Deportes Deportes volvieron bajo estrictos protocolos sanitarios y médicos

Cumplimiento de protocolos facilitó el retorno de 12 disciplinas en junio

Cantones o distritos en zona naranja deben ajustarse a excepciones.

Junio se caracterizó por ser el segundo mes desde la llegada de la pandemia COVID-19 a Costa Rica donde se permitió el regreso paulatino de las diferentes actividades deportivas, con protocolos y horarios que se han ido adaptando según avanza la fase de reactivación.

A finales de mayo se tenían los horarios de 5 a.m. a 10 p.m. para práctica deportiva de lunes a viernes, mientras los domingos era de 5 a 7 p.m. Sin embargo, durante junio, la cantidad de casos subió de manera importante, especialmente en algunos sectores, lo que llevó a declarar alerta sanitaria naranja en algunos cantones y distritos donde se dio ese aumento significativo; de modo que allí las medidas son más estrictas, siendo los horarios de 5 a.m. a 5 p.m.

Aunque se tenía pensado para el 20 de junio avanzar hacia otra fase de escalada de la liberación de medidas, el aumento en los casos nuevos suspendió esa fase hasta nuevo aviso, pese a que luego el presidente de la República, Carlos Alvarado, anunció que esta fase se podría retomar próximamente en zonas que no estén en alerta naranja. Para ese entonces ya se habían autorizado 10 disciplinas en junio: ajedrez presencial,  boxeo, triatlón,  tenis de mesa, karate, billar, esgrima, halterofilia, voleibol sala y playa, y patinaje. El 25 de junio se sumó el cricket y el 30 el raquetbol, para un total de 12 disciplinas. Con los 18 deportes avalados en mayo ya hay un total de 30.

Las disciplinas vuelven con algunas particularidades: en deportes como boxeo, karate y esgrima se realizan trabajos técnicos, sin ningún contacto entre combatientes.

En ajedrez ya no basta que quienes jueguen se pongan frente a frente en la mesa. Ahora deben ponerse dos mesas de por medio, cada una con un tablero encima, de modo que a la hora de las partidas cada oponente disponga de su propio tablero y, una vez mueva sus piezas, le indique a su rival el movimiento que hizo para que lo reproduzca en su propio tablero, y viceversa.

El voleibol tendrá que iniciar entrenamientos con aforos reducidos en sala, de modo que no sean los sextetos tradicionales, sino en cuartetos; además, deben dejar explícitos los horarios de entrenamiento para las inspecciones sorpresa de la Federación. Mientras que en playa no hay ningún inconveniente y se puede practicar como siempre, pues este se juega en dúos (aun cuando el protocolo avala tres y tres).

En la halterofilia, cada pesista deberá entrar en soledad, cambiar su calzado y subirse a su tarima con su propia barra, sus discos y su magnesia para echarse en las manos a la hora de subir las pesas (combinación de barras y discos); en el patinaje y en triatlón, se deben hacer los trabajos con escalonamientos y distancias entre competidores de al menos 10 metros, y en el tenis de mesa cada jugador debe quedarse en las salas hasta que termine de entrenar; en este caso, los entrenamientos concluyen mínimo hora y media antes de que inicien las restricciones vehiculares nocturnas. En el cricket siempre debe haber alguna persona que desinfecte los bates, guantes y pelotas cada media hora, antes, durante y después de los entrenamientos. Y en el raquetbol es mandatorio desinfectar anteojos, raquetas, balones, guantes y calzado frecuentemente.

Las excepciones que admiten la práctica normal y el contacto propio del deporte están en los entrenamientos de selecciones, y el único contacto físico aceptable aparte de ese es el de personal de emergencia debidamente equipado con sus implementos de protección personal a la hora de atender lesiones de sus atletas.

Todas las disciplinas exigen que cada atleta siga los protocolos de distanciamiento físico en cada momento, porte sus propios equipos deportivos y de limpieza personal, se someta a las pruebas de medición de temperatura, al lavado de manos, desinfección de calzado y al alcohol en gel, y se encargue de limpiar y desinfectar sus implementos.

Personal a gusto con la vuelta de los deportes

En términos generales, las presidencias de los 11 deportes admitidos en junio también mostraron su complacencia y su compromiso a seguir los protocolos una vez que se anunciaba el aval por el ministro de Deportes, Hernán Solano. UNIVERSIDAD conversó con algunos de los involucrados para conocer cómo ha sido la vuelta a los entrenamientos con las nuevas reglas y las adaptaciones del caso.

El encargado de prensa de la Asociación Costarricense de Boxeo (Acobox), Alexánder Loría, explicó que en el deporte de los puños reglamentados las únicas competencias planificadas por el resto de 2020 son competencias menores; sin embargo, todo dependerá del avance de la pandemia y de las medidas tomadas por el Ministerio de Salud, que hasta el momento no les autoriza a hacer combate alguno.

“Este año la Acobox tiene planificado un campeonato nacional juvenil y cadete y algunas fechas de NSB (Serie Nacional de Boxeo), pero todo esto va a depender mucho de cómo vayan evolucionando las medidas por el COVID-19. De momento no es permitida ninguna velada ni campeonato”, anunció Loría.

Entre tanto, el jerarca de la Federación Costarricense de Patinaje, Máximo Araya, aseguró que aunque el protocolo de su disciplina sí fue avalado, el regreso a las prácticas ha sido realmente complicado, pues –con excepción del Maracaná de San Carlos– no se han podido retomar entrenamientos porque los patinódromos se ubican en parques públicos y estos no han sido autorizados a abrir.

“El patinaje se aprobó el lunes hasta hace nueve días, pero el problema es que si las instalaciones no están abiertas no podemos hacer nada. En Ciudad Colón hay un equipo; sin embargo, la Municipalidad tiene cerrado el patinódromo que está en el parque, el mismo problema lo tenemos con el Patinódromo Nacional en La Sabana; por lo que aunque el protocolo está aprobado no han podido entrenar”, explicó.

Araya agregó que en el territorio sancarleño también hicieron un protocolo propio complementario del nacional y adaptado a su realidad, ya que al estar en una zona declarada en alerta sanitaria naranja, los entrenamientos deben concluir antes de las 5 p.m. Eso sí, asegura que los reportes al 19 de junio fueron favorables.

“Por supuesto ha habido una preocupación al respecto (la alerta naranja en San Carlos), ellos sí emitieron otros protocolos por aparte además del general; entiendo que al inicio sí hubo problemas con los primeros días que empezaron a entrenar, sobre todo niños; de hecho el protocolo permite entrenar con patines a partir de los 13 años… pero en otros lugares ni están entrenando. Cañas está cerrado, Tilarán, Abangares, todas las instalaciones públicas están cerradas”.

Suscríbase al boletín

Ir al contenido