Abejón se refiere, en otros países, a una abeja de gran tamaño; sin embargo, en Costa Rica le llamamos así a cualquiera de las 800 especies de escarabajos o coleópteros, y “abejón de mayo” puede ser alguna de las aproximadamente 70 especies que aparecen entre abril y mayo, cuando inician las lluvias.
En una conversación con el lexicógrafo Víctor Sánchez, me indicó que esta denominación nació por el sonido que hacen estos insectos, que se podría confundir con el de una gran abeja.
Otro nombre en Costa Rica para los abejones es “ahogapollos”, por la creencia de que las gallinas que comen muchos de estos insectos se atragantan. Su larva, conocida como “joboto” o “jogoto”, se considera una plaga al alimentarse de las raíces de los cultivos; su extracción de la tierra –como mecanismo para eliminar la plaga– ha provocado que la cantidad de estos insectos disminuya con los años (además del cambio climático).
El Diccionario del español actual de Costa Rica (sin publicar) registra frases populares donde se le menciona, como “andar con abejón en el buche”, la cual tiene dos significados: Manifestar una persona inquietud o mal humor, y ocultar una mujer soltera su estado de embarazo; similar a la expresión “tener abejón en el buche”, que significa no atreverse a decir algo o estar preocupada una persona.
También aparece en esa obra la locución “más serio que un abejón en un baile de gallinas”, para referirse a las personas que muestran severidad en el semblante, generalmente por encontrarse en un ambiente ajeno a sus preferencias o bien por haber sufrido un disgusto.
Estas frases ya no es frecuente escucharlas. Lo que sí se usa más es llamar a una persona “abejón de mayo” cuando esta, por andar adormilada o distraída, choca en varias ocasiones contra paredes y muebles.
