Federaciones estudiantiles exigieron un respeto a la autonomía universitaria y un presupuesto creciente para la educación superior, de cara al arranque de las negociaciones por el Fondo Especial para la Educación Superior (FEES) entre el Gobierno y los representantes de las universidades públicas, en conferencia de prensa realizada este jueves.
Como parte de esa reivindicación de la autonomía universitaria, demandan que se eliminen los lineamientos y los indicadores que el Gobierno introdujo desde la anterior negociación, así como que se respete la disposición constitucional de destinar en el presupuesto nacional un 8% del PIB a la educación pública.
En la actividad participaron Rasheed Silva Navidad y Luis Barrantes Ramírez del Movimiento Estudiantil de Educación Secundaria (MEDSE), Claret Calderón y Marco Zúñiga (secretaria general y presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Nacional), Valeria Bolaños y Karen Marín (representante ante Consejo Universitario y presidenta de Federación de Estudiantes de la Universidad de Costa Rica), y Gilbert Díaz, presidente del Sindicato de Trabajadores de la Educación Costarricense, SEC.
Los dirigentes estudiantiles comentaron que la educación pública enfrenta una situación crítica, ante la cual el Gobierno no enfoca la enseñanza como una inversión para el futuro del país e incluso ha evidenciado intenciones de privatizarla, por lo que consideraron necesario demandar el cumplimiento de disposiciones constitucionales.
Exigieron la exclusión de las universidades públicas de los efectos de la regla fiscal, un compromiso para alcanzar el 8% del Producto Interno Bruto (PIB) que establece la Constitución Política para el financiamiento de la educación pública mediante un cronograma para los próximos tres años, la eliminación de lineamientos del Gobierno para las universidades públicas, y el establecimiento de una base de negociación para el FEES que parta del monto del año anterior, para permitir un crecimiento en términos reales.
“Nos oponemos al recorte del presupuesto para la educación superior y los intentos de condicionarlo. Ningún gobierno puede decir a las universidades qué hacer”, expresó Calderón, quien enfatizó que estos esfuerzos solo pueden interpretarse como un ataque directo a la autonomía universitaria.
Por su parte, Marín también recordó que solicitaron la recusación de la Ministra de Educación, Anna Katharina Müller de las negociaciones del FEES, pero todavía no han recibido respuesta. “Hemos solicitado que se recuse y no participe en la mesa de negociación, a raíz de las relaciones familiares que tiene con muchas personas en Juntas Directivas de universidades privadas, sus hermanos, un tío y una prima”, expresó.
En la actividad también participó Díaz, en respaldo a la inquietud de las federaciones por la situación de las universidades públicas, en la antesala de la negociación del FEES. “Vivimos momentos críticos, el presupuesto de la educación no alcanza el 8% del PIB que establece la Constitución Política y apenas llega a un 5,3%, tenemos un presupuesto recortado, al que encima le quitan ₡3.100 millones para seguridad. Si ahora no se negocia el FEES como debe ser, tendremos que recurrir a diferentes acciones”, dijo.
