Deportes

San Carlos acogió a las promesas del balonmano centroamericano

Costa Rica fue campeón Junior, mientras que Guatemala quedó como campeón Juvenil, en premundiales IHF Trophy Centroamericanos que se hicieron en Gimnasio Siglo XXI.

Con el objetivo de dar fogueo a las selecciones menores de balonmano de la región centroamericana, así como reactivar las competencias internacionales en categoría menor tras una suspensión de dos años por la pandemia, el Gimnasio Siglo XXI de San Carlos sirvió como un escenario idóneo para citar a lo más selecto del Istmo al torneo 2022 IHF Trophy, para categorías juvenil y junior de cara a la primera parada rumbo al proceso mundialista en estas categorías.

Con la excepción de Belice, todas las selecciones centroamericanas respondieron al llamado y concursaron para competir con sus mejores hombres menores de 19 años para la categoría junior y menores de 17 para la categoría juvenil para aprovechar el final de marzo e inicio de abril, así como para cumplir con las disposiciones del Código Electoral del país, que prohíbe todo tipo de actividades masivas culturales y deportivas durante el fin de semana electoral contando sábado y domingo. Por las fechas de programación hechas en semana laboral y otros motivos, se dio una baja afluencia de afición a este certamen, ya que las imágenes de los juegos mostraban poco público, predominantemente, familiares de los jugadores.

Los premundiales, que se llevaron en simultáneo, establecían juegos entre las mismas selecciones el mismo día.

Equipo Junior campeón fue invicto centroamericano inédito

Los seleccionados juveniles iniciaron su andar con una estrecha derrota 31-32 frente a su similar de Nicaragua, pero se repusieron contra Honduras y le ganaron a Honduras 34-28, así como a El Salvador 47-15 y a Panamá 45-30. Sin embargo, cayeron en la fecha final ante Guatemala 22-30 para quedar por fuera del premundial IHF Trophy Centro Sur juvenil al que accedieron precisamente los verdugos del equipo nacional: guatemaltecos y nicaragüenses.

No obstante, en categoría Junior, el equipo costarricense estuvo intratable y quedó campeón invicto. Se impusieron 32-19 sobre el plantel pinolero, 68-13 sobre los catrachos, 45-24 sobre los salvadoreños, 67-17 sobre Panamá y, para cerrar con broche de oro, doblegaron 42 a 26 sobre los chapines, quienes también clasificaron junto con el equipo nacional para el Premundial IHF Trophy Centro Sur junior, en un gimnasio que lució algo más lleno en esa fecha final.

“Este es un trabajo de varios años ya, hemos hecho un trabajo bastante arduo y bueno, precisamente para eso, para acabar con esa hegemonía y demostrar que tenemos la capacidad para ganar este centroamericano”, Hanner Parra.

Tras la victoria en este partido final, el jugador Saúl Vargas de la categoría Junior destacó la importancia de haber sido campeones centroamericanos invictos, algo inédito para su historia handbolera: “Costa Rica nunca había ganado un campeonato centroamericano, es la primera vez, estamos haciendo historia y esto es grupal, estamos muy contentos y es lo mejor que nos pudo pasar”.

Vargas agradeció el apoyo de la afición que apareció durante la semana en el recinto sancarleño y rehuyó cualquier mérito personal luego de haber sido reconocido por la afición como el mejor jugador en dos partidos, incluyendo esta especie de “final” que definía el orden, aunque tanto nacionales como guatemaltecos ya tenían su campo para el premundial sub 19: “La verdad siento que esto es un trabajo en equipo, el equipo juega, hay jugadores que les toca la suerte un día de ser el mejor jugador, pero esto es un trabajo en equipo, no es personal, esto es de todos la verdad”.

El entrenador del equipo junior nacional, Hanner Parra, atribuyó el éxito inédito a un trabajo de años. “Este es un trabajo de varios años ya, hemos hecho un trabajo bastante arduo y bueno, precisamente, para eso, para acabar con esa hegemonía y demostrar que tenemos la capacidad para ganar este centroamericano”.

Parra dejó entrever que ahora contra el balonmano suramericano el nivel de exigencia será todavía mayor, pues hay tres plazas disponibles, pero el problema es que por lo general estas tienen nombre y apellidos como Brasil, Argentina, Chile y a veces Uruguay. “Ahora vamos a enfocarnos y ver en qué cosas tenemos que mejorar, aunque ganamos sabemos que tenemos muchas cosas que tenemos que seguir trabajando, porque el nivel en que vamos a competir es mucho más exigente y más alto y tenemos que seguir trabajando bajo esa línea”.

Uno de los entrenadores guatemaltecos, Helliot Arana, también hizo el balance de la participación de sus equipos, por años dominante regional en ambas categorías, y que ahora logró un título y un subtítulo en territorio norteño.

“Felicitar y agradecer a nuestra gente que está en Guatemala siguiéndonos, estamos con mucha fuerza queriendo hacer lo mejor para ellos, para nuestro país, para nuestro balonmano, estoy muy seguro de que hay muchas familias de nuestros jugadores que son parte de esto, que en el día a día los acompañan, los ayudan, los llevan, los traen, los esperan, entonces, hemos hecho el mayor esfuerzo por nuestra gente, nuestra familia, somos un grupo muy grande involucrado, hay entrenadores de las asociaciones departamentales que han aportado a muchos de esos jugadores a este proceso y el torneo en sí, podemos calificarlo bien en todo sentido, felicitar a la organización por todo el esfuerzo… Con toda la Comisión Técnica nos toca hacer un análisis en busca de mejorar porque esta es la intención de Guatemala, seguramente, los otros países centroamericanos están trabajando, pero tenemos que hacer lo nuestro”, indicó Arana.

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