- Jóvenes acusan a docente de enviar mensajes inapropiados, de hostigamiento y de enviarles sugerencias sexuales.
- En 2016 el docente fue suspendido por acoso sexual a menor y ahora tiene una investigación abierta por otra acusación de acoso a otra menor.
Una avalancha de denuncias públicas efectuadas en la red social Facebook señalan al profesor Juan José Gómez Artavia, del Liceo Bilingüe Experimental La Trinidad de Moravia, de supuestamente acosar a unas 25 jóvenes, cuando algunas de ellas aún eran estudiantes del Liceo y a otras cuando ya lo habían dejado, así como a una menor de edad que todavía está en una de sus clases.
Sobre las denuncias, el profesor dijo a este medio que “algunas cosas son ciertas y algunas otras no”, sin especificar cada caso. Asegura que se asesorará legalmente para responder a las denuncias, en caso de que lleguen a sede judicial o administrativa.
UNIVERSIDAD sostuvo una entrevista telefónica con él por 13 minutos, en donde afirmó que si debe pedir disculpas, lo hará (ver nota aparte).
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Las publicaciones comenzaron a hacerse públicas cuando la exalumna Kendhy Valverde, contó su caso la mañana del viernes anterior. Esta joven, hoy estudiante de Derecho, subió en su perfil de Facebook una captura de pantalla en donde muestra una conversación que había sostenido con Gómez, quien era profesor de física matemática de ese centro educativo desde 2004.
Los pantallazos muestran una serie de mensajes que Gómez le envió sin obtener respuesta alguna. Los mensajes están fechados entre noviembre del 2018 y el 28 de junio pasado.
“Hola bella”, “que linda te ves en ese trahe (sic) de baño”, “Feliz año, cómo me gustas”, son parte de los mensajes que su exprofesor le envió a Kendhy Valverde, hoy de 20 años.
En la publicación, la joven etiquetó a “Jota” -como es conocido por los estudiantes del liceo- y le dijo “supérelo”.
Luego de la publicación de Kendhy este viernes en Facebook, comenzaron a sumarse los testimonios de otras estudiantes quienes también afirman haber recibido mensajes con el mismo tono de parte del profesor Gómez Artavia.
“Al llegar a noveno me empezó a dar física y además fue mi profesor guía. El primer mensaje que recuerdo de él fue antes del baile de graduación, aunque en persona siempre hacía comentarios inapropiados. Para el baile me puso un montón de mensajes diciendo que le gustaría haber estado ahí; por dicha no estuvo. Después de salir del colegio me siguió mandando mensajes y cuando yo lo bloqueaba o no le respondía me escribía desde otra cuenta de Facebook, ya que tiene varias”, dijo Kendhy.
UNIVERSIDAD logró recoger el relato de 25 mujeres que egresaron del Liceo entre los años 2004 y 2019. Ellas alegan haber vivido situaciones de acoso de parte de Gómez. Una de ellas aún es menor de edad y cuenta que el docente le escribe constantemente por Facebook.
“Este profesor me escribió para desearme feliz año, y luego me preguntó que cómo iba para quinto y yo le dije que bien, él no se me había insinuado ni nada hasta ese momento. Hasta que me empezó a preguntar sobre mis relaciones amorosas, yo en ese momento me sentí confundida; sin embargo, le seguí respondiendo por miedo a lo que podría llegar a ocurrir si no lo hacía. Luego, me empezó a decir muchos halagos y cosas así, llegó un momento dónde ya no le llegué a responder por mucha intensidad que había (él siguió escribiéndome luego de eso) incluso, en el colegio llegó a ser muy intenso”, cuenta la menor, cuya identidad se mantiene anónima a pedido suyo.
El relato de esta joven coincide en varios puntos con el de las otras mujeres que fueron estudiantes de Gómez Artavia. Con la mayoría los contactos se iniciaron por redes sociales, una vez que se graduaron.
