País

Tribunal suspende aplicación de reglamento de protección para refugio de Ostional

El Contencioso Administrativo dio luz verde a una medida cautelar que suspende reglamento de limitaciones a las construcciones en la zona de amortiguamiento del Refugio Nacional de Vida Silvestre Ostional, muy importante por la arribada masiva de tortugas marinas.

La Asociación Cívica de Nosara informó que a partir del 1 de junio, el reglamento que regulaba las construcciones en la zona de amortiguamiento del Refugio Ostional “ya no tendrá vigencia, luego que el Tribunal Contencioso Administrativo aceptara una medida cautelar que pedía su suspensión”.

Sin embargo, proclamó mediante un comunicado que el proceso legal “aquí no acaba” y que “esto es solo el principio de una lucha social en la que en la Asociación Cívica de Nosara estamos dispuestos a defender por el Refugio de Ostional y por el patrimonio de Costa Rica. Aunque se aceptó esta medida que pone en pausa el reglamento, este proceso legal continúa y podría tardar un año o más en resolverse definitivamente”.

Se trata de un sitio de gran importancia ecológica, reconocido internacionalmente por las arribadas de tortugas lora, pero también protege ecosistemas de manglares y marinos, recursos muy importantes para las comunidades y pescadores artesanales de la zona.

La normativa en cuestión rige desde febrero de 2020 y establece como área de amortiguamiento una zona de cinco kilómetros tierra adentro desde los límites del refugio, según la definió el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac). Incluye medidas como que la cobertura de área construida abarque solo el 50% del lote -con el fin de permitir que el agua se filtre y alimente los mantos acuíferos locales-, así como parámetros para limitar la contaminación lumínica en las playas, que incluyen limitaciones para la altura de las construcciones. Se trata de aspectos importantes para proteger el desove y nacimiento de las tortugas.

Ya en noviembre de 2019 y setiembre del año pasado, UNIVERSIDAD informó sobre las presiones judiciales empresariales ejercidas por el exdiputado y eterno candidato presidencial Otto Guevara, así como el empresario hotelero y de bienes raíces Jeffrey Grosshandler, quien a través de la empresa JBR Capital Ventures,  contrató los servicios del exmagistrado Ernesto Jinesta para acudir en abril de 2020 al Tribunal Contencioso Administrativo y solicitar la medida cautelar que suspende la aplicación del reglamento.

Ante este fallo favorable a los empresarios, la Asociación Cívica de Nosara anunció que evalúa con su asesoría legal qué vías se pueden tomar para lograr que el reglamento de nuevo entre en vigencia, mientras tanto hizo un llamado a “estar más unidos que nunca” y solicitó que se denuncie cualquier construcción o desarrollo que ponga en riesgo al Refugio, a través de este formulario de la Municipalidad de Nicoya.

 

“Lamentable”

Yeimy Cedeño, administradora del Refugio Ostional, calificó la decisión del Contencioso Administrativo como “muy lamentable y preocupante”, ya que según explicó, al no contar con un tener un plan regulador, este reglamento ha sido una herramienta temporal que “nos permitía atajar un poco lo que estaba pasando acá y atender los aspectos esenciales que afectan los elementos focales de manejo del refugio”.

Sobre “lo que está pasando”, recordó que Nosara es el distrito de Nicoya que ha presentado un “aumento considerable” en permisos de construcción, que es una zona de alta plusvalía que con la pandemia se ha valorizado más. “Ya vemos evidencia de un desarrollo desordenado”, apuntó.

Recalcó que hay comunidades que viven dentro del refugio “de forma compatible y sostenible” y que la idea es que “eso mismo suceda en todo el territorio, que haya oportunidades económicas pero de manera ordenada y sostenible”.

Así, reconoció que el fallo del Tribunal fue “una sorpresa”, sobre todo porque según informó el argumento detrás de la decisión fue “apelar al valor de la propiedad privada, lo cual es bastante preocupante, porque desde nuestro punto de vista el reglamento no afecta el valor de la propiedad privada en lo más mínimo. Más bien son limitaciones que no son extremas, que ayudan a ordenar el desarrollo pero no se está prohibiendo el desarrollo de construcciones”.

Añadió que “el proceso sigue, sabemos que será largo, hay que seguir juntando pruebas y armando argumentos y ser optimistas que en el corto plazo tengamos una respuesta favorable en los tribunales y tener el reglamento en ejecución mientras llega el plan regulador, que sí tomará años”.

Enfatizó que “no estamos en contra del desarrollo, ni se trata de que no queramos más construcciones o que busquemos limitar las construcciones, sino de hacer las cosas bien y asegurar que el agua no se contamine, que no se afecte a la playa que es mundialmente importante por contaminación lumínica y de agua; que no se rompa la conectividad entre las áreas naturales del refugio con las de afuera, porque el paisaje es uno solo y somos parte de lo mismo entre todos”.

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