Una frágil y deteriorada red ferroviaria surgió como una alternativa durante la crisis de infraestructura que generó la reparación y ampliación del puente sobre el río Virilla (recientemente nombrado Alfredo González Flores) ubicado en la Autopista General Cañas.
Desde el 21 de enero pasado se inició la fase final para ampliar de 4 a 6 los carriles del puente sobre el río Virilla, provocando el cierre de dos carriles del sentido Alajuela-San José.
A partir de esa fecha y hasta el 7 de marzo, solamente podrán transitar sobre el puente unidades de transporte público autorizadas, vehículos de emergencia y autoridades policiales de 6 a 9 de la mañana y de 4 a 7 de la noche.
Debido a este cierre las autoridades anunciaron un plan integral y acciones para proteger y garantizar la movilidad de la ciudadanía que incluía desde la realización de teletrabajo, hasta un aumento en la frecuencia en los servicios de autobús y ferrocarril.
La contingencia obligó a que el Instituto Costarricense de Ferrocarriles (Incofer) ampliara la cantidad de servicios de tren en las rutas de Belén y Alajuela, ofreciera un servicio de parqueo en Pedregal para así facilitar el trasbordo con el tren, pusiera en funcionamiento la nueva estación ferroviaria de Alajuela y sacara trenes de Cartago para utilizarlos en la ruta de Alajuela.
Incofer en números
Actualmente el tren interurbano posee cuatro rutas que atraviesan la Gran Área Metropolitana (GAM) y conectan así Cartago-San José, Alajuela-Heredia-San José, Belén-San José, y Pavas-Curridabat.
De acuerdo con Incofer, actualmente el país cuenta con 9 trenes Apolo (de dos coches cada uno) y 4 locomotoras con 6 coches cada uno. Cada vagón posee una capacidad de 90 personas.
En cuanto a las tarifas del servicio de tren interurbano, la ruta Cartago-San José tiene un precio de ¢550, mientras que Pavas-Curridabat cuesta ¢490.
Por otra parte, el servicio de Alajuela-Heredia-San José tiene una tarifa de ¢420 y Belén-San José ¢330.
Datos suministrados por la empresa ferrocarrilera revelan que, durante el segundo semestre del 2016, el servicio de tren interurbano transportó a casi 2 millones de personas.
La ruta Pavas-Curridabat transportó 445.000 usuarios, 782.000 (Heredia), 175.360 (Belén) y 443.670 (Cartago).
Por otra parte, los accidentes de tránsito se han convertido en un fuerte dolor de cabeza para Incofer pues, cada año, el número de colisiones aumenta considerablemente.
En el 2015 se reportaron 77 accidentes mientras que durante el 2016 el número ascendió a 120; y en lo que va del 2017 ya se contabilizan 21 colisiones al tren.
El 08 de abril del 2016 se presentó uno de los accidentes más aparatosos desde que el servicio de tren se reactivó y que generó una gran cantidad de heridos. En esa oportunidad una colisión frontal entre dos trenes en las cercanías del Ministerio de Agricultura y Ganadería (Pavas) dejó un total de 106 heridos.
Este hecho también provocó el descontento de algunos diputados de la Asamblea Legislativa como Otto Guevara (Movimiento Libertario) y Mario Redondo (Alianza Demócrata Cristiana), quienes criticaron la gestión del entonces presidente ejecutivo Guillermo Santana.
Ley de fortalecimiento del Incofer
El 28 de junio pasado, el presidente de la República, Luis Guillermo Solís, firmó junto al entonces presidente ejecutivo del Incofer, Guillermo Santana, la Ley de Fortalecimiento del Incofer y promoción del tren eléctrico interurbano de la gran área metropolitana (GAM), la cual fue aprobada por la Asamblea Legislativa en abril del 2016.
El nuevo decreto permitirá la construcción de un tren eléctrico en la Gran Área Metropolitana; así como electrificar, reconstruir, rectificar y extender su red ferroviaria existente. Además le brinda a Incofer la facultad de suscribir contratos de fideicomiso con entidades financieras, dentro y fuera del territorio nacional.
Asimismo, le da al Instituto la potestad de negociar, contratar y ejecutar de forma autónoma endeudamientos internos y externos de mediano y largo plazos hasta un nivel de endeudamiento máximo del 40% en relación con sus activos totales.
Actualmente el avalúo de los activos de incofer corresponde a $1.020 millones.
La ley también brinda a la institución la oportunidad de realizar alianzas estratégicas dentro del país y fuera de él, o cualquier otra forma de asociación empresarial con otros entes públicos, privados o mixtos, nacionales o extranjeros, de reconocida experiencia en el desarrollo de infraestructura pública y proyectos de transporte ferroviario.
Incofer se encuentra trabajando actualmente en dos proyectos que corresponden a la Modernización del tren urbano y al Transporte Rápido de Pasajeros (TRP).
El proyecto de TRP se encuentra en su etapa inicial y ya fue inscrito ante el Ministerio de Planificación (Mideplán). Por su parte, la modernización del tren urbano está en proceso de licitación para la compra del equipo rodante y cuenta con un fideicomiso del Banco de Costa Rica (BCR) por $40 millones.
Entrevista Christian Vargas, Presidente Ejecutivo Incofer
En momentos en que el país afronta una crisis vial, muchos costarricenses optan por utilizar el tren para desplazarse a distintas partes del país. El presidente ejecutivo del Incofer, Christian Vargas, explicó a UNIVERSIDAD las medidas que ha tomado la institución para dar abasto con el servicio en Alajuela tras el cierre del puente sobre el río Virilla.
Además señaló los nuevos planes que tiene el Incofer para brindar un servicio de mejor calidad.