“Me empezó a escribir hasta que salí del colegio, pero yo seguía siendo menor de edad, me escribía saludando y diciéndome que desde el colegio me veía muy bonita. Yo lo bloqueaba, pero él se abría perfiles de Facebook nuevos y se repetía el asunto”, explicó Daniela Chacón, una exalumna de 19 años. Afirma que los mensajes de “hola, linda”, se los envía desde 2017 y que nunca le respondió, pese a su insistencia. Ella guarda capturas similares de otros mensajes del año anterior.
Más allá de Facebook
En otras ocasiones, las denuncias apuntan a que el profesor no solo acosaba por medio de plataformas virtuales. Hay exalumnas que lo señalan de aparecer en lugares donde suelen transitar.
“Al principio por Facebook envió la solicitud, yo la acepté y empezó a hablarme. Empezó con preguntas normales y después me dijo que siempre le había gustado, que quería que saliéramos, yo le dije que no y que no me parecía bien que sintiera atracción por una niña. Lo bloqueo en ese momento y días después, mágicamente, salía del trabajo y él estaba en la parada e intentaba hablarme, yo lo ignoraba hasta que dejó de hacerlo”, comentó Carolina Arce, egresada de la generación 2007.
“Como por 15 días estuvo en la parada a la hora que yo salía del trabajo”, agregó.
Una de las antiguas estudiantes -quien pidió permanecer su nombre en reserva- afirma haber tenido una experiencia similar a la de Carolina Arce. Ella alega que el profesor la agregó a Facebook y sus mensajes comenzaron a subir de tono.
“Me confesó que un día se metió a la dirección de mi colegio, revisó mi expediente, vio la dirección exacta de mi casa y los números de teléfono de mis padres, el de mi casa y el mío. También conocía las paradas de bus que frecuentaba. Yo en ese momento sentí miedo y angustia. Estaba tan asustada que en ese momento decidí seguirle la corriente por mensajes. Definitivamente las cosas se salieron de control porque él pensó que ambos podíamos tener una relación sentimental, lo cual es ilógico puesto que ¿a qué niña de 18 años le gustaría involucrarse con un viejo que ronda los 40 y tantos años de edad y al cual le tiene un terror excesivo?”, dijo.
La joven afirma que dejó de responderle a Gómez Artavia, sin embargo, él insistía con mensajes inapropiados y con “alto contenido sexual”.
También hay denuncias que indican que Gómez no siempre esperaba a que las estudiantes se graduaran para iniciar los contactos. En algunos casos, según señalan las denunciantes, el acoso inicia puertas adentro de las aulas.
“Me iba muy mal en la materia de él y recuerdo que en el momento del promedio final pasé y lo único que dijo fue ‘espero que me pague de la mejor manera’ con esa mirada repugnante. Apenas salí del cole me empezó a escribir por Facebook diciendo que si tenía novio, que dónde vivía, que le gustaban las fotos que subía en vestido de baño, me decía que era una lástima que nunca me fuera a fijar en él”, dijo una joven que prefirió reservar su identidad.
Esta exalumna egresó el año anterior del colegio y su relato refleja por qué es tan difícil para una estudiante interponer una denuncia.
“Lamentablemente nunca dije nada a tiempo por miedo a perder la materia, el año o que hasta el mismo colegio me pudiera expulsar por ‘hablar mentiras de un profesor’, fue muy incómodo”, agregó.
Insinuaciones
Varias denunciantes señalan que el profesor ofrecía una copia del examen que iba aplicar a cambio de “algo más”. Así lo describe Karen Ávila, una joven de la generación 2015 que asistía a las tutorías de física-mate, la asignatura que escogió para presentar en los exámenes de bachillerato.
“A mí un día antes de presentar ese examen me dijo que me regalaba una copia del examen para que supiera qué iba a salir y lo hiciera bien a cambio de algo más. Obviamente le dije que no, eliminé todo contacto con él y fui a hacer el examen honestamente; no le dije a nadie por miedo de que me agarrara entre ojos e influyera en mi nota de evaluación o algo”, explicó Karen.
