Mariela Cruz Álvarez, la abogada y maestra de yoga que el presidente Luis Guillermo Solís nombró como embajadora en la India, volará en los próximos días al gigante asiático para ocupar el cargo que ha estado vacante en los últimos dos años. Hasta ahora, la delegación diplomática ha estado representada por un encargado de negocios y un cónsul.
Cruz dice que va muy feliz e inspirada, con toda la intención de acercar la relación de Costa Rica con India, una de las poblaciones más grandes del mundo, con una diversidad cultural y un crecimiento económico asombrosos. No en vano, en Nueva Delhi, la capital, está el mayor número de representaciones extranjeras en el mundo, observa la futura embajadora.
Añade que es muy bueno que el presidente Solís y el canciller Manuel González vuelvan los ojos hacia India, que es un tigre que se despierta y de cuya relación Costa Rica puede obtener grandes beneficios, no solo en nivel diplomático, sino cultural, comercial y en turismo.
La firma internacional de auditoría y consultoría financiera y legal PwC calculó, en un reciente informe, que en dos décadas la India pasará a ser la segunda economía mundial, superada únicamente por China.
Del 2017 al 2050, el PIB crecerá a un promedio 4,9% anual y el país pasaría de representar el 7% de la economía mundial a un 15%. Un crecimiento que se explica principalmente por el aumento en la productividad, favorecido por el cambio tecnológico y el vigoroso aumento de la población; pues de 1.250 millones de habitantes, pasaría a 1.600 millones en 2040.
Esto inevitablemente lleva a un inmenso mercado de consumidores y una economía más grande. Costa Rica tiene un incipiente y deficitario intercambio comercial con la India, con exportaciones que en el 2015 fueron de $14,2 millones (mientras que en el 2012 eran de $32 millones) e importaciones por $139,3 millones ($89,8 millones en 2012), según las estadísticas del Ministerio de Comercio Exterior.
“Cuando pienso en India pienso en un montón de países, son 29 estados, cada uno con su idioma o su dialecto, sus costumbres, con una riqueza cultural impresionante (…) India es una potencia que está despertando y poco a poco a nosotros se nos están abriendo los ojos hacia Asia y eso es muy bueno”, remarcó Cruz.
La relación y el acercamiento con el país asiático es un complemento para Costa Rica, no solo en el campo diplomático, sino a nivel humano y espiritual. Una conexión hacia el futuro, según considera la futura embajadora, quien también menciona las posibilidades que se abren en negocios de tecnologías de información y software, manufacturas e insumos médicos, turismo de salud y otros campos.
Cruz comentó que ya hay empresas indias presentes en Costa Rica y que, cuando ella estuvo en días pasados en la Promotora de Comercio Exterior (Procomer) y en la Coalición de Iniciativas de Desarrollo (Cinde), se estuvo hablando de posibilidades como establecer zonas francas.
Asimismo, se discutió cómo acceder a inversionistas, cómo promocionar el país a nivel turístico, se habló sobre nichos en tecnologías de la información. Tema en el que los indios son grandes especialistas, y contratan mucho outsourcing (servicios que brinda otra empresa).
Otro factor por el que empresas indias podrían estar interesadas en venir a establecerse aquí es que ese país tiene casi 12 horas de diferencia con Estados Unidos, mientras que Costa Rica está más cerca de la nación norteamericana y en la misma franja horaria.
La nueva embajadora resaltó lo positivo de que el país vuelva la mirada a estos nuevos destinos geofísicos y geopolíticos, pues se han dado relaciones con Malasia, los Emiratos Árabes, Corea del Sur, Singapur y China.
PROYECTOS
En cuanto a la misión que lleva a la India, dice que el primer paso, luego de la presentación de credenciales, será empezar a conocer gente y establecer relaciones “para que ellos sientan que estamos presentes”. El siguiente paso será acercarse a los embajadores latinoamericanos, hacer presente a la cancillería y darle seguimiento a todo lo que está sucediendo allá.