La red vial del país está colapsada y en proceso de recuperación. ¿Cómo están viviendo este proceso? ¿Qué medidas han tomado?
-Nosotros para actuar ante esta contingencia que hay sobre el puente del río Virilla desde el 21 de noviembre del año pasado pusimos los trenes a funcionar todo el día como para que la gente se fuera familiarizando. Si bien es cierto ya funcionábamos en horas pico, pero desde esa fecha estamos rellenando con horarios nuevos y en horas valle. Todo esto hasta que llegara la hora de la verdad que se presentó hace dos semanas. Nos faltaba poner en servicio Alajuela y entonces empezamos a coordinar con el MOPT, CTP, Policía de Tránsito para ver cómo le hacíamos frente a esa problemática.
En el lado de la ruta de Belén hicimos un convenio con la empresa privada de Pedregal para ofrecer un servicio de parqueos y que la gente dejara los vehículos ahí y tomara el tren. Esa fue una medida que fue como parte de la intermodalidad.
Desde el 21 de noviembre hemos tenido muy buena aceptación en el sentido de que transportábamos 16 mil personas por día, la siguiente semana 18 mil y la tercera semana 19 mil (en todas las líneas). Eso nos motivó bastante y aún faltaba que se presentara el fenómeno de cierre del puente.
Entramos a funcionar en Alajuela y los primeros días no dábamos abasto con los trenes que pusieron que eran sencillos de dos coches. A tal punto tuvimos que ampliar la capacidad de esos trenes y hacerlos dobles; es decir, dos sencillos pegados. Para eso tuvimos la necesidad de sacar esos trenes de lo que era el servicio de Cartago. Básicamente es como hemos actuado ante esta crisis por el cierre del puente.
Hace pocos días algunas personas reportaron que los trenes se vararon en las cuestas. ¿Cómo resolvieron?
-Eso se debe a muchos factores. En algunos casos ya van cargaditos. Por otra parte cuando son los trenes tipo Apolo (sencillos o dobles) hay un fenómeno de que a veces cae algún aceite sobre los rieles de las mismas máquinas y eso los hace patinar. Otras son porque desgraciadamente ha habido una falla mecánica y entonces el tren no puede subir. Esto nos sucede más en la ruta de Heredia porque cuando se pasa por el puente del río Virilla, el tren pierde impulso para subir las pendientes y esto hace que pierda potencia. También se presenta yendo hacia Cartago, cuando uno pasa por por el puente sobre el río Birrís.
Don Christian: ¿Cuál es su evaluación de esta crisis?
-En estos momentos en donde se presentan estas situaciones en el transporte público y en general, la parte tiene que acomodarse y ver cómo actúa. Ya hemos notado como que la situación se ha ido normalizando y aprendido a no tomar medidas tan rápido porque en la logística de trenes no es conveniente estar alterando rápidamente horarios para esto o para lo otro. No es esa la política porque la vía es una sola y si nosotros afectamos un tren y cambiamos horario, tenemos que cambiar de horario absolutamente todos los trenes de manera paralela. Así que la semana pasada pusimos más trenes en Alajuela por la demanda pero no variando horarios. La situación está estable.
Ustedes quieren implementar el proyecto de transporte rápido de pasajeros (TRP). ¿En qué consistiría?
-A grosso modo te digo que es un proyecto muy bonito y muy ambicioso. Es un proyecto que iría elevado (segundo piso), vía viaducto, doble vía, certificado, con andenes aéreos, ascensores para discapacitados y ocuparía el derecho de vía actual.
¿Es una idea o ya tienen algo más concreto?
-Todo esto pasa por una serie de filtros. Ya nosotros lo inscribimos como proyecto ante Mideplán con estudios de factibilidad. El BCIE ha colaborado mucho elaborando estos estudios y también Casa Presidencial. Ahora seguirán todos los pasos que correspondan.
Según información suministrada por ustedes, el TRP costaría $1.600 millones. Con la nueva ley ustedes se podrían endeudar por $450 millones; es decir, les faltaría conseguir más de $1.100 millones. ¿Cómo van a conseguir ese dinero?
-Estamos viendo a ver. Usted sabe que ningún ferrocarril en el mundo es rentable y menos si es de pasajeros. No es rentable desde el punto de vista de que se financie con los boletos. Tal vez se logre la operación del mismo pero lo que es compra de equipos y vías obviamente no, el Estado tendría que hacer una inversión aparte. ¿Qué ganamos con eso? Ganamos menos congestión en las calles, menos contaminación, mejor uso de nuestro tiempo. Con esto de usar y retomar el uso del servicio público es que se recupera la inversión del Estado. El Estado también tiene una capacidad de endeudamiento, entonces con esas limitaciones que hay es muy difícil desarrollar las obras. Ahí es donde tenemos que ver si hay un Gobierno amigo que quiera ayudar o asociaciones públicas o privadas que quieran intervenir y hacer sus inversiones. Al cabo de los años van recuperando esas inversiones.
¿Tienen alguna idea de algún establecimiento o gobierno amigo que esté interesado?
-No. Lo que sí le puedo decir es que vienen muchas empresas a querer hacer el trabajo acá pero obviamente en el entendido de que el Estado ponga su parte porque nadie viene a hacer nada gratis. Aquí hemos tenido la visita de checos, chinos, franceses, españoles, suizos y otros lugares.
¿Se podría visualizar esto próximamente?
-La compra de trenes para el proyecto de modernización del tren urbano es lo más próximo. Ya tenemos el financiamiento por parte del BCR. Podría estimarse que sean de 10 a 15 trenes. Tenemos que hacer una licitación y ahí escoger.
¿Y el TRP?
-Ya el proyecto está inscrito, ahora tendría que desarrollarse, hacer el contrato, hacer estudio de factibilidad y demás.
