Opinión

Aves como juguetes rotos

Las aves no ven el vidrio. Los humanos tampoco. El vidrio es un material tan sorprendente que puede mostrar una ilusión de cielo

In cartoons they do it and then get up,

a carousel of stars, asterisks, and question marks

trapped in a caption bubble above a dizzy,

flattened head that pops back into shape.

But this one collapsed in its skirt of red feathers

and now its head hangs like a closed hinge and its beak,

a yellow dart, is stuck in the gray porch floor

and seems transformed forever—a broken gadget,” Michael Collier “Bird crashing into window”.

Las aves no ven el vidrio. Los humanos tampoco. El vidrio es un material tan sorprendente que puede mostrar una ilusión de cielo y espacio o un pasadizo donde lo que hay es un objeto duro y consistente. Cuando un pájaro choca contra una ventana, el golpe le puede provocar hemorragia intracraneal, y la muerte puede sobrevenir en cuestión de segundos, minutos o, con suerte, no ocurrir del todo.

Muertes anunciadas. En marzo, abril y mayo y luego en setiembre y octubre, muchas aves migratorias atraviesan nuestro país. Una de las especies migratorias que con más frecuencia golpea contra las láminas de vidrio es el zorzal de Swainson. Otras muchas especies de aves migratorias corren la misma suerte. Las aves residentes (100% ticas) también mueren por golpear contra vidrios durante todo el año. En el proyecto “Aves y ventanas Costa Rica”, por medio de la colaboración de decenas de personas de todo el país, se ha logrado construir un listado de más de doscientas especies de nuestro país que han golpeado contra ventanas. Especies comunes y raras, jóvenes o adultas, en bosques o áreas abiertas, pierden la vida al ser víctimas de este engaño no intencionado. Muchas de ellas son las mismas que sirven de atractivo para el turismo ornitológico: tucanes, quetzales, pájaros campana, saltarines, gavilanes, tangaras y más. También, hay registros extraordinarios, como el de un pájaro campana que se mató en un edificio del campus de la Universidad de Costa Rica.

Responsabilidad. Las personas que encuentran aves muertas después de golpear una ventana, fácilmente podrían responsabilizar al pájaro por “dejarse engañar”. Los vidrios no fueron ni serán puestos para matar pajaritos. Su función es el disfrute y la belleza. De hecho, las personas que más gustan de la naturaleza preferirán ventanas grandes para tener la oportunidad de regocijarse con la vista del entorno. El percatarse de la muerte de dos o tres pajaritos al año, parece no ser suficiente para convencer de que es necesario hacer algo al respecto. Mientras tanto, seguimos erigiendo trampas para las aves, donde quiera que decidamos establecer residencias, hoteles, centros educativos, empresas o cualquier otro edificio. Nos sentimos libres de culpa, porque en lo que menos pensamos es que allí podrían morir aves. Queremos luz y espacio. Queremos puestas de sol y montañas verdes. Luego de colocada una ventana, nos resistimos a colocar cualquier cosa que obstruya la vista. En cierto modo, la ventana se convierte en una extensión de nuestros ojos y nos molesta cualquier objeto que la obstruya.

Duelo y olvido. Ciertamente, las aves muertas parecen provocar muy poco interés en la mayoría de las personas. Luego de complacerse con los cantos y colores de las aves vivas, un pájaro muerto, al igual que un juguete roto, puede provocar tristeza, desencanto y eventualmente, olvido. De todos modos, la mayoría de las muertes pasan desapercibidas, escondidas entre las plantas o porque algunos animales, como gatos, pizotes y otros carroñeros, pueden desaparecer la evidencia rápidamente.

¿Hay solución para este problema? Las aves no ven el vidrio. La solución más popular: colocar una silueta sobre el vidrio es muy poco efectiva. Las aves golpean a la par de la silueta, no tienen oportunidad de aprender. Existen soluciones: marcas en la superficie externa del cristal, papel perforado, cuerdas separadas entre sí, barrotes, puntos, rayas separadas 10 centímetros entre sí. Cualquier cosa que muestre al ave que allí hay un obstáculo que evitar puede servir porque, después de todo, ninguna de las aves que golpea contra las ventanas desea morir. ¿Podemos ayudarles?

Visite www.avesyventanascostarica.wordpress.com si desea colaborar con reportes o conocer más del problema y soluciones.

Suscríbase al boletín

Ir al contenido