La economía costarricense crecería un 4,2% para finales de este año, según una proyección que hizo el Banco Central de Costa Rica (BCCR), 0,9 puntos porcentuales superior a la estimada en abril pasado, debido a una mejora en los indicadores económicos.
Así lo confirmó el presidente del BCCR, Róger Madrigal en la presentación del Informe Política Monetaria a julio del 2023, en el cual también indicó que se prevé un crecimiento económico del país de un 3,8% para el siguiente año, también levemente por encima de la previsión anterior en 0,2 puntos porcentuales.
Madrigal explicó que el impulso de la economía ha venido de forma creciente por más de un año, especialmente impulsado por las exportaciones de las zonas francas y recientemente de las empresas fuera de este régimen, así como el incremento de la construcción y el consumo de los hogares.
“La economía crece a tasas más altas gracias a la demanda agregada (total de bienes y servicios demandados en el país) y la mayoría de los sectores están creciendo, algunos más que otros, de manera que estamos viendo cómo se revierte la tendencia de crecimientos negativos que tuvimos en el pasado”, detalló el jerarca.
Un factor que ha resultado determinante en este nuevo análisis es que no sólo hay dinamismo de las compañías ubicadas en el régimen de zonas francas -que no han dejado de exportar y hoy tienen niveles cercanos al 20%-, sino que hay un impulso de las que se ubican en el régimen definitivo. También han incidido factores externos, como la reducción de los precios del petróleo.
Se prevé que para lo que resta del año se presente un impulso de los productos manufacturados y agrícolas, así como de los servicios empresariales y el turismo, mientras que continuaría la tendencia positiva de la inversión extranjera directa y el consumo.
El aumento del crédito se vería impulsado en 2023 por colocaciones tanto en moneda nacional como extranjera, y para el 2024, incidiría el crédito otorgado en colones.