Expediente cargado
Las quejas por supuesto acoso sexual contra el profesor no son noticia nueva para las autoridades del Liceo Experimental Bilingüe La Trinidad, en Moravia. Juan José Gómez Artavia fue suspendido por 15 días en 2016 como castigo por un caso de acoso sexual contra una menor de edad y actualmente tiene una causa abierta por la misma situación con otra estudiante.
Así lo confirmó la oficina de prensa del Ministerio de Educación Pública a UNIVERSIDAD. “Nuevamente es por hostigamiento sexual contra persona menor de edad y es estudiante de la institución. El caso se encuentra en etapa de instrucción”, detallaron en el MEP.
UNIVERSIDAD intentó conversar con el director del colegio, Armando Chacón, sin embargo, no contestó a las llamadas telefónicas que se le hicieron a su teléfono celular.
Sobre la suspensión por 15 días, este medio conversó con la estudiante que lo denunció, Natalia Muñoz.
“Yo fui estudiante de don Juan José desde 2015. Ese año él me puso una serie de mensajes por Facebook que, si mal no recuerdo, algunos eran tipo “¿cómo te gustan los hombres?” o “¿cómo te gustan los besos?” y cosas así. Toda la situación se llevó con la orientadora del colegio, y decidimos poner la denuncia en el MEP”, explicó Natalia.
La joven afirmó que el proceso tomó unos dos años y “fue muy incómodo” porque igual tuvo que recibir clases con él.
“Las acciones tomadas por el colegio fueron únicamente decirle al profesor que bloqueara mis redes sociales, pero el resto siguió completamente normal. Luego de yo haberme graduado, don Juan José de todas formas volvió a enviarme varias solicitudes en Facebook para contactarme otra vez, las cuales rechacé por obvios motivos”, agregó.
“Él fue el profesor de ella todo el tiempo. Luego preguntan por qué no denuncian antes. Es una doble moral donde piden denunciar, pero los que denuncian salen trasquilados”, dijo una integrante de la comunidad educativa del Liceo y que conoció el caso.
Profesor acusado de acoso: “Si tengo que salir a pedir disculpas lo haré”
Docente reconoce que “algunas cosillas son ciertas”, pero niega cualquier acusación relacionada a ofrecimiento de exámenes a cambio de sexo.
Desde la generación 2004 hasta la generación que está a punto de salir. UNIVERSIDAD obtuvo el testimonio de 25 mujeres que señalan haber sido acosadas por el profesor de física matemática Juan José Gómez Artavia, quien tiene 15 años de laborar para el Liceo Experimental Bilingüe La Trinidad, en Moravia.
A través del teléfono de su esposa, Gómez dijo que prefiere asesorarse legalmente para dar declaraciones, sin embargo, respondió algunas consultas tras una breve conversación de 13 minutos.
Un grupo de muchachas denunció en Facebook que usted las acosó sexualmente ¿Qué tiene que decir al respecto?
– Primero que nada son exalumnas, no alumnas. Quiero asesorarme bien, hay muchas cosas que son ciertas, hay otras que no son ciertas.
¿Cuáles son ciertas y cuáles no?
– No quiero referirme a eso aún. Yo estoy esperando a entrar al colegio para ver cómo se dan las cosas en el colegio.
Ellas ponen unas capturas de pantalla de Facebook donde usted les dice “hola guapa, hola linda”, ¿confirma la veracidad de esos chats?
– Cuando llegue al colegio y vea si hay una denuncia formal ahí con mucho gusto le atiendo. Como dicen, el que nada debe nada teme. Sí hay cosillas que yo cometí como ser humano, errores, pero hay cosillas que no. Estoy en consejería y cuestiones así a nivel emocional porque esto me ha afectado mucho, ya luego veré la parte legal.
En el MEP dicen que usted tiene ahora una denuncia abierta por un caso de acoso sexual y que en 2016 a usted se le suspendió por dos semanas por un tema similar. ¿Es así?
