Con la vuelta de Johnny Araya a la Alcaldía capitalina de la mano con un pequeño partido cantonal que le facilitó su nombre para competir en las elecciones municipales del pasado 7 de febrero junto a sectores cristianos, se augura una toma de plaza de las posiciones conservadoras que estos grupos defienden a capa y espada con sus diputados en el parlamento.
Lo reconocen de alguna manera las propias palabras de Gonzalo Ramírez, diputado del partido cristiano Renovación Costarricense y esposo de Paula Vargas, vicealdesa electa por el Partido Alianza por San José que respaldó a Araya.
En la sede de la campaña en Sabana Sur, Ramírez decía la noche del domingo que llegaba a celebrar con su esposa por la democracia costarricense, en que en una misma familia hay seguidores de diversos partidos, y por la participación política que ganan los cristianos, según explicó.
Por su parte, Araya negó que la Alianza por San José le haya condicionado su apoyo a que le dé un cariz especial a su gestión, o que se haya comprometido a seguir planteamientos de los sectores cristianos. Señaló eso sí que siempre ha sido católico y seguirá siéndolo, pero mantiene muy buenas relaciones con pastores y líderes cristianos evangélicos, lo que no significa que apoye temas que han sido polémicos en el país.
¿En qué medida el voto cristiano influyó en el triunfo de Araya, tomando en cuenta que había partidos cristianos compitiendo por los cargos municipales?
La pregunta queda abierta de momento, a la espera de estudios, mientras que por parte de la dirigencia, Danny Vargas, el jefe de campaña de Araya, atribuyó el triunfo a que este se “reinventó políticamente como mucha mística”; la gente creyó en él como un hacedor de proyectos aunado al sentimiento josefino involucrado de que San José vuelva a tener progreso y las condiciones propias de una capital.
Se aprovechó la oportunidad de tener un nombre que se llamaba Alianza por San José y fue una verdadera alianza en la que estuvieron involucrados los diversos sectores, y en la que fue preponderante la figura de Johnny Araya.
“Aquí se marcó la tendencia mundial de que las personas trascienden los partidos; don Johnny demostró que más allá de una bandera es un líder político”, razonó el joven abogado, hermano del segundo vicealcalde electo, Mario Vargas.
El propio Araya atribuyó su victoria al apoyo recibido de los barrios más populosos de la capital y de los sectores más pobres, para los cuales prometió trabajar especialmente. Reconoció además que su elección fue posible porque una parte importante de liberacionistas votaron por él.
“Para mí es un gran reto iniciar un nuevo período superando lo que hicimos en el pasado, corrigiendo los errores que pudimos haber cometido, con proyectos renovados; hoy estamos celebrando una gran victoria porque hemos recibido el apoyo de un partido cantonal que parte de cero prácticamente y hoy ganamos la capital del país”, manifestó Araya, quien estuvo dos décadas al frente de la Municipalidad hasta que en el 2014 renunció para postularse como candidato presidencial del PLN.
“Esta elección ha sido posible porque hay una parte importante de liberacionistas que votaron por Johnny Araya. Inclusive muchos se equivocaron y votaron por Liberación pensando que votaban por Johnny Araya. Yo les agradezco porque en mi corazón y mi pensamiento sigo creyendo en los principios que dieron origen a Liberación Nacional; desafortunadamente el partido se ha convertido en un trampolín para el poder”, dijo Araya.
CRISTIANOS
En medio de la algarabía de los simpatizantes por el triunfo de Araya en la sede de campaña, el diputado Gonzalo Ramírez, de Renovación Costarricense – el partido del polémico exlegislador Justo Orozco – dijo a UNIVERSIDAD que celebraba junto a su esposa, “muy contento por el gran esfuerzo y porque además el sector cristiano está representado hoy en la capital de nuestro país”.
¿Ganan poder político los cristianos con esta elección en la Municipalidad de San José?