El marco jurídico del Ministerio de Relaciones Exteriores establece que los embajadores tienen una labor de promoción en turismo, en cultura y en relaciones comerciales.
“Nosotros somos como la primera cara de Costa Rica y después remitimos a las instituciones correspondientes para que ellos hagan el trabajo técnico. Ese acercamiento es el que tengo toda la intención de hacer”, afirmó.
Ese trabajo no será solamente en Nueva Delhi, porque hay otras ciudades muy importantes, por ejemplo Bombay, que está en la mitad del país, Bangalore en el sur, o Calcuta que es la capital cultural.
Por eso, su labor será también viajar dentro del país y en eso tiene a su favor la gran afición que ella tiene por la cultura de India. Cruz, además, señaló las posibilidades de intercambio educativo con la India, donde hay universidades que son “luminarias”y tienen programas de becas que los costarricenses podrían aprovechar.
Actualmente, muchas becas en el Ministerio de Relaciones Exteriores tristemente se pierden por falta de interés de la gente, que piensa que la India está al otro lado del mundo y no tiene nada que ver con ellos. Cruz atribuye esa situación a la ignorancia y prejuicios que existen respecto de la India, que es un país “muy avanzado en temas en que nosotros apenas estamos empezando, sobre todo en la parte de tecnología de servicios e informática y allá hay oportunidades de educación”. Comenzar a romper ese prejuicio es parte de su tarea, dijo.
ESPIRITUALIDAD
Cuando se le pregunta a la nueva embajadora qué perspectiva tiene del desarrollo del yoga en Costa Rica, aclara que ella estuvo involucrada en esta disciplina hasta el 1 de enero, fecha de su nombramiento, y que ahora es solo una práctica personal porque ella está enfocada en su trabajo diplomático.
Sin embargo, anota que el primer ministro indio, Narendra Modi, ha puesto el yoga como un instrumento de política exterior, y la ONU instituyó que el Día Internacional del Yoga es el 21 de junio.
“En todo el mundo hay clases y actividades y siento que esto es muy hermoso, porque el yoga significa espiritualidad y esa es la energía que uno siente al llegar a ese país. A pesar del montón de gente y el caos (en las calles), hay como una tranquilidad.
Pienso que el yoga, como instrumento de política exterior, es una invitación por parte de ellos a que entremos en ese ritmo que es más tranquilo; además de promover la alimentación saludable, el ejercicio”, expresó.
“Nosotros podríamos hacer las conexiones con la India para que Costa Rica se vuelva un lugar para traer toda esa sabiduría, por ejemplo la medicina ayurveda (sistema de medicina tradicional de la India) y otros conocimientos que han tenido mucho éxito, porque son tratamientos de desintoxicación del ser humano en todo nivel, no solo físico, sino a nivel mental y emocional”.
“Hay que pensar entonces en ese tipo de nuevos acercamientos, incluso en el campo de salud para que la gente venga a Costa Rica porque es un destino turístico muy hermoso y llamativo; también a descansar, a curarse y a prevenir enfermedades”, consideró la nueva representante diplomática.
Abogada y yoguini
La nueva embajadora en la India, Mariela Cruz Álvarez, es abogada por la Universidad de Costa Rica (UCR), con 26 años de práctica privada, y también laboró en la Procuraduría General de la República y en otras instituciones públicas.
Posee una Maestría en Derecho Ambiental por la Universidad para la Cooperación Internacional. Además, cuenta con estudios de posgrado en Derecho Comercial en la UCR así como en la II Universitá degli Studi di Roma, Italia.
Reconocida internacionalmente por sus conocimientos del yoga, es maestra autorizada grado 2 del Krishna Pattabhi Jois Ashtanga Yoga Institute de la India; y en
San José dirigió el Estudio Ashtanga Yoga Namasté, impartiendo talleres internacionales de esa disciplina.
