El ingeniero Guillermo Santana apela a su trayectoria de 31 años como universitario, en los que ha sido catedrático de la Escuela de Ingeniería Civil e investigador del Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (Lanamme), entre otras actividades, para llegar al Consejo Universitario.
Santana es uno de los dos aspirantes a ocupar un puesto en el Consejo Universitario para el periodo 2018-2022 por el Área de Ingenierías, y este es un resumen de la entrevista que sostuvo con UNIVERSIDAD sobre su propuesta y algunos temas de interés.
¿Por qué quiere llegar al Consejo Universitario?
-Considero que desde el Consejo Universitario se puede trabajar de mejor forma para hacer que la Universidad de Costa Rica siga creciendo. Hay necesidad quizá de contemplar políticas un tanto más frugales, dentro de la Universidad de Costa Rica tenemos una obligación moral con el Estado costarricense, que es quién sostiene esta universidad.
Recientemente se firmó el acuerdo del FEES para el 2018 en el que se incrementó el presupuesto para las Universidades Públicas en un 3,7%, pero se da en un contexto de crisis fiscal. ¿Cómo valora este acuerdo? ¿Fue adecuado para las necesidades de la Universidad?
-Hay una necesidad en el país de entender cuáles son los predicamentos a los cuales está sometido en este momento el Estado costarricense, en cuanto a su capacidad de ingresos y además, en cuanto a su liquidez; por tanto, creo que es importante que respetemos los acuerdos del FEES. Pero también es importante que a futuro, en lo que corresponda negociar, estemos vigilantes de que los logros alcanzados hasta ahora no echen marcha atrás. Debemos revisar nuestras propias necesidades económicas y, a partir de ellas, entonces planificar el crecimiento para los próximos cuatro o cinco años.
La procuraduría de la ética emitió recientemente un informe en el que insta al Consejo Universitario a que se convoque una plebiscitaria y se valore si se instaura o no un proceso administrativo contra el rector Henning Jensen, por el nombramiento de su hija en el CIL. ¿Cómo valora usted lo actuado por el Consejo Universitario en este caso?
-En la Universidad la defensa de la autonomía universitaria es inclaudicable. Esta universidad debe estar muy clara en que la base de nuestra propia operación y nuestro propio ser es esa autonomía. La instancia de la Procuraduría no la conozco a fondo, no conozco el dictamen ni los por tantos, no podría opinar específicamente sobre estos puntos, también debo decir que no conozco exactamente todos los procedimientos que se han seguido hasta la fecha, pero creo que el Consejo Universitario debe ser en primera instancia garante de que la autonomía universitaria se respete.
Se está negociando la Convención Colectiva de la UCR y en este proceso hay temas álgidos como la definición del porcentaje de anualidad. ¿Qué debe resultar de esta negociación? Y en el tema de la anualidad, ¿cuál es el punto adecuado?
-Me parece importante esa necesidad de frugalidad, revisar nuestros esquemas salariales para estar seguros de que estamos remunerando justamente a todos los trabajadores por el trabajo que están haciendo, pero que tengamos siempre en mente la estabilidad financiera de la institución. La responsabilidad que recibimos del Estado costarricense cuando el Estado nos financia, esa responsabilidad nos obliga a garantizar la estabilidad financiera de la institución. La anualidad es un logro, es una ventaja que tienen los funcionarios, debe ser consultada, debe ser traída a la mesa de discusión de las políticas de la Universidad de Costa Rica. Desde el Consejo se pueden establecer esas posibilidades de vínculos en concreto. Siempre con respeto a la autonomía universitaria.
Como aspirante del Área de Ingeniería, ¿cuáles considera que son las principales necesidades de esta área?
-Como sociedad estamos enfrentados a retos importantes. Estamos viviendo el impacto de dos huracanes, esto nos indica que cosas tan importantes como la variabilidad climática a partir del cambio climático nos obligan a repensar todas las demandas y planteamientos que se hacen en las carreras universitarias de Ingeniería. El reto que se tiene en ingeniería es muy grande, de ser innovadores, nuestra facultad de ingeniería tiene 70 años de existir, ha contribuido enormemente al desarrollo. Desde el Consejo Universitario hay que propiciar esas directrices de innovación dentro de las carreras de Ingeniería para lograr atender los retos que tenemos.
De llegar al Consejo Universitario, ¿cuál sería su prioridad?
-La oportunidad de renovar las carreras de Ingeniería, de pensar nuevas temáticas que puedan involucrar la Biología y Medicina como parte de la Ingeniería, porque a eso vamos en el desarrollo económico y tecnológico.
Creo que la tarea urgentísima que asume una persona que ocupa un cargo en el Consejo Universitario es resolver los problemas que nos está generando el acuerdo del FEES, seguir garantizando el financiamiento apropiado para las universidades públicas, pero desde la perspectiva de lo que se necesita para los próximos años.
