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Instituto Clodomiro Picado participó en creación de antídoto contra veneno de mamba negra

Es el primer intento que se hace en el mundo para desarrollar el prototipo antiveneno de anticuerpos humanos, el cual promete ser más compatible y generar menos reacciones.

El Instituto Clodomiro Picado de la Universidad de Costa Rica (ICP-UCR) se ha destacado a lo largo de los años por desarrollar sueros antiofídicos que combaten la mordedura de serpientes y, recientemente, dio un paso adelante en esta materia, al participar en la creación de un nuevo antídoto contra el veneno de la serpiente africana Dendroaspis polylepis, mejor conocida como mamba negra.

La creación del antiveneno se dio en colaboración con la empresa privada Iontas –dedicada a descubrir y optimizar anticuerpos humanos para la creación de medicamentos–, la Universidad Técnica de Dinamarca, que brindó sus conocimientos especializados para caracterizar los venenos, y el Instituto Clodomiro Picado.

El antídoto que actualmente se encuentra en etapa experimental es innovador, pues se produjo de un panel de anticuerpos humanos.

Es la primera vez que se desarrolla un suero usando anticuerpos humanos, puesto que normalmente su creación parte del plasma de animales hiperinmunizados, lo que permite anular el envenenamiento de forma efectiva; pero, al ser de origen animal, puede provocar reacciones alérgicas en las personas.

Al ser un antídoto que parte del plasma de humanos, promete ser más compatible con los organismos y presentar una menor probabilidad de reacciones perjudiciales para las personas a las que se les aplique.

UNIVERSIDAD conversó con José María Gutiérrez, investigador del ICP-UCR y parte de los especialistas que impulsaron la innovación, quien nos amplío sobre los alcances de esta investigación y la importancia que tiene el descubrimiento a nivel mundial.

¿Cuál es la incidencia de la mordedura de la mamba negra?

–La Organización Mundial de la Salud (OMS) ubica a la mamba negra entre las especies que causan mordeduras con frecuencia y que son capaces de producir envenenamientos severos. No se conoce a ciencia cierta la verdadera incidencia, pero sí ocurren con frecuencia y son potencialmente graves.

¿Cuáles son las características de su mordedura y su efecto sobre las personas?

–Los venenos de mambas son ricos en neurotoxinas, es decir, en toxinas que actúan en el sistema nervioso. Por ello, los efectos van a ser consecuencia de alteraciones en el sistema nervioso periférico, tales como caída de los párpados, dificultad de deglución, producción excesiva de saliva y lagrimeo, contracciones involuntarias de músculos y, lo más importante, parálisis de los músculos de la respiración, lo cual puede causar la muerte por asfixia. Estos efectos se pueden presentar rápidamente, en el transcurso de la primera hora luego de la mordedura.

¿En qué lugares se ubica esta serpiente?

–Únicamente se encuentra en el continente africano.

¿Cómo desarrollan este tipo de sueros en el Instituto Clodomiro Picado?

–La forma como se producen antivenenos en el Instituto Clodomiro Picado, y en el resto de laboratorios del mundo, consiste en inyectar pequeñas dosis de venenos en caballos -a los cuales no se les ocasiona daño- y estos desarrollan una respuesta inmune (producción de anticuerpos) contra los componentes del veneno.

Al cabo de varias inyecciones, se obtiene sangre de estos animales, que contiene grandes cantidades de anticuerpos antitoxinas del veneno, específicamente en el plasma. Posteriormente, se da un proceso de purificación química para extraer los anticuerpos.

En síntesis, el suero antiofídico consiste en preparaciones de anticuerpos de caballo capaces de neutralizar toxinas de venenos. Esta es la forma tradicional de producir antivenenos o sueros antiofídicos.

Dado que fue una investigación en conjunto con Iontas y la Universidad Técnica de Dinamarca, ¿qué papel jugó el Instituto Clodomiro Picado?

