguna de las personas que se encuentran en contra del proyecto, le ha presentado alguna alternativa “factible y realista” que pueda darle sostenibilidad a la institución.

De acuerdo con Centeno, para salir adelante con la operación, Japdeva solo deberá quedarse con alrededor de 300 o 400 de los 1.186 empleados que tiene actualmente.

Esto quiere decir que 800 personas saldrían de la institución -en el mejor de los casos y según el proyecto de ley- bajo medidas como prejubilación, traslados horizontales y un modelo de movilidad laboral con incentivos para los empleados que decidan abandonar la entidad por su propia cuenta.

Enseguida, un extracto de la entrevista que la presidenta ejecutiva sostuvo con UNIVERSIDAD.

En este momento se están presentando mociones relacionadas con el  proyecto de modernización de Japdeva. Si se llega a aprobar, ¿cuántas personas van a despedir?

—Esto no es una ley para generar despidos, habilita tres caminos para movilizar gente que no implican un despido. Esto es una ley que le permite a la gente irse con un extra, prejubilarse o trasladarse horizontalmente. Es cierto que los diputados incluyeron un transitorio que obliga a buscar ese punto de equilibrio, pero después de pasar por la selección de los trabajadores sobre alguno de los puntos anteriores. Yo realmente esperaría que la gente que tenga una oportunidad en otra organización o que vea que pueda acogerse a la prejubilación lo haga, porque la primera es una opción de mantenerse todavía en el campo laboral y la segunda es para no entrar en una categoría de desempleo como tal, pues hay un subsidio que los apoya. Para los que se acojan a los bonos no es un despido solo con prestaciones, también hay unos pagos extra. El transitorio obliga después a buscar un punto de equilibrio y no es porque se quiera, es porque si no se llega a ese punto de equilibrio, la organización entraría a una situación de insolvencia económica y las 300 o 400 personas que puedan quedarse tampoco van a tener la oportunidad de hacerlo. Ahí se volvería una situación mucho más grave que la que estamos enfrentando.

El transitorio obliga a un punto de equilibrio. ¿Cuál es?

—Eso es lo que estamos terminando en el estudio técnico. Hemos hablado que la salida de gente no puede ser menos de dos terceras partes; es decir, no menos de 800 personas de las 1.186 que hay. Lo complicado es llegar al número que permita a la organización salir adelante, a las personas que quedan estar estables y a los que se van, irse protegidos. El peor de los escenarios es que no se pueda prescindir de la gente, que al final la organización termine quebrando y que esa oportunidad de empleo para 300 o 400 no se dé.

¿Cuándo tendrían listo este análisis técnico?

—Estamos terminando de validarlo a nivel interno en lo que son macroprocesos y procesos. La idea es también contar con la visión externa de un profesional que haga una segunda validación. Lo que te puedo decir es que en el primer proyecto de ley decía que dos meses después de aprobada la ley se iba a tener listo, pero eso no va a pasar en ese período, más bien se acelerará. También estamos pensando en tercerizar servicios.

¿Tercerizar?

—Yo no he querido dar nombres de equipos y funciones como tales, pero la realidad es que si uno logra tercerizar equipos saca a un grupo de la planilla pero puede contratar a parte de ese grupo bajo otra modalidad que es la de servicios. Entonces nuevamente no es que se esté dejando a la gente en el desempleo. Se les está cambiando la modalidad.

¿Por qué tercerizar se convierte en una buena opción?

—A este punto llegamos buscando un nuevo modelo de Japdeva que logre por un lado mantener el servicio público, generar fuentes de trabajo bajo otra modalidad y buscar un equilibrio financiero. No es un tema nuevo en Japdeva. De hecho en un documento que dejó la anterior administración, que es el primer estudio para reestructurar Japdeva, se habla que hay que reconsiderar y analizar el tema de tercerización que en ese momento no se estaba incluyendo pero que era un rubro que ayudaría. En los ochenta incluso se intentó implementar esa opción, pero no se hizo. En términos generales, es una opción que hacen todas las empresas.

¿Esa sería la opción para algunos de los 800 empleados que no quisieran acogerse a las otras tres medidas?

—Por supuesto que es una opción. Si nosotros decimos que en un servicio tal, Japdeva tiene tantas personas en planilla y no ocupa esa cantidad, puede tercerizarlo. Así ellos venderían los servicios que requiera Japdeva y ya no están en planilla con los pluses del sector público y con los pluses de la convención. Además, ayuda a la organización a buscar el punto de equilibrio económico, mantiene el proceso que necesita seguir realizando y se puede subcontratar a exempleados de Japdeva que brinden servicio desde afuera. Es una oportunidad de reemplearse, pero en otra modalidad.

¿Ustedes tienen dinero para tercerizar?

—Nosotros estamos haciendo un cruce entre cuánto me cuesta tener un grupo de trabajadores dándome tal servicio y cuánto me cuesta tener a un grupo de trabajadores con ese mismo servicio desde afuera. Siempre existe una erogación pero es mucho menor que la interna.

¿Se mantienen positivos de que se dé la aprobación de este proyecto de ley en la Asamblea?

—Yo esperaría que se dé y estamos apostando toda la información y apoyo para que pueda ser aprobado. ¿Por qué? Yo he tratado de que las personas que no están de acuerdo con el proyecto de ley me digan cuál es la opción B. Si yo tuviera otros ingresos, si pudiera mantener más gente, por supuesto que sería lo que estuviéramos haciendo e impulsando. Pero la realidad de ahorita es tratar de hacer una reestructuración en el tiempo que tenemos, porque la decisión no se tomó a tiempo en el pasado para tratar de salvaguardar la organización y a un grupo de personas. La concepción de que el proyecto no pase, a mí en lo personal me preocupa, porque no veo junto a esa propuesta la solución para mantener a la organización y mantener a la gente. A mí no me han presentado ninguna otra alternativa que sea factible y realista.


Pastores cuestionaron propuesta de indemnización del Gobierno

Líderes religiosos de la provincia de Limón sostuvieron una reunión con el presidente de la República este 27 de agosto en Casa Presidencial. Durante el encuentro, los pastores cuestionaron la propuesta de indemnización que propone el Gobierno en el proyecto de ley de modernización de Japdeva, pues alegan que los montos “son muy bajos”.

Esta reunión ocurrió cuatro días antes de que el presidente Carlos Alvarado visite Limón en el marco de la celebración del Día del Negro y la Cultura Afrodescendiente.

Desde ya, el secretario general del Sindicato de Trabajadores de Japdeva (Sintrajap), Antonio Wells, advierte que recibirán a Alvarado con manifestaciones pacíficas en protesta por el proyecto de ley y la difícil situación económica que atraviesa la provincia.


*Colaboró la periodista Rita Valverde.

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