La COVID-19 fue la primera causa de muerte en el país durante el 2021. Así lo indicó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) en una reciente infografía sobre los “Fieles Difuntos”.
De acuerdo con los datos preliminares del INEC, al igual que en el año 2020, el año anterior esta enfermedad fue la primera causa de muerte en el país, ocasionando 2.303 y 5.388 fallecimientos, respectivamente.
Esta causa es seguida por el Infarto agudo al miocardio que pasó de 1.444 defunciones asociadas en 2020 a 1.925 para 2021, y por la Diabetes mellitus sin especificación que causó 1.251 fallecimientos durante el primer año de la pandemia y 1.168 el año anterior.
Las Enfermedades pulmonares crónicas, por su parte, causaron 845 muertes en 2020 y 847 en 2021; mientras que la Diabetes mellitus tipo 2 pasó de 961 a 833 en los últimos dos años.
La infografía reveló también que en el último año se perdieron 49.833 años de vida por muertes asociadas a COVID-19. Del total de años perdidos 18.281 corresponden a mujeres, mientras que 31.552 a hombres.
El indicador de años perdidos es una estimación de los años de vida potencialmente perdidos por la población de manera prematura, a causa de muertes asociadas a COVID-19.
Por ejemplo, si la esperanza de vida al nacer de una mujer en el país es de 80,6 años de vida, y muere por COVID-19 a los 35 años, esta persona perdió 45,6 años potenciales de su vida debido a su prematuro deceso.
El año anterior, el demógrafo Luis Rosero indicó a UNIVERSIDAD que la pandemia por la COVID-19 dejó a su paso grandes repercusiones en todos los ámbitos, y una de ellas es la reducción en la esperanza de vida al nacer de los costarricenses, la cual pasó de 79,7 años en 2019 a 78,25 en 2021.
«Es el resultado de las defunciones, el cómo se han dado en este tiempo, pero nosotros sabemos que ese aumento se debió a la COVID-19 (…) La tendencia que existía antes era que la esperanza de vida creciera, y esta caída, en los hombres, sobre todo, es un retroceso muy grande, de más de 15 años calendario. Volvimos a una esperanza de vida como la que se tenía alrededor del 2005”, señaló Rosero en setiembre del 2021.
De acuerdo con Rosero, la reducción en la esperanza de vida afectó más a los hombres, pues pasó de 77,5 años en 2019 a 76,6 en el 2020, y a 75,5 para junio del 2021, mientras que en el caso de las mujeres se mantuvo en 81,9 años en los dos años previos y disminuyó a 81,0 en el primer semestre del 2021.
La infografía elaborada por el INEC, señaló también que la tasa bruta de mortalidad en el país casi se duplicó en los últimos 20 años, al pasar de 3,9 muertes por cada 1.000 habitantes en el año 2000 a 6,0 para 2021.