– Sí
¿Y cuándo se le notificó sobre esta última denuncia?
– Días atrás, todavía falta que yo haga mi descargo, está en proceso.
Una de las denuncias que manejamos es de una muchacha que dice que la llevaron al edificio Rofas, donde la pusieron en un supuesto careo con usted. Lo que señalan algunas fuentes es que usted les iba a regalar la nota a estudiantes que le sirvieran de testigos y hablaran a su favor, ¿eso fue así?
– Todo eso es falso. Todo lo relacionado con puntos es falso, me gustaría saber más adelante quiénes son para proceder a que me comprueben eso. Nunca he regalado puntos. Nunca he salido con una estudiante y nunca he tenido absolutamente nada con una estudiante.
¿Nunca las ha invitado a salir?
– Invitado, sí, a exalumnas, no estudiantes.
También hemos hablado con exestudiantes que han recibido piropos de parte suya. Y no solo alumnas que ya salieron, también estudiantes menores de edad dicen que recibieron mensajes inapropiados de su parte, ¿lo niega?
– Lo niego, claro.
¿Usted nunca ha hecho comentarios del físico de sus alumnas?
– ¿En persona?
Sí, en persona.
– No, no he hecho.
¿Y en digital?
– En digital a exalumnas.
¿Nunca a estudiantes actuales?
– No, a estudiantes actuales no en este momento. De hecho debería asesorarse de la causa que está abierta en este momento. Tiene que ver lo que me están achacando, es una situación de otro compañero de gestión empresarial y me están embarrando a mí.
La denuncia periodística que tenemos es de otra menor de edad que señala que usted le escribe por Facebook con comentarios inapropiados y piropos, ya no estamos hablando de exalumnas. ¿Usted nunca ha tenido estos acercamientos digital con alumnas suyas?
– Cuando han sido alumnas mías no. Aparte, ahí se está hablando a nivel digital. El que se refirió a nivel digital con ella fue mi otro compañero. Ese asunto está muy mezclado. Yo no tengo ni el WhatsApp ni el Facebook de esa alumna.
La estudiante que lo denunció en 2016 estaba en noveno y la sanción impuesta a usted por acoso sexual fue cuando estaba en quinto, ¿no?
– Sí, ese sí fue una cuestión que yo me defendí. Si usted ve el ‘por tanto’ ahí verá por qué, de hecho pude apelarlo con ANDE. Pero no quise hacerlo porque ya me habían suspendido por 15 días.
¿Usted todavía niega haber incurrido en un caso de acoso sexual a pesar de la suspensión y que le dieron la razón a una estudiante?
– Sí porque yo lo que tuve con ella fue una conversación como la que estoy teniendo con usted, solo que digital.
En esta conversación usted y yo no nos estamos tirando halagos ni hablando de cómo se ve el otro, algo que sí veíamos en los chats, ¿usted considera que eso es acoso o no?
– Es que no soy especialista en eso, no podría contestarle (…) Sé que como ser humano cometí errores, si tengo que salir a pedir disculpas, lo haré. Soy una persona muy creyente en Dios a pesar de los errores que he cometido, pero primero tengo que ver qué va a pasar a nivel administrativo en el MEP y si pasa algo a nivel legal, porque tendría que asesorarme. Voy a esperar a entrar al colegio. Estaba tan mal que iba a renunciar del colegio, pero dije, ¡no tengo porque renunciar! Lo que hice lo asumo, lo que no hice no lo asumo. Detrás de esto hay mucha mano negra. A raíz de mi declaración, al nivel del MEP, van a salir embarradas otras personas. Son más los alumnos que me están apoyando, hay estudiantes que me dijeron “profe, lo están quemando”.
¿Entonces usted está dispuesto a retomar su trabajo como profesor después de vacaciones?
– Sí.
*Si desea informar sobre un caso similar o tiene más información sobre la situación de este colegio, puede escribir al correo [email protected]
