Los diputados de la Asamblea Legislativa aprobaron la tarde de este miércoles una moción mediante la cual le pidieron al Gobierno de la República reconocer a Juan Gerado Guaidó formalmente como “legítimo presidente” de Venezuela y validar la permanencia de esa nación como miembro de la la Organización de Estados Americanos (OEA).
La moción fue presentada con la firma de varios diputados de distintas fracciones y contó con el apoyo de 40 congresistas, con excepción de la oficialista Paola Vega, del Partido Acción Ciudadana (PAC), y de José María Villalta, del Frente Amplio.
Ellos argumentaron que no podían reconocer como presidente a una persona que no había sido elegida por el pueblo de su nación, motivo por el que desecharon la iniciativa.
Los diputados aprobaron esta moción para reconocer a J.G. Guaidó como presidente de Venezuela e instar al Gobierno a que "valide" la permanencia de ese país como en la OEA a través de su Asamblea Nacional. Sólo votaron en contra P.Vega (PAC) y J.M. Villalta (FA). @SemanarioU pic.twitter.com/FnO4AQIZeK
— Josué Alfaro (@josuealfaro_cr) January 23, 2019
No obstante, el texto se aprobó finalmente, después de ser defendido por varios diputados en el uso de la palabra, incluido el jefe de fracción del Partido Liberación Nacional (PLN), Carlos Ricardo Benvides. El liberacionista señaló que el reconocimiento de Guaidó serviría como un punto de partida para Venezuela, que necesita el apoyo de la región para que concluir por fin con el régimen de Maduro.
Benavides comentó que “al pueblo venezolano le ha costado muchísimo librarse de la espantosa dictadura que padece”, por lo que “lo mínimo que puede hacer un pueblo democrático, representado aquí por esta Asamblea Legislativa, es unirse al pueblo de Venezuela para que se sacuda definitivamente de la lacra de su gobierno dictador”.
“Es un gobierno usurpador el de Nicolás Maduro, ya es suficiente y los pueblos latinoamericanos nos tenemos que manifestar de manera clara y contundente”, subrayó.
También hablaron expresamente en favor de la iniciativa diputados del bloque independiente Nueva República, de algunos partidos minoritarios y del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), incluido su jefe de fracción Erwen Masís, quien habló del recambio en el liderazgo venezolano como una forma de mejorar las condiciones de esa nación y además catalogo el régimen de Maduro como “una distribución de la miseria”.
Oposición
Contra la decisión de sus compañeros se manifestaron José María Villalta y Paola Vega, quienes criticaron la decisión como un movimiento apresurado y conceptualmente inviable.
Al respecto, Villalta además lamentó que el presidente Alvarado hubiese reconocido a Guaidó como un hecho “lamentable”, pues —desde su punto de vista— es un hecho que incumple con “la tradición pacifista y de neutralidad pacifista de Costa Rica”.
“Esto se suma en esa comparsa intervencionista de forma acrítica e, independientemente de las críticas que uno pueda tener contra el gobierno de Venezuela, es evidente”, comentó, antes de también criticar la posición de la mayoría de los países de la región y en especial, de Estados Unidos, que analiza como una violación de la soberanía de esa nación.
“Es evidente que esta moción, por supuesto, excede los límites de una moción de orden en el Plenario, pero también es evidente que esta moción se suma y no contribuye a un diálogo pacífico y a una solución concertada del conflicto en Venezuela, sino que ejerce un intervencionismo desmedido que no contesta al derecho internacional y a los tratado que el país ha firmado, subrayó.
Por su parte, la diputada Vega señaló que la moción “superaba las competencias del parlamento en materia de relaciones internacionales” y que además llegaba tarde porque y existía un pronunciamiento del Poder Ejecutivo.
Por último, también afirmó que ella no podría “apoyar a una persona que no tiene el reconocimiento en este momento de la población que está en conflicto”, motivo por el que dijo que no podría apoyar el texto, tomando en cuenta que además existe un contexto de total crispación en el país sudamericano.
“La situación que vive Venezuela es muy grave, viene enfrentando una dictaura cruda y terrible de Nicolás Maduro, pero la solución a esa dictadura no es optar por el otro extremo que es la crispación social”, comentó.
“En este momento están ocurriendo muertes y caos en Venezuela, y creo que no podemos nosotros fomentar más caos, más muertes y más crispación, sino llamar a elecciones libres con la fiscalización de la comunidad institucional para que se respete la soberanía de Venezuela y se respete la paz social. Yo no creo en apoyar a una persona que no tiene el reconocimiento en este momento de la población que está en conflicto vaya a sumar al caso venezolano y por ello no podría apoyar esta moción”, concluyó.
