Opinión

“Democracias” occidentales y narcotráfico

 ¿Porqué y a quiénes les conviene que se hable de “narcotráfico”?

 Narcotráfico o narco agresión

 Del término compuesto “narcotráfico”, el asunto es posicionar lo segundo, el tráfico. Insistentemente, por los canales de desinformación, en boca de funcionarios, o de manera irreflexiva, por muchas personas, se machaca en el “narcotráfico”. Parece no haber consumo de drogas, negocio de las drogas: el gran problema; lo que hay que combatir es el tráfico de las drogas.

 El término “narcotráfico”, está cargado de manera tendenciosa y por demás está decir maliciosa: “narco”, es el “qué”, es el “asunto” en cuestión: el común de las personas valora lo que está posicionado en su opinión, sobre el término “narco”, de la siguiente manera: droga; malo; persona que se dedica al negocio de las drogas (ese fulano es un “narco”); sin vergüenza, mal viviente, despreciable, condenable, vulnerable.

Trafico es el hacer.

Traficar: “Paso de vehículos, personas o “mercancías por un lugar”. (Diccionario. Definiciones de Oxford Languages).

Aquí el asunto está en “pasar” la droga, “llevar” la droga. Si la droga se lleva, es de un lugar hacia otro lugar, de donde la cultivan, la cosechan o la hacen, hacia dónde la consumen.

“La hacen”, es muy importante, porque no “se hace” sola, alguien la hace, algunos la hacen.

Entonces desde el mismo lugar donde algunos la hacen; algunos la llevan. Lo más seguro es que son los mismos, con la “colaboración” de otros.

¿De dónde y a dónde “la llevan”? En este punto, “las cosas” empiezan a tener cara: En el caso del continente americano, “los malos del sur”, se la llevan a “las pobres víctimas del norte”.

Esto es lo que se posiciona con el término “narcotráfico”: del sur al norte.

Pero es en el norte donde está el mayor consumo de drogas; quienes organizan, imponen y dirigen todo para producirlas, llevarlas, distribuirlas, cobrar y entregar dinero, hacerlas un negocio y de paso involucrar y culpabilizar al sur. ¿Cómo dice el dicho? “Tras de que deben, cobran”.

¿Por qué si en el norte tienen organismos de inteligencia y represivos, tan efectivos, no terminan con el narcotráfico y nos dejan de una vez en paz?

De ahí la importancia de posicionar la segunda parte del término: tráfico.

Con el pretexto del narcotráfico se ejecutan acciones por medio de las cuales se lleva a cabo la política de imposición y dominación.

Hay que combatir el “narcotráfico”: esto quiere decir, planificar, y ejecutar acciones de guerra, invadir países, capturar “sospechosos”.

Manuel Antonio Noriega, fue la excusa con la que se perpetró una brutal y criminal agresión, que costó muchas vidas, contra Panamá.

“… Noriega era un militar…al servicio de la inteligencia estadounidense… desde antes de ser militar, ya estaba al servicio de la CIA…fue acusado de narcotráfico… entrenado en Estados Unidos… de confianza para Bush…” (BBC NEWS MUNDO)

Recientemente, el presidente López Obrador, denunció intenciones de agresión a su país, por parte de algunos políticos de Estados Unidos contra México, con el pretexto del opioide fentanilo.

Lo anterior, de alguna manera hace venir a la mente, por algo, la “Guerra del opio”.

“Las guerras del opio o las guerras anglo-chinas fueron dos conflictos bélicos que ocurrieron en el siglo XIX… Sus causas fueron los intereses comerciales que crearon el contrabando británico de opio en la India y en China… La segunda, en la que Francia se implicó con los británicos, estalló en 1856 y duró hasta 1860… La derrota china en las dos guerras forzó al gobierno a tolerar el comercio de opio”. (“Guerras del opio”. Google Arts & Culture).

Así, se comenten y justifican actos de abuso y agresión contra países latinoamericanos y se seguirán cometiendo, mientras no se le ponga alto, con dignidad y organización, a los países que las cometen.

“El hijo de Pablo Escobar: “mi padre trabajaba para la CIA… con la cocaína financiaban la lucha contra el comunismo en Centroamérica… Es evidente que el encubrimiento es hacia los grandes corruptos de Colombia y Estados Unidos…la idea es representarlo lo más malvado y atractivo posible, y así no nos fijaremos en los malos que lo ayudaron a ser tan malo”. (El Confidencial)

Políticos, presidentes, ministros, organismos, países, armas, dinero, geopolítica y geoeconomía, juegan en todo esto.

Es un deber patriótico, ciudadano y humanitario, reflexionar y erradicar de nuestro vocabulario, con la carga tendenciosa e intencionada que en la actualidad comporta, esa docena de letras así estructuradas y el sentido que componen. Ya no más.

Desterremos de una vez por todas el “narcotráfico”.

 

 

 

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