–Este fue un proyecto colaborativo entre las tres partes, cada una aportando su propia expertise. En el Instituto Clodomiro Picado efectuamos inicialmente el análisis detallado de la composición del veneno de la mamba, es decir, identificación de cada componente del veneno.

Además, identificamos los componentes tóxicos de dicho veneno, que son principalmente neurotoxinas.

Con esa información los colegas de Dinamarca y de Inglaterra desarrollaron los anticuerpos humanos recombinantes capaces de neutralizar estas toxinas. Finalmente, en el Instituto Clodomiro Picado efectuamos el análisis de la capacidad de esos anticuerpos para neutralizar las toxinas y, a partir de ahí, se identificaron los anticuerpos más eficaces.

¿Cómo funciona el suero en el cuerpo de una persona que ha recibido una mordedura de esta serpiente?

–El suero o antiveneno está compuesto por anticuerpos, que son proteínas capaces de reconocer, unirse y neutralizar una determinada toxina. Entonces, cuando una persona sufre un envenenamiento por mordedura de serpiente y es tratado en un centro de salud, se le administra el antiveneno (anticuerpos) por la vía intravenosa. Esos anticuerpos en el organismo se unen a las toxinas y las neutralizan, es decir, les eliminan su capacidad para generar daño en los tejidos y para causar parálisis.

¿En qué lugares lo están desarrollando? ¿Ya se ha aplicado a personas?

–El Instituto Clodomiro Picado y otros laboratorios en diversas regiones del mundo producen antivenenos para tratamiento de envenenamiento ofídicos en África, empleando la tecnología tradicional en caballos.

Por ejemplo, el Instituto Clodomiro Picado, en los últimos dos años, ha enviado a África 30.000 frascos de antiveneno, lo cual ha servido para tratar a por lo menos 10.000 personas.

Ahora bien, el nuevo antiveneno que se desarrolló en esta investigación es un antiveneno 100% humano y está aún en una fase experimental preliminar. Hace falta mucho más trabajo para el desarrollo completo de este nuevo tipo de antiveneno, lo cual demorará años. Pero este trabajo es el primer paso en esa dirección.

¿Qué representa el desarrollo de este antídoto a nivel mundial?

–Es la primera vez que se logra producir un antiveneno 100% humano, es decir, basado en anticuerpos de origen completamente humano, mediante la tecnología del ADN recombinante.

Esto es un paso importante en la dirección de producir, eventualmente, antivenenos humanos, los cuales, en principio, no inducirían reacciones adversas en las personas que los reciban. Para el Instituto Clodomiro Picado, representa una excelente oportunidad para aprender este tipo de tecnología y aplicarla en el futuro en nuestro país, además de participar en una investigación internacional de este tipo.

¿Qué posicionamiento da a la UCR el desarrollo de este tipo de fármacos?

–El Instituto Clodomiro Picado tiene interés en aprender esta tecnología y emplearla en el desarrollo de sus investigaciones y en el desarrollo tecnológico de antivenenos y otros productos en Costa Rica. Es importante para nuestra universidad no quedarse rezagada en estas nuevas tecnologías de producción de anticuerpos.

¿Qué sigue en este proceso de investigación?

–La investigación colaborativa con Dinamarca e Inglaterra continuará con el desarrollo de anticuerpos recombinantes contra otras neurotoxinas del veneno de mamba, con la expectativa de que, eventualmente, se tenga una mezcla de anticuerpos capaces de neutralizar la totalidad de las toxinas de este veneno.

Posteriormente, se planea desarrollar anticuerpos de este tipo contra otros venenos de importancia médica.

En un momento futuro, cuando estos desarrollos se hayan completado, se plantearía la posibilidad de evaluar la eficacia y la seguridad de estos productos en ensayos clínicos en personas que sufran envenenamientos ofídicos, pero para esto falta mucho tiempo.

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