Deportes Sobre protocolos médicos propuestos para volver a jugar fútbol

El ABC de los protocolos médicos para volver a entrenar fútbol

Medidas se implementarán a partir de que el Ministerio de Salud avale el reinicio de las prácticas.

Como parte de los acuerdos alcanzados en una reunión virtual entre el ministro de Deportes, Hernán Solano, las dos ligas de fútbol profesional en el país y las federaciones deportivas, se propuso establecer planes protocolarios sanitarios para un retorno seguro en el momento en que el ministro de Salud, Daniel Salas, autorice el reinicio de las actividades. La principal liga de fútbol masculino, conocida como Unafut, propuso su protocolo para cuando se pueda volver a los entrenamientos grupales o los partidos.

Con este fin se creó una comisión médica que agrupa a los 12 médicos de los equipos de la máxima categoría y otro galeno de la Federación Costarricense de Fútbol, la cual servirá de enlace con el máximo responsable de la salud pública, con el fin de adecuar los lineamientos a las directrices que se emitan de acuerdo con la evolución del COVID-19 en Costa Rica. Además, a cada galeno se le asignará la función de velar por el estricto cumplimiento del protocolo y reportar cualquier incumplimiento.

Entrenamientos breves

El protocolo toma medidas para entrenamientos y partidos, sabiendo que estos últimos no tendrán aforo antes de setiembre.

Algunas de las medidas consisten en la llegada media hora antes de los entrenamientos de galenos y futbolistas para que los primeros entrevisten y examinen a los segundos, a fin de descartar o confirmar cualquier sospecha de COVID-19 o alguna enfermedad respiratoria; posteriormente, se dividirán los equipos en grupos de hasta siete jugadores; cada hepteto tendrá asignada una mitad de cancha (por un máximo de una hora) y un camerino que solo ellos usarán.

Dentro de cada camerino, todos tienen que guardar distancias de al menos dos metros, incluso para ducharse; en caso de requerirse se emplearían ambos camerinos, pero ello significa que se trabajaría con un hepteto por vez. Además, la duración máxima por turno es media hora, tanto antes como después de los entrenamientos; para entrar y para salir, se exige el lavado de manos con agua, jabón y alcohol en gel.

Para evitar que se excedan los 14 jugadores entrenando en cancha al mismo tiempo, se les puede citar a otra hora, cuando los primeros hayan salido de los camerinos y estos hayan sido desinfectados; o enviar hasta a siete a la vez a gimnasio mientras los demás entrenan en cancha. Igualmente, la duración máxima se limita a una hora y existe la opción de rotar los roles, pero en todo caso los gimnasios y camerinos deberán estar siempre desinfectados, limpios y contar con los jabones, alcohol, agua y toallas de papel suficientes.

Las personas de utilería deben dejar la ropa de entrenamiento y los uniformes limpios a cada jugador y cuerpo técnico antes de que estos lleguen al camerino, y luego recoger las cestas con ropa sucia de los jugadores y entrenadores una vez estos se hayan ido a sus casas.

El personal de atención médica directa a jugadores (médico, fisioterapeuta y masajista) siempre deberá portar mascarillas y guantes al atender a cada jugador.

Partidos

En los partidos, los protocolos propuestos a las autoridades demandan que cada equipo lleve al estadio a un máximo de 19 jugadores, pero como las listas oficiales incluyen a 18, entonces al que no vaya a ser elegido ni para suplencia se le dé un campo aislado en la gradería. El personal técnico también sería limitado a siete personas como máximo en los banquillos y a 10 personas en total contando utileros o masajistas, así como a siete integrantes de Junta Directiva. Se propone que cada equipo llegue al estadio máximo una hora y media antes del juego y se vaya máximo una hora después de su conclusión. Y cada vez que se entra y sale del camerino, el lavado de manos y el distanciamiento físico seguirá siendo mandatorio.

Además, se prohíbe el viaje de parejas de integrantes en los buses de los equipos y los viajes de hasta cuatro horas ida y vuelta deberán hacerse el mismo día, sin concentraciones previas. En caso de necesitar un hotel, se estipula que cada integrante debe tener una habitación individual.

Por otra parte, se reducirá al mínimo necesario los efectivos de seguridad privada, la prensa enviará a un periodista y un camarógrafo del canal televisivo con derechos de transmisión y a un único periodista de radios con derechos. Asimismo, se prescindirá de los juntabolas y se asignará esa responsabilidad al delegado de campo.

Sin embargo, para este escenario, mínimo habrá que esperar al 17 o 24 de mayo, siempre que el Ministerio de Salud autorice el regreso de los torneos con base en la evolución de casos por COVID-19 al 11 de mayo, porque en caso contrario, los clubes podrían valorar la opción de declarar desierto el torneo por cuarta vez en la historia y primera en 30 años, ya que Concacaf puso como límite para concluir los torneos suspendidos el 28 de junio.

Protocolos aceptados

El 27 de abril se anunció que desde el 1 de mayo se permite el entrenamiento y práctica de deportes sin contacto y a una cuarta parte de su capacidad como máximo. Unafut enfatizó en respetar estos protocolos de distancia e higiene y adelantó que en esta primera quincena de mayo lo único que pueden hacer los equipos serán actividades de recuperación física, ya sea en gimnasios o cancha, bajo las medidas ordenadas.

Tras una reunión virtual entre los presidentes, la Unafut y la Federación, se dio a conocer que los protocolos fueron aceptados unánimemente entre ellos y por las autoridades gubernamentales, por lo que la vuelta a los entrenamientos ya es posible desde el 1 de mayo.

Incluso, se le incluyeron algunas modificaciones, como la prohibición de compartir hidratación y medio de transporte con otro integrante del personal de ida o vuelta; trabajar con un único hepteto por vez y asignarle ambos camerinos o hacer a los jugadores llegar cambiados de casa y bañarse allí si los vestidores son insuficientes, para garantizar la distancia de dos metros; poner a dos metros de distancia cada máquina de acondicionamiento físico en los gimnasios y hacer limpieza profunda de los equipos entre cada atleta.

Además, ningún medio de comunicación tiene acceso a los entrenamientos, sino que las noticias las genera cada persona encargada de prensa; se designa a tres personas administrativas de cada club como corresponsables, junto con los médicos, de que los protocolos se respeten al pie de la letra, y se acordó que, en caso de alguna dificultad, los clubes indiquen sus soluciones para cumplir los protocolos.

Como este protocolo es una guía técnica sanitaria para el fútbol, lo acordado por la Federación y el Ministerio de Deporte se haría automáticamente aplicable también para la Liga de Ascenso.

 UNIVERSIDAD buscó a través de la Asociación de Futbolistas Profesionales de Costa Rica (Asojupro) si algún futbolista de manera anónima y confidencial les había externado su preocupación sobre una o más de las disposiciones planeadas y aprobadas, sin embargo al cierre de edición no se obtuvo respuesta.

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