Universitarias

UCR y AyA trabajan en proyecto para tratamiento de aguas residuales

La carrera de Salud Ambiental de la Universidad de Costa Rica ratificó su colaboración en el proyecto de tratamiento de aguas residuales que lleva a cabo Acueductos y Alcantarillados (AyA), como parte del Programa de Agua Potable y Saneamiento (PAPS).

Desde el 2015 está en funcionamiento la Planta de Tratamiento Los Tajos, la mayor planta de tratamiento de aguas residuales de Centroamérica, desarrollada por Acueductos y Alcantarillados (AyA).

La planta se alimenta de una red de recolección de aguas residuales, la misma que esta institución se ha dedicado a restaurar y ampliar en los últimos años en el Gran Área Metropolitana.

A partir de ahora, los trabajos que se realicen en esta planta y las redes de recolección de aguas que la alimentan serán observados de cerca por la administración, cuerpo docente y estudiantes de la carrera de Salud Ambiental de la Universidad de Costa Rica (UCR).

Xinia Alvarado, directora de esta carrera, explicó que es una constante en Salud Ambiental que los profesores y estudiantes tengan contacto con proyectos que se estén desarrollando a nivel nacional.

Afirmó que el plan de estudios da una gran relevancia a las giras y los trabajos de campo, porque su profesión así lo amerita. Es por eso que considera importante el acercamiento que están teniendo con el AyA en este proyecto.

“El tener esta oportunidad de que nuestros estudiantes, a partir de los diferentes planes que tiene el plan de estudios, puedan ir a observar, a preguntar y a compartir con otros profesionales de su misma disciplina y de otras disciplinas, es fundamental”, explicó.

Alvarado dijo que dentro de las posibilidades que ofrece esta alianza, aparte de las visitas de campo, está la posibilidad de realizar un análisis del impacto ambiental del proyecto de primera mano. “En este proceso de construcción, tenemos la oportunidad de ver en vivo y a todo color cómo el proyecto, en su etapa constructiva, produce diversos problemas ambientales”.

La directora afirmó también que es importante realizar un análisis del impacto a futuro que va a tener este proyecto en nuestro país.

“Desde la salud ambiental, este proyecto tiene gran relevancia, ya que va a contribuir a mejorar la calidad del agua de nuestros ríos y la calidad del suelo. Esta iniciativa es un escenario abierto para que tanto profesores como estudiantes puedan observar y proponer soluciones positivas a algunos de los problemas ambientales que se presentan en nuestra sociedad”.

Alexis Rojas, de la unidad ejecutora del Programa de Agua Potable y Saneamiento (PAPS) del AyA, explicó que el principal interés de esta institución al involucrarse con la carrera de Salud Ambiental en este proyecto, es el intercambio de experiencias y conocimientos con los docentes.

“Queremos escuchar los comentarios y críticas que tengan los docentes de Salud Ambiental de la UCR con respecto al proyecto”, dijo.

Rojas también dijo que esperan que este proyecto se convierta en un espacio de aprendizaje práctico para los estudiantes, donde incluso puedan tener la oportunidad de realizar su Trabajo Final de Graduación.

“Ya que nosotros contamos con profesionales en Salud Ambiental, Gestión Ambiental, Química, Biología, Ingeniería Forestal y demás, ellos están interesados en ese roce interdisciplinario, y la experiencia que se obtiene al trabajar con un proyecto de esta magnitud en la vida real, no quedarse solo en la teoría”, explicó.

Continúan los trabajos en las redes de recolección

Rojas explicó que pese a que la planta de tratamiento de aguas residuales está trabajando desde 2015, no opera a toda su capacidad, pues para que esto suceda, se debe terminar la red de recolección de aguas.

De acuerdo con la unidad ejecutora del PAPS, una vez terminados los trabajos el costo total del proyecto habrá sido de entre $600 y $800 millones. Foto de la Planta de Tratamiento Los Tajos, cortesía de la unidad ejecutora del PAPS.

“Esto es complicado, ya que la red es sumamente amplia. Se espera que este proyecto cubra a más de un millón de personas, en el área más densamente poblada del país, como lo es el Área Metropolitana de San José”, afirmó.

Hasta el momento se han completado trabajos en las redes de recolección de aguas residuales de varios distritos distribuidos a lo largo de 13 cantones,  entre los que se encuentran Montes de Oca, Moravia, Coronado, Tibás, Goicoechea, Curridabat y San José.

Actualmente se están realizando trabajos en los sectores de Bajo Piuses, Sabanilla y Granadilla. Se espera terminar con la totalidad de las obras en los canales de recolección para el año 2022.

Alexis Rojas explicó que en este momento le están dedicando especial atención al proceso de divulgación de este proyecto, debido al impacto que las obras en los sistemas de recolección tienen en las comunidades.

Primero, en cuanto a cierre de calles y la congestión vial que esto genera, para que las personas entiendan qué trabajos se están realizando y la importancia de estos.

En segundo lugar, una vez que las redes de recolección de aguas residuales estén en óptimas condiciones, se procederá a implementar el sistema de recolección en los hogares, y quieren preparar a la gente para este proceso.

El sistema funciona a través de conexiones intradomiciliarias. Para este proceso, se saca tubería, que pasa por la calle. Esta está conectada con el sistema que posteriormente lleva el agua a la planta de tratamiento. De esa tubería se sacan unos ramales, que van para cada una de las casas.

De acuerdo a Rojas, el proyecto es una necesidad pues Costa Rica tiene problemas con la falta de tratamiento de aguas residuales y el excesivo uso de los tanques sépticos.

“Estos últimos muchas veces tienen filtraciones, o fallas que provocan que el agua deba drenarse a ríos”, apuntó. Una vez entre en funcionamiento el sistema de conexión intradomiciliaria, se dejará de dar el servicio de mantenimiento a los tanques sépticos.

También dijo que desde ya quieren informar a las familias que a partir del 2021-2022 se tendrá que empezar con el proceso de conexión al sistema.

Kenneth Araya, también de la unidad ejecutora del PAPS, explicó que se va a empezar con un fuerte proceso de sensibilización a nivel nacional, donde se trabaje con las distintas comunidades para explicar este proceso y lo que implica para cada casa la conexión al sistema de tratamiento de aguas.

“Queremos sensibilizar a las personas. Decirles que se conecten al sistema porque es un beneficio para la salud de ellos, para el ambiente y para las futuras generaciones”, afirmó.

Araya dijo que ellos dejarán una prevista en las aceras de cada una de las casas, donde posteriormente cada dueño deberá encargarse de realizar los trabajos correspondientes al sistema de tratamiento de aguas de su hogar para conectarlo a esta tubería.

“La idea de esta campaña de sensibilización es que cuando llegue el momento de hacer la conexión, las casas tengan listos los trabajos necesarios para poder realizar la conexión y así agilizar el proceso”, terminó.

Suscríbase al boletín

Ir al contenido