La discusión de un proyecto de ley que facultaría al Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) para explotar energía geotérmica en áreas protegidas ha encendido las alarmas del sector ambientalista.
Se trata del proyecto 19.233, presentado por los diputados del Partido Acción Ciudadana (PAC) Ottón Solís y Francisco Cambronero y que es estudiado por la Comisión de Asuntos Agropecuarios.
Si bien el texto original de la propuesta -disponible en el sitio web de la Asamblea Legislativa- simplemente habla de facultar al ICE para que investigue, explore y explote los recursos geotérmicos “dentro de las áreas protegidas del país”, un texto sustitutivo del proyecto al que tuvo acceso UNIVERSIDAD apunta de manera específica que se trata del Parque Nacional Rincón de la Vieja, Parque Nacional Guanacaste, Parque Nacional Volcán Tenorio y Parque Nacional Volcán Arenal.
El texto sustitutivo especifica que el ICE quedaría posibilitado para ello a través de una “autorización especial administrativa” del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac).
Añade que el ICE pagaría a las áreas de conservación respectivas un canon del 2% de los ingresos brutos anuales que obtenga cada proyecto geotérmico por sus ventas de energía eléctrica.
Solís aseveró que se trata de un proyecto es “pro ambiente”, pues en su perspectiva la alternativa es “que el búnker sea el que genere electricidad en este país, la idea es aprovechar la geotermia con normas ambientales rigurosísimas aceptadas por el Área de Conservación Guanacaste y con análisis previos de las universidades y demás”.
Añadió que hizo amplias consultas para elaborar el proyecto “tanto con el Área de Conservación como con gente del ICE para conocer las áreas en las que hay potencial de geotermia”.
DESCONFIANZA
Por su parte Mauricio Álvarez, presidente de la Federación Conservacionista de Costa Rica (Fecon), aseveró al respecto que “lo que más nos preocupa es el precedente que esto significa”, pues según dijo “no es una reforma menor crearle un nuevo uso a los parques nacionales”.
El ambientalista también criticó que el Sinac quedaría “como juez y parte”, pues en su criterio se le da un poder “enorme” para definir temas como el área para explotar; “ellos mismos evalúan y reciben las ganancias”, subrayó.
Álvarez se refirió además al hecho de que el texto de la propuesta enfatiza elementos como dar garantías ecológicas, cumplir con requisitos ambientales, que las obras de infraestructura tienen que ser “mínimas”, y que se le repondría a cada parque nacional un área para compensar la que requiera un eventual proyecto de generación eléctrica.
Al respecto, apuntó que “Fecon no confía en ese discurso”, en primer lugar, según dijo, porque existe una “debilidad” señalada por la Universidad Nacional (UNA) respecto a la fiscalización de la Secretaría Técnica Nacional del Ambiente (Setena).
En segundo término y ciñéndose a la tesis de que el proyecto podría sentar un precedente que signifique un portillo a mayor explotación energética en parques nacionales:
“Uno se cuestiona si se va a poder limitar de veras al ICE, porque pone en desigualdad a los otros actores. Hay que partir de que estamos en un mercado semiabierto o abierto en términos eléctricos, el actor privado podría intentar aducir igualdad ante la ley”.
Álvarez también apuntó que el proceso de exploración geotérmica genera preocupación pues, según dijo, los procesos de exploración para geotermia, petróleo y minería son similares, pues implican estudios del subsuelo a través de detonaciones, además de deforestación y construcción de caminos.
CONSULTA
La Comisión de Asuntos Agropecuarios nombró una subcomisión para abocarse al estudio de este expediente el pasado 24 de mayo, con un plazo de 30 días.
Según informó Solís, ese plazo se venció pero se había pedido más tiempo, por lo que el dictamen del proyecto se aplazó hasta que la Asamblea Legislativa regrese de su receso de medio año.
Al referirse a las críticas de los ambientalistas, el legislador manifestó que “no sé por qué se dice que se abre un portillo”, pues insistió en que su propuesta radica en que sea solo el ICE el que explote el recurso, además de que especifica que se trata de cuatro parques nacionales.