“Por supuesto –respondió -, ya el sector cristiano no quiere que otros lo representen, ahora quiere a su propia gente representándose ahí. Hemos demostrado que los cristianos podemos aportar hoy en órganos del gobierno, en ocho años de tener diputados hemos demostrado que aportamos en control político, en propuestas de leyes, en salvaguardar principios y valores de la mayoría de los costarricenses.”
“Eso, sin confrontación, ofender ni menospreciar a nadie, lo hemos hecho con altura, con posiciones formativas más que confrontativas”.
Pero se les reprocha ser intransigentes y bloquear los proyectos que adversan para que no se puedan votar en la Asamblea…
“Sí, hay cuestiones en las cuales lo vamos a seguir haciendo, porque son cuestiones de vida, de matrimonio y familia, y todavía representamos a la mayoría, y el sector que nos lleva a la Asamblea Legislativa nos lleva a defender esos principios y valores”.
“¿Y no va contra la democracia el no permitir que se vote y decida la mayoría?
“Hasta el momento nosotros hemos hecho lo que el reglamento legislativo nos permite para defender nuestros principios y valores y aportar en los temas nacionales.
Vaya a ver la fracción del (partido de izquierda) Frente Amplio, está haciendo lo mismo con una serie de proyectos, solo que no presenta 100 mociones, presenta 20, pero nunca dejan de ser las mismas 20, entonces al final si usted suma las que van quemando y las que van poniendo son cientos.
Johnny Araya:“No hay muertos políticos”
Mientras enjugaba sus lágrimas por la emoción del triunfo, sus primera palabras fueron para “agradecer a Dios, a la dirigencia que hizo un gran equipo y a toda la gente de San José que está confiando nuevamente en Johnny Araya.”
“Es un momento muy emotivo para mí, no ha sido fácil los últimos tiempos en la política, hay gente que ha querido destruirme, descalificarme, lincharme políticamente”, evocó el flamante alcalde, aludiendo a lo vivido tras la suspensión que le impuso el Partido Liberación Nacional por haber renunciado a la campaña siendo el candidato presidencial de la agrupación, en vísperas de la segunda ronda electoral en el 2014.
¿Don Johnny, siente que ahora renace como político?
-Esto (la elección como alcalde) lo que demuestra es que en política no hay muertos, que hay gente que me había enterrado antes de tiempo.
¿No necesitó el voto liberacionista para volver a ser alcalde?
-Sí necesité el voto liberacionista; pienso que un inmenso sector de personas que pertenecen al PLN votaron por mí, confiaron en Johnny Araya como confían muchas gentes que consideran un grave error lo que hizo una parte de la cúpula del PLN.
¿Qué se puede esperar en su segunda etapa como alcalde de San José?
-Quiero corresponder al apoyo y la confianza que la gente me ha dado con más trabajo, con un alto nivel de compromiso con los proyectos que nosotros estamos planteando, especialmente los que tienen que ver con las comunidades más pobres de San José.
¿Le condicionó Alianza por San José su apoyo a cierta orientación política durante su gestión?
-Para nada, hemos hecho un esfuerzo con diferentes sectores que han apoyado a Alianza por San José, y al final esto se convirtió en una plataforma multipartidista de diferentes sectores que nos han acompañado. Fue una campaña de un partido que no ha tenido ninguna estructura vertical, toda ha sido horizontal, toda ha sido voluntariado.
¿Pero usted sí ha tenido un cambio favorable a las propuestas de los sectores, no es así?
-No, yo he sido católico toda mi vida y voy a seguir siéndolo. El respecto que tengo por la iglesia cristiana evangélica lo he tenido desde hace muchos años. He tenido muy buena relación con pastores y líderes de la iglesia cristiana evangélica y me parece que no es por casualidad que se permite que una representante de ese sector vaya a ser vicealcaldesa de San José.
¿Eso implica compromisos con ese sector?
-No hay ningún cambio de ninguna de las posiciones que yo haya mantenido en el pasado. Creo que hay un respeto a posiciones que hemos mantenido y no significa que yo avale todo lo que ese sector ha planteado en temas que son polémicos en el país.
