Deportes Gimnasta costarricense se prepara para mundial de gimnasia artística en Liverpool, Inglaterra, del 29 de octubre al 6 de noviembre

Gimnasta Franciny Morales: “El objetivo es hacer las rutinas lo mejor posible”

Gimnasta obtuvo su clasificación en julio en campeonato panamericano de Río de Janeiro.

Gracias a su desempeño en el campeonato panamericano de Río de Janeiro, Brasil, disputado en julio, particularmente, en la prueba all around o todo evento, la gimnasta costarricense Franciny Morales Barquero logró un boleto para el mundial de la disciplina en Liverpool, Inglaterra, del 29 de octubre al 6 de noviembre.

En su periplo, por la ciudad de los cerros Corcovado, con la estatua del Cristo Redentor y Pan de Azúcar, la playa Copacabana o el estadio Maracaná, la residente en El Coyol de Alajuela alcanzó una calificación de 45,9 puntos. Aunque, en general, dicho puntaje la hizo quedar en la 24° posición de entre 50 gimnastas que concursaron en el certamen panamericano, fue suficiente para uno de los 11 cupos individuales luego de quitar los de las representantes de Brasil, Argentina, Estados Unidos, México y Canadá, pues dichos países clasificaron como equipos.

“Siento que hubo una muy buena preparación previa a Río, bastante intensa, que se tradujo en una muy buena ejecución de las rutinas”, Franciny Morales.

Con 21 años de edad, Morales Barquero tiene cerca de 17 de dedicarse a una disciplina que inicialmente era una forma de canalizar su hiperactividad y que luego pasó a ser su modo de vida, que compagina junto con sus estudios universitarios en la Universidad de Ciencias Médicas. Ahora, la gimnasta prepara sus últimos detalles en el Club Gimnástico Carbonell, donde milita, junto con su entrenador, Carlos Carbonell Suárez, quien además es el propietario fundador del club. Todo eso con el fin de lograr que su desempeño en los cuatro aparatos que tiene la gimnasia femenina: el salto de potro, las barras asimétricas, la viga o barra de equilibrio y el piso se traduzca en las calificaciones más altas posibles tras conjugar corrección técnica  con una alta complejidad.

UNIVERSIDAD conversó con ella justo antes de uno de sus últimos calentamientos previos a su viaje a territorio inglés, a poco menos de un mes.

En su criterio, ¿cuáles fueron las causas por las que se obtuvo la clasificación mundialista?

—Siento que hubo una muy buena preparación previa a Río, bastante intensa, que se tradujo en una muy buena ejecución de las rutinas.

¿Cómo va a ser ahora la preparación de cara al mundial? 

—No había tenido la oportunidad de entrenar mucho tiempo por los estudios en la universidad, pero gracias a Dios ya terminaron las clases y ahora, ya, dándole fuerte para llegar bien preparada al mundial, preparando y perfeccionando elementos para las rutinas y trabajando en los aparatos.

¿Cuáles son sus objetivos para este mundial?

—Para este mundial tenemos como le digo los objetivos de hacer las rutinas lo mejor posible y que salgan tal como las estamos trabajando, y lograr éxito en todos los aparatos.

De todos los aparatos ¿cuál o cuáles son los que más le gustan y por qué?

—Para mí, donde me siento más a gusto es en piso y en salto, porque se necesita mucha fuerza de piernas para ejecutar las rutinas y lograr unos saltos limpios; y por eso me gusta mucho trabajar esa área.

¿Y en cuál o cuáles considera que logra mejores resultados?

—Creo que también en piso y salto, al tener mucha fuerza en las piernas, ahí logro mostrar mi mejor desempeño.

¿Cómo se dieron sus inicios en la gimnasia y cuándo inició su gusto por esta disciplina?

—Tenía unos cuatro años, mi mamá no sabía qué hacer conmigo porque yo era hiperactiva, entonces al inicio me metieron en un club de natación con Juan Carlos, un amigo de mis papás, y yo disfrutaba, el club me gustaba, me sentía bien… Hasta que un día el club cerró, tuvimos que ver dónde me metían, cómo lidiaban conmigo, probamos con la gimnasia, y al inicio era como un hobby, pero con el tiempo me fue gustando, poco a poco lo agarré como algo competitivo, entré  en competiciones, y ahí sigo hasta la fecha.

¿Qué representa para usted clasificar para este mundial no solo como seleccionada, sino también como integrante de un club famoso por sacar muchas generaciones  de gimnastas de selección como Heika del Sol Salas, Mariángeles Murillo, Ariel Villalobos, Tarik Soto?

—Es para mí un gran honor representar al país y al club en que estoy, y que como usted dice han salido gimnastas de selección, y eso a la vez es un compromiso que asumo.

¿Cómo ha sido su acople con la forma de trabajo de su entrenador, don Carlos?

—Trabajamos de una manera conjunta, armónica, intensa, de mejora de mis puntos débiles y repetición continua hasta el perfeccionamiento, pero siempre procurando mi bienestar. Yo le comento si tengo alguna lesión o sobrecarga o algo me duele y entonces regulamos las cargas, me comprende y siempre saca lo mejor de mí y de sus gimnastas.

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