“No es abierto, es estatal, las tierras no pasan a propiedad del ICE, sino que son dadas a cambio de un canon que va a incrementar enormemente el presupuesto del Área de Conservación, porque es el 2% de las ventas de la energía que salga de las plantas que se instalen”.
Añadió que, en su propuesta, el mismo ICE “tiene que compensar con tierras adicionales” y subrayó que esa institución “ha hecho una demostración ejemplar de cómo charrales y pastizales donde explotó geotermia hoy en día son bosques muy lindos. Creo que tenemos que es preciso que discutamos y nos informemos”.
Por su parte, la legisladora del Frente Amplio, Suray Carrillo -quien integra la Comisión de Agropecuarios y la subcomisión que dictaminará el proyecto- dijo que está en proceso de consulta “a las bases, a todos los cantones” y recordó que en su momento el entonces diputado José María Villalta apoyó una iniciativa similar, que buscaba autorizar al ICE para que explotara la geotermia en el Parque Nacional Rincón de la Vieja, la cual no llegó a ser aprobada.
Según dijo, en aquel momento se realizaron encuentros y foros sobre este proyecto y “muchas organizaciones, fundamentalmente las áreas de conservación allá en Guanacaste, el Sinac, quedaron con la idea de qué lástima que ese proyecto no se desarrolló”.
Carrillo además apuntó las justificaciones que encuentra en la iniciativa, como que “es preferible que sea el ICE que aplique geotermia en estos parques nacionales y no que se dé la apertura a una empresa privada en un futuro, porque Otto Guevara tiene un proyecto para geotermia en Guanacaste pero con apertura a empresas privadas”.
También apuntó que la iniciativa “va a significar una entrada de recursos económicos para los parques nacionales que están en total abandono, que por el desequilibrio ambiental han sufrido muchos daños y el gobierno no hace nada”. A ello sumó que la iniciativa “generaría empleo y recursos económicos anuales muy altos”.
Ante la pregunta de si funcionarios del ICE lo han buscado para cabildear en favor de este proyecto, contestó que “para nada, pero sí les voy a pedir información sobre cuánto significa este recurso económico -a lo mejor no vale la pena, no es tanto como se ha dicho-, o cuántos empleos va a producir”.
UNIVERSIDAD contactó por correo electrónico a Eddy Sánchez, director del Departamento de Recursos Geotérmicos del ICE, para consultarle sobre la necesidad de explotar energía geotérmica que se encuentra en áreas protegidas, o si ha mantenido conversaciones con diputados o diputadas en búsqueda de que se apruebe este proyecto de ley. Sin embargo, no se obtuvo respuesta.
Apertura geotérmica
Desde el Movimiento Libertario, los diputados Otto Guevara y Natalia Díaz presentaron en setiembre del 2014 un proyecto denominado “Ley para la Explotación del Recurso Geotérmico”.
Esa iniciativa hace fila en la Comisión de Ambiente de la Asamblea Legislativa bajó el número 19.339 y en su primer artículo propone “autorizar a concesionarios públicos y privados y mixtos para el aprovechamiento de los recursos geotérmicos existentes en el país”.
Establece además que las solicitudes de concesión se tramitarían en un solo formulario y se
resolverán en un solo acto, luego de haber tramitado el estudio de impacto ambiental (ESIA) y “eventualmente el Dictamen Técnico” y una serie de requisitos entre los que se puede destacar que “se deberá indicar cuando la zona se trate de un Área Protegida”.
Si la concesión se otorga dentro de áreas protegidas, el concesionario pagaría un canon del 0,1% de la generación eléctrica producida y será acreditado al Sinac.
En su blog personal, al momento de presentar el proyecto, el diputado Guevara aclaró que la iniciativa busca que se explote energía geotérmica “en todo el territorio nacional, incluidos parques naciones”, y destacó que el desarrollo de esta fuente de energía fomenta “la independencia energética que contribuye al desarrollo económico del país”.
