Opinión

Bancos y la usura

Prácticamente desde antes que se aprobara la ley contra el cobro abusivo de intereses por parte de los entes financieros y otros entes privados (Reforma Ley de Promoción de la Competencia y Defensa Efectiva del Consumidor, No 9859, de junio 2020), los banqueros han realizado todo tipo de movimientos para traerse abajo esa ley que no los deja enriquecerse como ellos lo habían hecho y bajo la complicidad de los dos órganos supervisores, CONASIFF y SUGEF, al fin y al cabo, son de los mismos.

Sin embargo, el frio no está en las cobijas, veamos lo siguiente:

  1. Históricamente el sistema financiero ha estado regulado por la SUGEF, la cual ha emitido una serie de normativa para el “sano” desempeño de la banca pública y privada, sin consideraciones de ningún tipo en cuanto al objetivo de cada tipo de banca, la privada con su “ganar-ganar” y la pública con la misión de aportar financiamiento para el desarrollo social del país. A partir de esta dicotomía, resulta sencillo verificar que ambas “bancas” tienen razones de ser muy diferentes y por lo tanto no deberían estar bajo la misma regulación, basta con observar que, hasta el BANHVI, que es un banco de segundo piso (no realiza intermediación bancaria directa con el cliente) ha sido incluido y medido con las mismas herramientas que el BAC San José, solo por mencionar un ejemplo. ¿Que persiguen con eso? Evidentemente eso no está bien, pero la SUGEF insiste en hacerlo bajo el argumento de que es otro banco dentro del sistema bancario.
  2. Los bancos públicos (Nacional, Costa Rica y Popular) tienen como objetivo legal y constitutivo, facilitar crédito para el desarrollo nacional, sin embargo, la SUGEF ha obviado estos objetivos y los mide como si fueran bancos privados, será que confunde la denominación “banca comercial” de estos tres bancos. Si desde el nacimiento estos han sido diferentes por voluntad del pueblo de Costa Rica, ¿conque atribuciones les aplican reglamentos que corrompen sus objetivos legales y originales? ¿Estará la SUGEF ante la figura de “abuso de poder”? ¿Qué opinara doña Marta y don Bernal allá en la Contraloría sobre esta situación? ¿Y ni se diga de la Defensoría de los Habitantes, que ha estado totalmente ausente en este debate?
  3. Asumiendo que la SUGEF tiene la potestad legal para vía reglamento pasarle por encima a la Constitución Política, las leyes del sistema bancario, leyes especiales y otras, el enfoque de su normativa está bien para la banca privada y otros entes financieros privados, pero no para la banca pública, la cual debería de tener otros parámetros de medición y regulación. ¿La pregunta es porque no emiten una regulación diferenciada conforme al marco legal de cada sector? Porque el argumento de que ambas bancas son iguales, no es cierto, sus carteras de clientes deberían de ser muy diferentes conforme al espíritu de nuestros legisladores.
  4. La banca pública es un hecho consumado en Costa Rica, estar de acuerdo con su existencia o no es un asunto de orden ideológico, no bancario o comercial. Parece que a los señores de SUGEF no les agrada que exista la banca pública porque toda su regulación está orientada como si fuese una banca privada.
  5. SUGEF estableció hace años el ACUERDO SUGEF 1-05, REGLAMENTO PARA LA CALIFICACIÓN DE DEUDORES. A mi criterio este es el inicio de la exclusión financiera en Costa Rica, a los bancos (públicos y privados) les quedo muy cómodo acogerse a esta normativa para entonces aprovecharse de ella y pasar a prestarle solo a los clientes cuyo comportamiento de pago sea calificado como A, el resto (de B en adelante) no son sujetos de crédito. ¿es esto una exclusión o no? Y así comenzó todo.
  6. SUGEF, CONASSIF y los bancos son los culpables de decirle al costarricense humilde, mire a usted no le prestamos porque no tiene garantías reales (propiedades), su proyecto productivo tiene mucho riesgo (agricultores), su iniciativa PYME no cuenta con estudios de factibilidad, etc, etc.
  7. El gobierno actual es más de lo mismo, a pesar de mostrar algunos rasgos de conciencia sobre el problema del crédito en el país, aparte de presentar una reforma a un reglamento (que según los expertos ya existía), de provocar la salida del presidente de CONASSIF y del director del Sistema Banca para el Desarrollo, no ha ido más allá con una propuesta profunda que reforme el accionar del sistema bancario. El grupo de bancos afiliados en la ABC bancaria hasta pagan a un profesional para que escriba artículos para su conveniencia y tienen abogados a sueldo haciendo lobby en la Asamblea Legislativa.

Como puede observar estimado lector, el sector bancario tiene demasiado poder, medios de comunicación a su disposición y otras armas con las cuales controlan el mercado y a los entes supervisores que en teoría deberían de mantener una posición independiente, pero no, ellos son de los mismos, usted los ve intercambiando puestos entre el sector público y privado. Y don Rodrigo Chaves no se comió esta bronca.

 

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