Opinión

Alrededor de algunas creencias bíblicas

En diferentes momentos, he escuchado cosas como estas: -Si no está en la Biblia no lo acepto, -Tengo la Biblia verdadera

En diferentes momentos,  he escuchado cosas como estas: -Si no está en la Biblia no lo acepto, -Tengo la Biblia verdadera, o preguntan -¿Usted cree en Dios o usted es cristiana?  Lo señalado anteriormente acusa un nivel muy precario de información religiosa.

En términos generales, en algún periodo de nuestras vidas, hemos sido fanáticos de  algo: política, religión etc.  En la cultura en la que nos ha tocado vivir es entendible  estar condicionados, y fácil  caer en circunstancias  tan deficitarias.  El fanatismo es negativo porque vela la inteligencia, la paraliza y se termina viendo las cosas en un solo sentido.   Esta condición es propia de la tercera dimensión, que hoy en día está siendo superada por la apertura a la dimensión universal.

Para nadie es un secreto que las religiones tradicionales  han estado cimentadas en el miedo.  El miedo es lo que tiene a los creyentes sujetos al dogma, a un pasado sin atisbos de lo que realmente vinimos a hacer cuando llegamos al mundo.  Este estado de dependencia de la gente  ha sido  explotado al máximo por curas y pastores, salvo excepciones de rigor.

En la cultura religiosa han coexistido dos niveles de conocimiento: uno externo o exotérico representado por las religiones tradicionales, y otro  llamado esoterismo u ocultismo, no accesible al gran público porque es erudito y se necesita estar saturado de las religiones exotéricas para emprender la búsqueda de instancias más altas.  En estos momentos esto ya no cuenta, porque entramos en una era de luz y los misterios ya no se ocultan,  están para todos.

En el caso de la Biblia, todo empezó con una tradición oral que fue pasando de  generación en generación hasta que se concretó el idioma que permitió la forma escrita.   De más de cien manuscritos que se presentaron en el Concilio de Laodisea, para escoger los que entrarían en el canon cristiano, solo se tomaron tres, los más sencillos, presuntamente asequibles a la masa humana.   El evangelio de Juan es distinto, revela aspectos  de gran sabiduría y para lo cual se necesita mayor conocimiento. Al resto de los manuscritos los tacharon de apócrifos o sea falsos.  El proceso en esas condiciones -Era de Piscis- se justifica porque se iniciaba una era de gran oscuridad en donde los misterios se ocultaron al vulgo.   En el inicio de la era cristiana, se persiguieron, martirizaron y mataron a los poseedores de manuscritos muy valiosos que fueron enterrados unos en unas cuevas del Mar Muerto y otros en el Alto Egipto en Nag Hammadi.

En cuanto a las alteraciones bíblicas, se han contabilizado más de veinte, debidamente confirmadas, de las cuales vamos a citar unos pocos ejemplos.   San Jerónimo adulteró  la Vulgata   Latine inclinándola a intereses espurios; enmiendas de los Escribas; contradicciones y errores históricos; improbabilidades e imposibilidades.   A pesar de tantas manipulaciones, la Biblia aún conserva  mucha sabiduría.  Es claro que de esto no se trata, porque la Biblia ya cumplió su cometido, con excepción de aquellas personas que prefieran seguir el camino trazado por las religiones que ya se agotaron.

Un nuevo orden está entronizándose gradualmente desde el principio del siglo pasado en nuestro mundo.   La gente lo siente pero no sabe explicarlo.  Todo se está acelerando hacia nuevos paradigmas, que regirán los próximos dos mil años de esta era o nuevo orden de Dios, bajo otras influencias cósmicas evolutivas.   Reiteramos, un nuevo ciclo evolutivo ha comenzado que no incluye fanatismos, condicionamientos, prejuicios.  Hay que dejar de juzgar, hay que aprender a amar porque todo es Dios.  Hay que  transformar el ego en virtudes para ser aceptado en este nuevo intento de ampliar la consciencia, esencia  para que todos -sin excepción- podamos aprender a vernos más allá de la forma física, ya que  lo que importa es el amor que dimane del corazón  humano.

En resumen: Con el arribo de  los Nuevos Tiempos, las religiones llegaron a su fin.   El poder que ejercían los clérigos de todas las denominaciones ha venido decantándose   con el paso de los años. Una nueva progenie libre de fanatismos, prejuicios, condicionamientos y otros, se está instalando en nuestro mundo.   Un proceso nuevo, fundamentado en el conocimiento, aprendizajes y tecnología, espera a aquellos que logren transformarse en seres humanos auténticos, libre de  vanidades humanas.

Vale la pena reflexionar  en la importancia que tiene la vida.   Como dijo Shakespeare : SER o NO SER. Usted escoge.

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