Una lista de 74 liberacionistas dio la mañana de este lunes su adhesión al candidato del Partido Restauración Nacional (PRN), Fabricio Alvarado, un gesto que estuvo marcado por duras críticas al partido de gobierno.
Por parte de los liberacionistas, el primero en hablar fue un eufórico Ronny Monge —uno de los diez diputados actuales en la lista—, quien criticó duramente al Partido Acción Ciudadana (PAC) por sus encontronazos con el PLN desde su fundación y por lo que considera un muy mal gobierno.
Además, hizo un guiño a los liberacionistas que recientemente dieron su adhesión al oficialista Carlos Alvarado, a quienes señaló que no son la base liberacionista y que, por el contrario, su grupo era “un poco más que 19”.
A las palabras de Monge se sumaron la de la exministra de Comunicación y Economía, Mayi Antillón, quien también atizó con especial atención contra el partido de gobierno.
“Es imperdonable que el PAC, a quienes algunos costarricenses le dieron la oportunidad de gobernar en este cuatrienio, ya que hicieron creer que levantarían el estandarte de la ética en la administración pública, deje una vergonzosa herencia de casos irregulares”, dijo.
También cuestionó que la administración evadió soluciones fiscales, las cifras actuales de desempleo y la criminalidad, razones por las que “como liberacionistas” tomaron la decisión.
Según Antillón, “analizaron cuál candidato abrazaría sin mezquindad las ideas y obras que otros partidos orgullosamente hemos impulsado”, como es el caso del PLN.
En esta línea, Fabricio Alvarado destacó las obras de Liberación, a las que dedicó alrededor de dos minutos de su discurso. Además, reiteró a los presentes su compromiso de trabajar con todos los partidos posibles.
“Desde la primera ronda hablé de unidad nacional, porque tenía claro que estas cosas sólo así se construyen, los grandes acuerdos sólo se logran construyendo puentes y no construyendo murallas, los grandes acuerdos sólo se construyen con grandes consensos”, comentó.
Por último, subrayó su discurso de las últimas semanas apelando a la población que le catapultó a la segunda ronda mayoritariamente ubicada en las costas, diciendo que buscará “ser un gobierno que salga de sus oficinas” y que atienda a “los pueblos donde hay más pobreza y necesidad”.
Así mismo, criticó duramente a sus contrincantes porque piensa que “ni siquiera han tenido la sapiencia de entender que esta gente está necesitando un abrazo o una mano amiga”, sino que les ha llamado “ignorantes” por ser sus seguidores.
Entre las principales figuras anunciadas estuvieron Fernando Berrocal, Mayi Antillón, Pedro Castro, Marco Vinicio Ruiz y Edgar Ayales; como parte de una lista llena de exministros, exembajadores, exdiputados, alcaldes y diez diputados de la actual fracción legislativa.
Quedaron por fuera figuras como el excandidato presidencial del PLN, Antonio Álvarez, y el exdiputado Víctor Hugo Víquez, el diputado que tuvo que renunciar a la primera curul por Heredia verdiblanca en plena campaña, pero ya manifestó su total apoyo a Fabricio.
Al respecto, el candidato comentó que “en el caso de Víctor Hugo tendría que preguntarle eso (sobre su ausencia) a él, pues la actividad fue organizada por los mismos liberacionistas”, y que “en el caso de Don Antonio siguen en conversaciones”. “Faltan algunos días y tenemos una conversación pendiente”, subrayó.
Denuncias
En cuanto a la reciente confirmación por parte del Tribunal Supremo de Elecciones sobre la recepción de denuncias contra Fabricio Alvarado y el PRN, por la reunión secreta con líderes evangélicos, el candidato manifestó que se siente tranquilo.
En el evento, cuyos detalles fueron publicados por el noticiero Interferencia de las radioemisoras de la Universidad de Costa Rica, se logró confirmar cómo Alvarado pidió a líderes evangélicos hablar con feligreses para solicitarles el voto o “bendiciones” para transporte y alimentación, así como serias acusaciones del aspirante contra el órgano electoral.
En los audios y videos que se filtraron, se escuchó al aspirante de Restauración recriminar al TSE por ponerle “una mordaza” a él y a sus seguidores, acto que incluso fue tema de discusión en el debate del domingo organizado por esa institución.
Con denuncias ya presentadas, el candidato presidencial comentó que simplemente espera que “el tribunal determine si le parece que hay algo irregular”, aunque afirmó que para su equipo “no lo hubo” pues “reuniones privadas todos los candidatos, desde la primera ronda, las hemos tenido”, aunque en ningún momento escondió que “hemos pedido el voto y hemos pedido el apoyo”.
“Ambos candidatos nos hemos reunido por ejemplo con la jerarquía de la Iglesia Católica, por poner un ejemplo, en ese sentido estamos tranquilos y ya hemos dado declaraciones en ese sentido”, puntualizó.
